El ejército de Israel “es uno de los más criminales del mundo”, aseguró uno de los juristas que integran una comisión de la ONU que investiga las atrocidades que se están cometiendo en Gaza.
El comité, a su vez, determinó que las autoridades de Tel Aviv son responsables de crímenes de guerra y de lesa humanidad en el enclave palestino, donde han muerto hasta este miércoles 37 396 personas, civiles en su mayoría, aunque se teme que unos 10 000 cuerpos todavía yacen bajo los escombros de las viviendas y edificios destruidos por los bombardeos.
“No tengo la autoridad para hacer juicios sobre moralidad, pero tengo autoridad para hacer valoraciones sobre conductas criminales […] y la única conclusión a la que se puede llegar es que el ejército de Israel es uno de los más criminales en el mundo”, dijo el jurista Chris Sidoti en declaraciones que recoge la agencia española EFE.
La evaluación de Sidot, de 73 años y experto australiano en derecho humanitario internacional, descalificó la afirmación del primer ministro israel Benjamín Netanyahu de que sus fuerzas militares “son las más morales del mundo” cuando se le cuestionó por el número de víctimas civiles palestinas en la guerra, que superan las 120 000 entre muertos y heridos.
La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos afirmó también que los bombardeos de Israel en Gaza podrían constituir crímenes contra la humanidad al implicar “ataques sistemáticos contra la población civil”.
Publicado este miércoles, el informe analiza seis de esos bombardeos perpetrados entre el 9 de octubre y el 2 de diciembre de 2023 contra edificios residenciales, campos de refugiados, una escuela y un mercado, en los que se verificaron al menos 218 muertes.
Los ataques, en los que se emplearon las bombas estadounidenses guiadas con precisión GBU-31, GBU-32 y GBU-39, causaron un alto número de víctimas civiles y una enorme destrucción de objetos no militares.
Esos artefactos tienen capacidad para penetrar en varias plantas de un edificio de hormigón y conseguir que se derrumbe.
De acuerdo con el jefe de la oficina de la ONU, el alto comisionado Volker Türk, la norma de reducir al mínimo el daño a civiles en acciones bélicas “parece haber sido consistentemente violada en la campaña de bombardeos de Israel”.
Igualmente, el estudio denuncia que oficiales de las FDI legaron a calificar de “bestias humanas” a todos los residentes de Gaza y en cinco de los ataques no se emitió una alerta previa, lo que aumenta la convicción de que se violó el principio de precaución.
“Dada la densa población de las áreas contra las que se dirigieron estos explosivos, el uso de ellos, con unos efectos tan amplios en extensas zonas, es probablemente un ataque indiscriminado”, prohibido por las leyes internacionales, argumentó el estudio.
“El requisito de seleccionar medios y métodos de guerra que eviten o al menos minimicen en toda medida los daños a civiles parece haber sido violado sistemáticamente en la campaña de bombardeos de Israel”, enfatizó al respecto el alto comisionado para los Derechos Humanos, Volker Türk, citado por la agencia Prensa Latina.