En el mapa elaborado por la Universidad norteamericana Johns Hopkins, que muestra en tiempo real la propagación de la pandemia de coronavirus en el mundo, en toda la vasta extensión de Rusia apenas aparece un punto rojo.
Lo cierto es que 253 casos confirmados (hasta el 20/03) de Covid-19, es una cifra muy moderada para un país de más de 144 millones de habitantes, que comparte fronteras con China y otros de los más afectados.
Coronavirus COVID-19 Global Cases by Johns Hopkins CSSE
Más allá de las teorías conspirativas de algunos, las razones parecen estar en la rapidez con que se tomaron medidas preventivas y de contención.
Desde el mismo inicio se cerraron las fronteras con China y otros países de Asia. Luego se limitó la conexión aérea con los países de la Unión Europea cuando el coronavirus comenzó a expandirse en esa zona, y se suspendió la entrada de extranjeros a través de la frontera con Polonia y Noruega. El Gobierno ruso cerró las fronteras con Bielorrusia y había restringido también la comunicación ferroviaria con Letonia, Moldavia y Ucrania para prevenir la propagación de la enfermedad.
Se decidió restringir del 18 de marzo al 1 de mayo la entrada de ciudadanos extranjeros al país. Hasta ese momento la cuarentena para los recién llegados de las zonas con casos era obligatoria y los extranjeros podían ser deportados en caso de violarla.
En el país se han realizado ya más de 143.000 test de la enfermedad y los médicos mantienen bajo observación a casi 27.500 personas para descartar el contagio.
Las autoridades de Moscú, ciudad que acapara la mitad de los casos del país, decidieron cortar por lo sano y entre otras medidas, ordenaron cerrar los colegios, escuelas de deporte y centros de actividades extraescolares por la pandemia, a partir del 21 de marzo y hasta el 12 de abril. Anteriormente, en las escuelas de la capital ya había sido introducida la asistencia libre para los estudiantes.
En momentos en que, según la Unesco, casi la mitad de los estudiantes universitarios y de los escolares del planeta, unos 850 millones, permanecen en casa tras el cierre de los centros docentes, el gigante euroasiático ha exigido que las universidades del país tomen medidas preventivas.
El Ministerio de Educación de Rusia estableció desde un principio controles sanitarios que van siendo más estrictos a medida que el coronavirus gana terreno.
“Elévese las medidas sanitarias de prevención a partir del 16 de marzo de 2020, con la medición de la temperatura a todos los que ingresen en las sedes de las instituciones”, indicó el ministerio.
El organismo ordenó también que se pongan dispensadores de gel desinfectante de manos en los edificios de las universidades y recomendó a las instituciones educativas dar clases a distancia mediante una plataforma virtual.
Actualmente, cerca del 60 por ciento de los centros de enseñanza universitaria rusos realizan su labor en línea, y solo el 4 por ciento de las instituciones no ha podido garantizar el nuevo formato.
En la capital, los centros han enviado a sus estudiantes a casa en lo que implementan los nuevos planes de estudio.
Universidades como la Lomonósov de Moscú también prevén para sus alumnos la posibilidad de contar con planes educativos individuales.
Muchos eventos deportivos y culturales han sido cancelados y se ha potenciado el teletrabajo. Constantemente se implementan medidas antiepidémicas por parte de empresas y organizaciones, incluida la desinfección de locales y la provisión de horarios y condiciones apropiadas para los trabajadores.
El metro de Moscú, que en condiciones normales mueve las astronómicas cifras de 7-10 millones de pasajeros diariamente, luce más descongestionado por estos días. No obstante, se han extremado las medidas de higiene y se desinfectan todas las superficies cada una hora.
El Gobierno calificó la pandemia como una de las peores emergencias de sanidad y no descarta recrudecer las medidas restrictivas anticoronavirus en Rusia.
Mientras, el propio presidente Putin asegura tenerlo todo bajo control. “Por ahora todo está controlado y espero que siga así, vamos a incrementar estos esfuerzos”, aseguró.
No obstante, como en otras partes, el Covid-19 avanza a pasos agigantados a pesar de los esfuerzos de las autoridades sanitarias y los gobiernos. Mientras en el mundo la cifra de contagios ronda los 300.000, Rusia registró este viernes en un solo día 54 nuevos casos, la quinta parte del número total de infectados en el país. Ante esta situación, cualquier precaución es poca.
(Con información de Sputnik)
Porque el gobierno niega todo.
Because the Russians are and will be the utmost, forever and ever