La tormenta tropical Gordon, que tocó tierra la noche de este martes en Estados Unidos, perdió fuerza este miércoles y se degradó a depresión tropical, según el reporte del Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés).
El informe meteorológico detalla que esta mañana el centro Gordon se encontraba a 40 kilómetros de la localidad de Jackson, Mississippi, y se movía con rumbo noroeste a 22 km/h. Sus vientos máximos habían descendido hasta 55 km/h, mientras su presión era de 1,005 hectopascales.
Tropical Depression #Gordon Advisory 12A: Gordon Weakens to a Depression Over Central Mississippi. https://t.co/VqHn0uj6EM
— National Hurricane Center (@NHC_Atlantic) 5 de septiembre de 2018
De acuerdo con el NHC, la tormenta debe seguir debilitándose tierra adentro y en los próximos días su movimiento continuará hacia el noroeste, aunque disminuirá la velocidad de traslación. Sin embargo, para el viernes se espera un giro hacia el norte noroeste y norte.
Aunque Gordon llegó a fortalecerse el martes al acercarse a la costa central del Golfo de México, no llegó a alcanzar la categoría de huracán como se preveía.
Todavía podrían producirse lluvias fuertes en el extremo noroeste de Florida, el suroeste de Alabama, el sur y centro de Mississippi, el noreste de Louisiana y el sur de Arkansas, las que pudieran causar inundaciones repentinas. También podrían ocurrir marejadas y tornados.
La tormenta ha dejado importantes daños a su paso. Un niño murió por la caída de un árbol sobre una casa rodante en Pensacola, Florida, el martes en la noche. Por el momento no se reportaron más heridos.
Más de 27,000 personas sufrieron cortes de electricidad.
Los gobernadores de Alabama, Mississippi y Luisiana declararon el estado de emergencia para movilizar rápidamente recursos y efectivos de la Guardia Nacional en tareas de rescate. Además, al menos 54 plataformas de producción de petróleo y gas fueron evacuados.
Los meteorólogos también siguen con atención el desarrollo del huracán Florence en el Atlántico, que se mueve con rumbo oeste noroeste a 20 km/h y tiene vientos sostenidos de 165 km/h, aunque por su lejanía y probable recorrido no representa un peligro para las antillas ni la costa sur de EE.UU.
Otros dos sistemas tienen posibilidades de formarse en los próximos días en el Atlántico Oriental, pero según el NHC es demasiado pronto para saber si tendrán consecuencias en tierra.