El presidente Donald Trump pretende utilizar su primer discurso sobre el Estado de la Unión para hablar del progreso económico durante su gobierno y alentar una cooperación bipartidista con los demócratas en temas como la reconstrucción de caminos y puentes, justo cuando intenta quitarse de encima una investigación sobre los presuntos vínculos de su campaña electoral con Rusia.
La Casa Blanca dijo el domingo que, durante su discurso del martes ante el Congreso y la nación, el presidente destacará la fortaleza de la economía y el bajo desempleo en su primer año de gobierno, así como los beneficios de la reforma fiscal. Algunos asesores han dicho que se prevé que Trump, quien permaneció el fin de semana en la Casa Blanca mientras se preparaba, cambie su usual tono combativo por uno más conciliador y bipartidista.
“El presidente hablará de cómo Estados Unidos se ha recuperado”, dijo el director legislativo de la Casa Blanca, Marc Short. “El presidente también hará un llamado a los demócratas… para decirles que necesitamos reconstruir nuestro país. Y hará notar que, para mejorar la infraestructura, tendremos que hacerlo de manera bipartidista”.
Short dijo que Trump les pedirá a los demócratas que respalden un gasto adicional en defensa a la luz de las “dramáticas amenazas en el escenario global”.
Funcionarios de la Casa Blanca han dicho que el discurso anual se centrará en la “construcción de un país seguro, fuerte y orgulloso”, y que Trump aspira a destacar los logros de su primer año de gobierno y establecer el tono para el segundo.
A medida que el mandatario ve hacia el futuro, continúa la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre una posible obstrucción de la justicia por parte de Trump, y los nexos entre su campaña presidencial y la intromisión rusa en las elecciones de 2016.
Es un asunto que a menudo ha sido una causa que distrae del mensaje del presidente. Por ejemplo, el discurso de Trump la semana pasada ante líderes financieros y de otros gobiernos en Davos, Suiza, siguió a reportes de prensa de que le ordenó al abogado de la Casa Blanca que despidiera a Mueller en junio pasado, pero se retractó una vez que el abogado amenazó con renunciar. El mandatario se refirió al reporte como “noticias falsas”.
En cuanto a sus políticas, el tema migratorio es un punto crítico inmediato para Trump y el Congreso. En su discurso del martes, el presidente planea promover su propuesta para destinar 25.000 millones de dólares a la construcción de un muro en la frontera con México, y para proporcionar un mecanismo que permita que se naturalicen estadounidenses casi 2 millones de jóvenes inmigrantes que fueron traídos ilegalmente a Estados Unidos cuando eran niños.
El plan de Trump incluye miles de millones de dólares para la seguridad fronteriza y cambios significativos a las normas que regulan la inmigración legal, medidas que los miembros de línea dura del Partido Republicano procuran obtener desde hace tiempo. Pero algunos conservadores han advertido que el acuerdo equivaldría a darles una “amnistía” a los jóvenes inmigrantes conocidos como “dreamers”, y muchos demócratas y activistas lo han rechazado tajantemente.
AP / OnCuba