El Ministerio de Defensa de Rusia confirmó hoy el primer ataque ucraniano con misiles de fabricación estadounidense.
Según el parte de guerra recogido por agencias locales, cinco misiles fueron derribados y un sexto impactó en el recinto de una instalación militar en la región fronteriza de Briansk sin causar daños ni heridos.
Poco antes de la confirmación de Moscú, fuentes militares ucranianas revelaron al diario digital de Kiev RBK que el Ejército ucraniano había atacado en la madrugada con misiles estadounidenses ATACMS un objetivo militar situado en territorio de la Federación Rusa.
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“En efecto, por primera vez hemos utilizado misiles balísticos ATACMS para golpear territorio ruso”, dijo la fuente, que situó el blanco del ataque en la ciudad de Karáchev, en la región rusa de Kursk, fronteriza con Ucrania.
El Estado Mayor ucraniano informó antes, sin dar mayores detalles del armamento utilizado, sobre un “ataque exitoso” contra un arsenal del Ejército ruso situado en la región de Briansk.
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La noche del 19 de noviembre, las FFAA de Ucrania asestaron un golpe contra la región rusa de Briansk con 6 misiles Atacms, reportaron desde la Defensa rusa. Los sistemas… pic.twitter.com/2xxzq685b2
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) November 19, 2024
El ataque se produce poco después de que varios medios estadounidenses informaran que Washington había permitido a Ucrania utilizar sus misiles ATACMS contra objetivos militares situados dentro de Rusia.
La información apuntó que la Casa Blanca solo daba luz verde a Kiev para atacar objetivos situados en la región de Kursk, ocupada parcialmente por las fuerzas ucranianas, y donde Rusia ha desplegado militares norcoreanos para reforzar a sus tropas.
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La región rusa de Briansk, donde está situada la infraestructura atacada esta madrugada por Ucrania, se encuentra al norte de Kursk.
Este hecho se produjo en un momento crucial de la invasión rusa de Ucrania, que cumple 1000 días.
Rusia está sondeando las líneas del frente en el este de Ucrania mientras bombardea ciudades con misiles y ataques de aviones no tripulados, con el objetivo de inutilizar la red eléctrica de Ucrania y convertir en armas las gélidas temperaturas del invierno.
Con información de Efe, CNN y Sputnik.