¿Quién gana en mis simpatías; quién, en mi admiración o mis afectos?
La verdad, nunca me había interesado demasiado el ciclismo hasta que me hice periodista. Entonces, a través del colega Elio Menéndez me enteré de que había existido un tipo llamado Eddy Merckx, y leyendo despachos cablegráficos me cercioré de la grandeza de Miguel Indurain. Desde entonces, el belga y el navarro han vivido en los mismos altares donde tengo a Lou Gehrig, Teófilo Stevenson, Michael Jordan o Romario de Souza Faría.
A Merckx lo consideran –en la Tierra y en Marte y en cualquier otro día de la semana- el más grande pedalista de la historia. Campeón de todo cuanto puede conquistarse, en 1974 consiguió un brutal triplete al vencer en el Giro de Italia, el Tour de Francia y el Mundial. Sus biógrafos le han contabilizado 525 victorias, que atendiendo al esfuerzo global que le habrán exigido debieran ser equivalentes a 700 nocaos o 2000 cuadrangulares. Algo así, más o menos.
Nadie pudo (ni podrá) ganar tanto sobre una bicicleta. Merckx lo quería todo, hasta el punto de que –unos por admiración, otros por odio- le colgaron el sobrenombre de El Caníbal. No era su caso el de esos ciclistas generosos –como el propio Indurain- que regalan una etapa para que el adversario sea feliz. Era un gran egoísta, pero era el mejor. (Total, Ty Cobb tampoco fue un dechado de virtudes. Ni Diego Maradona. Ni John McEnroe).
Aquel hambre insaciable de triunfos lo llevó a imponer también un record de la hora, ser proclamado el Deportista Mundial de 1970 y adornó su carrera con un ramillete de leyendas, a cuál de ellas más ilustrativa del carácter de un sujeto que corría de invierno a invierno, tanto en ruta como en pista, siempre empeñado en malograrle la jornada a los contrarios.
Lea esto: dicen que, ya retirado, salía a entrenar con su hijo Axel por los alrededores de la casa. Cerca había una cuesta, y al llegar hasta ella conminaba al pequeño a correr un sprint donde siempre mayoreaba el viejo Eddy. Pero el tiempo pasó y una tarde ganó Axel. Al día siguiente, en las proximidades de la cuesta, el muchacho le recordó: “Papá, el sprint”, y Eddy se limitó a decirle: “Eso es una tontería”.
Porque Merckx aprendió de memoria el libreto de los ganadores. Que era el único posible en su cabeza. Por eso le interesaban lo mismo los triunfos finales que las victorias de etapa o en metas volantes. Y por eso firmó aquella deliciosa anécdota que lo pintó de cuerpo entero…
Cuentan –y es absolutamente cierto- que una vez iba en la caravana cuando vio una pancarta a lo lejos. Convencido de que era una meta volante, atacó furiosamente en medio de la perplejidad del pelotón, que enseguida quedó atrás. Al llegar al letrero, resultó que se trataba de una valla del Partido Comunista Francés. Hubo risas entre muchos de sus contrincantes, pero algunos –los más lúcidos- se aterraron al ver cuánta voracidad puede habitar el corazón de un ser humano.
Miguelón siempre fue diferente. Indurain se llenó la barriga de humildad, hasta el punto de convertirse en referente en materia de talento, pero también de bonhomía. Tenía un porte peculiar sobre la cabalgadura de acero (medía 1.88 metros), y supo combinar virtud atlética con desarrollo táctico para llegar a la vanguardia en cinco rondas galas sucesivas.
Los años noventa lo vieron ascender a la cima del planeta, arañando centímetros hasta ponerse a la altura de Merckx, Jacques Anquetil, Bernard Hinault y Fausto Coppi. Es decir, los más ilustres entre los ilustres. Pero él aseguraba: “No quiero cambiar. Nunca me he sentido superior a nadie”. Derrochaba modestia –modestia de verdad, no hipocresía- en la victoria, y en la derrota tenía un punto de altivez que no se ve todos los días.
Uno de sus contemporáneos más encarnizados, el italiano Chiappucci, relató: “Le ves ahí, atacando con la sonrisa en los labios, y no sabes si se siente agotado, si está disimulando, o si es que se va riéndose de ti”. Enterado de tal afirmación, Indurain respondió: “No soy una persona que acostumbre a exteriorizar sus emociones”.
Yo lo corroboré. Recién graduado vi varias carreras de Indurain y jamás presencié una mueca de soberbia que lo hiciera más humano ante mis ojos. Líder en las contrarrelojes, igualmente brilló en las escaladas. No lo olvido fraguando su corona durante el Tour’91 en el descenso del Col du Tourmalet; ni en el 94, atacando entre la niebla de montaña en Hautacam. Miguelón, toda su humanidad sobre la portentosa Espada, estableció en Burdeos el record de la hora, y yo estuve sesenta minutos en La Habana haciendo votos para que consiguiera el objetivo.
A principios de enero de 1997 –posiblemente el 2, acaso el 3-, estaba yo escribiendo en Juventud Rebelde cuando leí una nota sobre su retirada. Prendí el televisor, emocionado, y el de Villava hablaba con la calma del que no siente el golpe de las despedidas. Tenía puesta una camisa negra, el pelo descuidado, y le decía adiós al pelotón como quien nada tiene que perder en esta vida.
MI VOTO: Indurain. ¿O acaso lo que más nos enternece no es aquello que conocemos a los veinte años?
Vi a Eddy romper el récord de la hora en México. Si me pareció arrogante, pero eso no le quita ser el mejor ciclista de todos los tiempos!
Artículo bueno, pero no soy d acuerdo para poner indurain al mismo nivel que merckx, el español es incluso detrás de gente como anquetil o hinault y que decir del fenómeno fausto coppi o incluso bartali. Sería interesante que se informa sobre las azañas que logró coppi y la historia que escribió era simplemente de otra planeta.en cuánto a merckx y sobre todo indurain han tenido la tremenda suerte que en la época de ellos los controles anti doping eran de risa de lo contrario le puedo asegurar que la historia del ciclismo habría sido diferente, quien ama y conocé el ciclismo, sabe muy bien que tanto indurain como merckx no eran tan limpio como se hizo creer.
Dice Christophe sin faltarle razón, que en esos años los controles antidoping eran de risa.
En mi neófita opinión, los de ahora… también.
y sino recordemos que Amstrong no daba positivo en sus controles antidoping, lo da luego cuando se revisan las muestras guardadas por años, que Marion Jones, Tim Mongomery y el resto de los involucrados en la trama de los laboratorios Balco Tampoco dieron positivo en cientos de controles antidoping, ademas de varios iconos como verónica Cambell y Asafa Powell, medallistas olímpicos, vinieron a dar positivos hace poco tiempo, y a ninguno se les retiraron sus lauros, Y Victor Conde el fundador de los tristemente celebres Laboratorios Balco, ha dicho en reiteradas ocasiones que el doping siempre le lleva años de ventaja al antidoping, y que en su opinión el 60% de los atletas que asisten a juegos olímpicos están dopados y que el 50 % de los atletas de las grandes ligas también, afirmando que: “La lucha contra el dopaje es como el juego del gato y el ratón, sólo que el gato está ciego”
Y en el caso que nos ocupa, el ¿mistico? ciclismo, solo recordar por cierto muy a tono con lo que ha dicho Conte, que hace unos años el Senado francés develo que los tres primeros clasificados del Tour de Francia de 1998, habrían utilizado EPO (eritropoyetina) en aquella carrera, al igual que otros corredores destacados de aquella edición de la ronda ciclista francesa. El informe hablaba de “decenas de nombres” entre los que figuraban franceses, españoles, italianos y alemanes. Dichos casos pudieron confirmarse tras analizar unas muestras de orina que se habían guardado en el 98, que en aquel momento la EPO era prácticamente indetectable.
Para completar Amstrong ha acusado a Indurain, Merckxs, Anquetil e Hinault de doparse. A eso sumemos la confesión del danés Michael Rassmusen, cilista del Rabobank, quien afirmo que infringió sistemáticamente las normas antidoping durante 12 años.
Así que en el ciclismo y en muchos deportes, muchos tramposos siguen navegando con…¿suerte?
MI VOTO PARA INDURAIN , DEL OTRO NO HABÍA OÍDO HABLAR HASTA QUE LEÍ TU TRABAJO,PERO SIEMPRE HE VALORADO MUCHO LA MODESTIA Y LA HUMILDAD DE LA GENTE.NO SOPORTO LOS AUTOSUFICIENTES NI LOS INMODESTOS POR MUY BUENOS QUE SEAN
Es Real que ponerse de acuerdo con respecto a los mejores ciclista de todos los tiempos después del mejor Edouard Louis Joseph Merckx siempre es de debate, aquí les dejo una listica de los diez que parte de una mayoría coincide con que son de lo mejorcito de todos los tempos esto es sin tener en cuenta a profundidad el desarrollo técnico alcanzado por las bicicletas su indumentaria y por las estrictas exigencia para hacer este y otros deportes más limpios y libre de dopaje.
1. Eddy Mercks (Belgica)
5 Tours. 4 Giros. 1 Vuelta a España. 3 veces campeón del mundo en ruta. 7 Milán-San Remo. 2 Tour de Flandes. 3 Paris-Roubaix. 5 Lieja-Bastogne-Lieja. 2 Giros de Lombardía. 3 Paris-Niza. 1 Douphine Liberé. 1 Midi Libre. 3 Flecha Valona. 1 Vuelta a Suiza. 1 Gran Premio de las Naciones…
Considerado como el mejor ciclista de todos los tiempos Profesional entre los años 1966 y 1977
2. Bernard Hinault (Francia)
5 Tours. 3 Giros. 2 Vueltas a España. 1 campeonato del mundo en ruta. 1 Paris-Roubaix. 2 Lieja-Bastogne-Lieja. 2 Giros de Lombardía. 3 Douphine Liberé. 2 Flecha Valona. 5 Gran Premio de las Naciones. 1 segundo puesto en el Tour. 1 segundo puesto en clásicas del Monumento. 1 Gold Race.
Apodado Le Blaireau (‘El Tejón’) y Caimán, dominó el panorama internacional entre el final de los años 70 y la primera mitad de los 80 Profesional entre los años 1975 y 1986
3. Jacques Anquetil (Francia)
5 Tours. 2 Giros. 1 Vuelta a España. 1 Lieja-Bastogne-Lieja. 5 Paris-Niza. 2 Douphine Liberé. 9 Gran Premio de las Naciones. 1 vez 2º del mundial en ruta. 2 veces segundo en el Giro. 1 Volta a Cataluña. 1 Vuelta al País Vasco.
Conocido por los apodos Maître Jacques, Monsieur Crono y L’Enfant Roi, profesional entre los años 1953 y 1969
4. Fausto Coppi (Italia)
2 Tours. 5 Giros. 1 vez campeón del mundo en ruta. 3 Milán-San Remo. 1 Paris-Roubaix. 5 Giros de Lombardía. 1 Flecha Valona. 2 Gran Premio de las Naciones. 3 veces segundo en clásicas del Monumento. 2 veces 2º en el Giro.
Apodado Campionissimo y l’Airone. Considerado como uno de los más grandes ciclistas de todos los tiempos profesional entre los años 1940 y 1959
5. Gino Bartali (Italia)
2 Tours. 3 Giros. 4 Milán-San Remo. 3 Giros del Lombardía. 2 Vueltas a Suiza. 1 segundo puesto en el Tour. 4 veces segundo en clásicas del Monumento. 4 veces segundo en el Giro. 1 Vuelta al País Vasco.
Apodado il Ginettaccio profesional entre los años 1935 y 1954
6. Alfredo Binda (Italia)
5 Giros. 3 veces campeón del mundo en ruta. 2 Milán-San Remo. 4 Giros de Lombardía. 4 veces segundo en clásicas del Monumento. 1 segundo puesto en el Giro.
Apodado La Gioconda por su elegancia y sonrisa permanente. Está considerado como el primer gran corredor de la historia del ciclismo.
Profesional entre los años 1922 y 1936
7. Miguel Indurain (España)
5 Tours. 2 Giros. 2 Paris-Niza. 2 Douphine Liberé. 1 Midi Libre. 1 vez campeón del mundo contrarreloj. 2 veces segundo en el Mundial en ruta. 1 segundo puesto en la Vuelta. 1 Clásica de San Sebastián. 3 Volta a Cataluña.
Profesional entre los años 1985 y 1996.
8. Sean Kelly (Irlanda)
1 Vuelta a España. 2 Milán-San Remo. 2 Paris-Roubaix. 2 Lieja-Bastogne-Lieja. 3 Giros de Lombardía. 7 Paris-Niza. 2 Vueltas a Suiza. 1 Gran Premio de las Naciones. 5 veces segundo en clásicas del Monumento. 1 París-Tours. 2 Volta a Cataluña. 3 Vueltas al País Vasco
Apodado El Rey de las Clásicas, profesional entre los años 1977 y 1994.
9. Jeannie Longo (Francia)
3 Tours de Francia en 1987, 1988 y 1989). 2ª en 1985, 1986, 1992 y 1995. 38 records de la hora. 5 campeonatos del mundo de ciclismo en ruta: 1985, 1986, 1987, 1989 y 1995. 4 campeonatos del mundo de ciclismo en ruta contrarreloj en 1995, 1996, 1997 y 2001. 3 campeonatos ciclismo en pista (persecución) en 1986, 1988 y 1989…
Jeannie Longo es una ciclista profesional que vivió su época dorada en la década de los 90. Comparada con Eddy Merckx, por su dominio en el ciclismo femenino, es famosa por su naturaleza altamente competitiva y su longevidad en el deporte.
10. Felice Gimondi (Italia)
1 Tour. 3 Giros. 1 Vuelta a España. 1 vez campeón del mundo en ruta. 1 Milán-San Remo. 1 Paris-Roubaix. 2 Giros de Lombardía. 2 Gran Premio de las Naciones. 1 segundo puesto en el Tour. 4 veces segundo en clásicas del Monumento. 1 vez segundo en el Campeonato mundial en ruta.
“no se puede ganar el tours con agua mineral”
Jacques Anquetil,esto resume la carrera deportiva de la mayoría de los ciclistas de la elite,a Lance lo cogieron de conejillo al igual que a Ben en el atletismo,la Federación USA agarro 9 veces al hijo del viento con problemas en los controles y nunca lo reporto.Por suerte llego la cruzada contra los tramposos y por supuesto se acabaron los jonroneros escandalosos en la MLB