Hamás liberó este lunes a Edan Alexander, un soldado estadounidense-israelí que estuvo retenido como rehén en Gaza durante más de 19 meses, en un gesto de buena voluntad hacia la administración del presidente Donald Trump que podría allanar el camino para un nuevo alto al fuego con Israel, reportó la agencia Associated Press (AP).
De 21 años, el soldado fue entregado a la Cruz Roja y luego a las fuerzas israelíes, que confirmaron su cruce al territorio de Israel, donde antes de reunirse con su familia será sometido a una evaluación médica.
AP hizo notar que la liberación se produjo sin una aparente contrapartida inmediata, pero en el contexto de negociaciones indirectas entre Hamás y la Administración estadounidense, mediadas por Qatar y Egipto.
La familia de Alexander, vestida con camisetas con su nombre, se reunió en Tel Aviv para presenciar la liberación, mientras en la Plaza de los Rehenes cientos de personas estallaron en vítores y corearon su nombre.
Alexander fue capturado el 7 de octubre de 2023, cuando tenía 19 años, durante el ataque sorpresa de Hamás a una base militar israelí en el sur del país, que desencadenó la guerra en Gaza y dejó cerca de 1 200 muertos y 250 personas tomadas como rehenes del lado israelí. Desde entonces, ha sido el único rehén estadounidense vivo retenido en Gaza.
Hamás por más negociaciones
Hamás anunció que la liberación de Alexander forma parte de los esfuerzos de los mediadores para lograr un alto al fuego, abrir los cruces fronterizos y permitir la entrada de ayuda humanitaria a Gaza.
El grupo afirmó que con negociaciones serias se producirán más liberaciones, pero advirtió que continuar la agresión prolongará el sufrimiento de los rehenes y podría incluso costarles la vida.
Actualmente, 58 rehenes permanecen en cautiverio, de los cuales 23 se cree que están vivos. Muchos de los 250 rehenes tomados en el ataque de 2023 han sido liberados en acuerdos previos.
Además, Hamás expresó su disposición a iniciar inmediatamente negociaciones para un acuerdo global que incluya el cese de hostilidades, el fin del asedio, el intercambio de prisioneros y la reconstrucción de la pulverizada Gaza, donde han muerto cerca de 54 000 palestinos, en su mayoría civiles, según las autoridades de la franja.
Netanyahu envía negociadores a Doha, pero sin frenar bombardeos contra el enclave
Entretanto, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se reunió el lunes con el enviado especial de Estados Unidos para la región, Steve Witkoff, y el embajador estadounidense en Israel, Mike Huckabee, para discutir los esfuerzos para liberar a los rehenes restantes.
La oficina del primer ministro indicó que Netanyahu ordenó que un equipo partiera hacia Doha para continuar las negociaciones, pero dejó claro que estas solo se llevarán a cabo bajo fuego y sin concesiones previas.
El presidente Donald Trump calificó la liberación como “un paso dado de buena fe hacia Estados Unidos y los esfuerzos de los mediadores Qatar y Egipto para poner fin a esta guerra muy brutal y devolver todos los rehenes vivos y restos a sus seres queridos”.
Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, celebró la liberación de Alexander y pidió un alto al fuego “permanente e inmediato” en Gaza, así como la liberación “inmediata e incondicional” del resto de los secuestrados.
Situación límite en Gaza: Hambruna catastrófica
La situación humanitaria en Gaza es crítica. Según un informe conjunto de 17 agencias de la ONU y organizaciones civiles, unas 470 000 personas, al menos una de cada cinco en Gaza, enfrentan una hambruna catastrófica.
De acuerdo con el organismo internacional, todos los 2,16 millones de habitantes sufren inseguridad alimentaria aguda.
El bloqueo impuesto por Israel desde marzo ha agotado las reservas de alimentos, cerrado panaderías y comedores comunitarios, y provocado muertes por inanición. La ONU alerta que sin acceso inmediato a alimentos y suministros esenciales, la situación seguirá deteriorándose, causando más muertes y desembocando en hambruna.
La ofensiva militar israelí, que comenzó tras el ataque de Hamás en octubre de 2023, ha dejado más de 52 800 palestinos muertos, en su mayoría mujeres y niños, y ha desplazado a 90% de la población de Gaza, destruyendo vastas extensiones urbanas.
Israel ha bloqueado todas las importaciones al enclave, profundizando la crisis humanitaria y provocando advertencias sobre el riesgo de hambruna si el bloqueo no se levanta.