El presidente del gobierno español Mariano Rajoy ha dicho que prevé una “nueva era basada en el diálogo” en Cataluña, luego de una elección regional que complicó bastante las divisiones entre los partidarios y adversarios de la independencia.
Rajoy convocó a las recientes elecciones después de destituir el gobierno regional con la aplicación del controvertido artículo 155 de la Constitución y tomar el control político y administrativo de Cataluña.
Obviamente, el objetivo era reducir al secesionismo y dejar instalado un gobierno constitucionalista, pero no salió como esperaba. Un bloque de partidos independentistas ganó la mayoría en el parlamento catalán y gobernará.
Rajoy dijo en conferencia de prensa el viernes que el resultado de la elección, en la cual el partido más votado fue el unionista de derechas Ciutadans (Ciudadanos), revela una diversidad de puntos de vista que obliga al gobierno a respetar la ley.
Separatistas ganan elección de #Cataluña en revés para #España y la #UE pic.twitter.com/gXChvjsr2c
— Reuters Latam (@ReutersLatam) 22 de diciembre de 2017
El presidente dijo que hablará con los nuevos líderes regionales siempre que no violen la Constitución. El gobierno anterior convocó a un referendo por la independencia que fue declarado anticonstitucional por los tribunales.
Puigdemont pidió diálogo con Rajoy
El presidente catalán destituido Carles Puigdemont pidió el viernes mantener conversaciones con el presidente del gobierno español Mariano Rajoy tras una elección regional en Cataluña que dio a los partidos independentistas la mayoría en el parlamento.
En conferencia de prensa en Bruselas, donde se refugió hace casi dos meses para evitar el arresto por promover la independencia, Puigdemont dijo que el resultado de la elección iniciaba una “nueva era” para Cataluña.
Puigdemont se declaró dispuesto a reunirse con Rajoy sin condiciones en cualquier lugar de la Unión Europea que no fuese España.
“Más de 2 millones de personas están a favor de la independencia de Cataluña”, dijo Puigdemont en alusión a los resultados de la elección. “Reconocer la realidad es vital si hemos de hallar una solución”.
Añadió que regresaría a Barcelona si el Parlamento lo eligiera presidente del gobierno, aunque no estaba claro si gozaría de protección legal como funcionario electo.
Rajoy convocó a la elección después que los separatistas catalanes declararon la independencia en octubre, tras un referendo considerado ilegal por Madrid. También destituyó el gobierno presidido por Puigdemont y disolvió el parlamento. Ha dicho que la independencia está descartada por ser anticonstitucional.
Aunque el partido unionista de derechas Ciutadans (Ciudadanos) fue el más votado, los separatistas obtuvieron en conjunto la mayoría de las bancas.
El partido Junts per Catalunya de Puigdemont obtuvo 34 de las 135 bancas, siendo el más votado de los separatistas. El bloque está integrado además por Esquerra Republicana Catalana, con 32 y el anticapitalista CUP, con cuatro.
El Partido Popular de Rajoy obtuvo apenas tres bancas, en un fuerte revés para el oficialismo nacional.
La estrecha mayoría parlamentaria permitirá a los separatistas negociar juntos la formación de un gobierno, pero las antiguas querellas entre ellos indican que no será fácil.
Fernando Vallespín, profesor de estudios políticos en la Universidad Autónoma de Madrid, dijo que muchos factores imprevisibles impiden determinar qué sucederá en el futuro inmediato, incluidos los aspectos legales y si los partidos separatistas pueden encontrar terreno común. “Realmente es una situación desconocida”, afirmó.
En un recordatorio de los problemas legales que enfrentan los separatistas, el juez que indaga en el procés anunció el viernes que extenderá la investigación a otros seis políticos catalanes.
Reacciones
El gobierno alemán afirmó el viernes que cualquier nuevo gobierno regional en Cataluña tendrá que respetar la Constitución española, e insistió en que sigue considerando el futuro de la comunidad autónoma como un asunto interno español.
Los partidos independentistas consiguieron en las elecciones del jueves una ajustada mayoría parlamentaria en la cámara regional, en un nuevo impulso para su campaña de secesión, que no tiene apoyos entre los socios europeos de España. La Constitución española prohíbe la secesión unilateral.
Berlín confía en que los parlamentarios catalanes puedan “superar la división actual de la sociedad catalana y dar forma a un futuro común con todas las fuerzas políticas en España”, afirmó la portavoz del gobierno alemán, Ulrike Demmer.
Los políticos españoles, informó, deben “aprovechar todas las oportunidades de diálogo y desescalada”.
“Esto es un asunto interno español que tiene que resolverse dentro de la ley española y del orden constitucional español”, añadió.
Mientras, El País explica que la Comisión Europea dejó claro que su posición no cambiará con respecto a Cataluña. “Bruselas ha dado un respaldo sin fisuras a Rajoy y ha criticado con suma dureza a Puigdemont por violar las leyes y la Constitución. El Ejecutivo europeo apenas criticó con suavidad las cargas policiales del 1-O, y no ha abierto la boca acerca del proceso judicial que ha acabado con el vicepresidente Oriol Junqueras y varios consejeros en la cárcel”.
AP / OnCuba