Después de que la semana pasada el presidente ruso Vladimir Putin fuera acusado por el Tribunal Penal Internacional de violaciones de los derechos humanos de los niños ucranianos, se esperaba que el mandatario entrara en un aislamiento.
Pero no parece que eso haya sucedido. Este lunes llegó a Moscú su homólogo chino Xi Jinping en un viaje percibido como un fuerte espaldarazo a Putin. Y también como una oportunidad de Xi para integrarse a un posible esfuerzo de negociaciones de paz entre Moscú y Kiev.
“Estoy seguro de que la visita será fructífera y dará un nuevo impulso al desarrollo saludable y estable a las relaciones chino-rusas”, dijo el presidente en la pista del aeropuerto de Vnukovo en Moscú, refiriéndose a los dos países como “buenos vecinos” y “socios fiables”.
De ahí el mandatario chino fue directo al Kremlin a almorzar con Putin, quien lo recibió en su despacho, donde conversaron durante una hora. “Esta visita del amigo chino es importante para nosotros. Nos da la oportunidad de explicar nuestra razones”, dijo el ruso.
Xi dijo que los lazos bilaterales entraban en “una nueva era”, haciéndose eco de los comentarios del asesor del Kremlin, Yuri Ushakov, la semana pasada, quien dijo que ambos firmarán documentos para establecer lazos más estrechos durante la visita.
“En un mundo de volatilidad y transformación, China seguirá trabajando con Rusia para salvaguardar el sistema internacional con la ONU en su centro”, precisó Xi.
En un artículo publicado este lunes por un diario chino, Putin, elogió “la voluntad de China de desempeñar un papel constructivo en la resolución” del conflicto y aseguró que “las relaciones entre Rusia y China han llegado a su punto más alto”.
Según el portavoz de la presidencia rusa, Dimitri Peskov, tras el encuentro de hoy entre ambos mandatarios el martes será el “día de las negociaciones” y en el que llevarán a cabo una conferencia de prensa conjunta.
Putin le explicará a Xi “en detalle” la posición de Moscú sobre el conflicto ucraniano para que pueda “conocer de primera mano la visión que tiene la parte rusa del momento actual”.
Los dos líderes se reunieron por última vez en septiembre pasado, al margen de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) en Uzbekistán. Xi luego le expresó a Putin “preocupaciones” sobre la guerra en Ucrania, según el presidente ruso.
China ha dicho ser neutral en el conflicto, pero un mes antes de la invasión Xi y Putin proclamaron una “amistad sin límites” en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno en Beijing, cuando el mandatario ruso puso a su colega al tanto de sus planes, aunque sin grandes detalles, según la prensa rusa de esos días.
Sin embargo, tras participar en la reciente reconciliación diplomática entre Arabia Saudita e Irán, China quiere mediar en el conflicto entre Rusia y Ucrania con un llamamiento al diálogo entre ambos países.
Pekín se negó a criticar la invasión de Ucrania, pero condenó la imposición de sanciones a Moscú y acusó a Occidente de provocar el conflicto y “alimentar las llamas” al suministrar a Ucrania armas para su defensa.
Las relaciones entre Pekín y Washington se han deteriorado rápidamente urante los últimos años debido a una guerra comercial y tecnológica, disputas sobre derechos humanos, el estatus de Hong Kong y Taiwán y la soberanía del Mar de China Meridional.
Sin grandes resultados
Sin embargo, pese a todas las palabras de buena voluntad, este primer día de conversaciones no terminó con grandes resultados.
Las conversaciones cubrieron planes para fortalecer las relaciones bilaterales y también la guerra en Ucrania, según un resumen oficial chino de la reunión.
Citando el marco ampliamente redactado para las conversaciones de paz que China emitió el mes pasado, Xi le dijo a su homólogo ruso que esas negociaciones eran la única forma viable de poner fin a la guerra de un año, según un resumen de la reunión publicado por Xinhua y reflejado por The New York Times.
“La mayoría de los países apoyan el alivio de las tensiones, abogan por las negociaciones de paz y se oponen a echar leña al fuego”, le dijo Xi a Putin, De hecho, agregó, “en última instancia deben resolverse a través del diálogo y las negociaciones”.
Putin dijo que había estudiado el documento de China y que estaba abierto a las negociaciones. Pero no dio señales de tener en mente ninguna de las concesiones que Ucrania ha dicho deben ser previas a las conversaciones, incluida la retirada de las tropas rusas. Ucrania también ha descartado ceder territorio a cambio de la paz.
Xi dejó en claro que seguía comprometido con construir una relación sólida con Rusia y con Putin como un socio invaluable para contrarrestar la influencia global estadounidense.
“Consolidar y desarrollar las relaciones chino-rusas es una elección estratégica que China ha hecho a la luz de sus propios intereses fundamentales y las tendencias generales del desarrollo global”, dijo el mandatario chino.