Hacer una encuesta para tomar el pulso de la opinión pública sobre un programa de ajuste estructural que incluye aspectos tales como unificación monetaria, unificación cambiaria, devaluación, reforma de precios y reforma de salarios es, sin dudas, algo relevante.
Hacerlo, además, cuando ese programa de ajuste estructural se lleva a cabo en Cuba en una situación tremendamente comprometida, habla de determinación. Podemos sintetizar la actual situación de la economía cubana con términos como economía en decrecimiento, seriamente comprometida en términos fiscales, convaleciente de una estructura del empleo que para nada contribuye al crecimiento deseado con una reducción sistemática del empleo en el sector estatal, con una situación crítica en su balanza de pagos y un déficit secular de su balance de bienes; una que ha visto reducidas, de forma significativa, dos de sus principales fuentes de ingresos externos: los arribos de turistas y las remesas; una que viene, además, padeciendo el incesante desabastecimiento desde mucho antes incluso del último de los anuncios sobre el comienzo de la “unificación” y un sistema de precios que estaba lejos de “ayudar” al propósito de la eficiencia, la productividad y la innovación, y con muy poco acceso a crédito internacional.
No he mencionado con todo propósito ni el bloqueo económico en su versión trumpista, ni la pandemia de la COVID-19, ni la debilidad de la economía mundial, pues con solo atender la situación interna descrita antes, ya es más que suficiente.
Los resultados,1 aun cuando esperados por muchos, son sin dudas aleccionadores, tanto para los que han asumido la enorme responsabilidad de diseñar e implementar como también para otros que, en una posición relativamente más cómoda, tenemos la ventaja de “ver los toros desde la barrera” en el papel de economistas dedicados a estudiar estos procesos.
Sin dudas vale mucho haber hecho esta encuesta, incluso sugiero repetirla dentro de tres meses, de la misma forma que sugiero publicar no solo el análisis de los resultados, sino los resultados tal cual se obtuvieron. Sugiero, además, cuando se repita, que se capten algunos datos que pudieran ser relevantes a la hora de analizar dichos resultados y, en especial, de tomar decisiones. Ellos son:
- Sector donde trabaja el participante en la encuesta: estatal presupuestado, estatal empresarial, sector privado, sector cooperativo, empresas extranjeras.
- Lugar de residencia.
La importancia de considerar estos aspectos recae en que justamente las percepciones son diferentes desde distintas posiciones, y los impactos de las medidas sobre los encuestados dependen de a lo que se dedique cada cual y el lugar donde vive. Pero la encuesta vale.
De los resultados a los que pude tener acceso para nada sorprende que la mayoría de los encuestados hayan considerado el ordenamiento como necesario. Los problemas que ha padecido la economía nacional no dejaban mucho margen para otra cosa. La evidencia, tanto en la vida cotidiana del cubano común, como aquella otra que los propios datos producían desde hacía ya décadas, apuntaban de modo incuestionable a ello.
Que junto a las distorsiones que se hicieron evidentes, el crecimiento del empleo y de las personas en su búsqueda se cuenten como logros, es también lógico y parte del efecto esperado. Que salarios y precios concentren las mayores insatisfacciones tampoco es noticia y, con excepción de aquellos que en algún momento pensaron que todo saldría según lo planeado y podría hacerse en ambiente controlado, ignorando que hay leyes objetivas también para la economía y que estas se cumplen aun cuando se ignoren, la evidencia ha demostrado, una vez más, que la economía está integrada por vasos comunicantes y que sus resultados casi nunca se manifiestan como una suma aritmética de números reales, sino como una operación de números complejos o de conjuntos difusos.
Para nada se discute que, dada la situación tan específica de la economía cubana, con una restricción de oferta tan fuerte (tanto por la debilidad del sistema productivo nacional, como por la disminución de las importaciones), resulte necesaria la intervención del Estado en precios decisivos.
Lo que no parece probable es que esa intervención logre frenar significativamente el proceso inflacionario2 que “naturalmente” la devaluación ya produjo y producirá, y el que la inelasticidad de la oferta fomenta día tras día. Lo que sí parece probable es que extender esa intervención más allá de lo debido prolongará o hará mayores esas mismas distorsiones que se desean eliminar con la devaluación, tal cual afirma el economista Pavel Vidal en un reciente artículo.
Hablamos de una inflación que ya se venía produciendo en el país desde mucho antes (al menos 18 meses desde aquel anuncio de “precios topados” en los mercados agropecuarios que nos ha traído hasta aquí), y que se ha visto reforzada por la creciente dolarización parcial de la economía (que no solo debe asociarse a la existencia de tiendas para la venta en Moneda Libremente Convertible (MLC) de bienes de consumo, sino también a la existencia de un circuito en MLC para las empresas estatales y para la importación de las formas no estatales), junto a la relativa escasez de la oferta de dólares que ya ha llevado la tasa de cambio en el mercado informal hasta los 45 y 50 pesos cubanos por dólar.
Del salario se podrán hacer muchos nuevos estudios, en particular a partir de las escalas coherentes con lo definido en los ejes estratégicos de desarrollo del país, específicamente con dos de ellos: la transformación productiva e inserción internacional y el potencial humano, la ciencia y la innovación.
Pero, pensando en el corto plazo, lo cierto es que los incrementos en los precios de casi todos los bienes, la expansión de un mercado informal incluso de viandas y vegetales (debido a la reducción de la concurrencia, de la escasez, de cambios sustanciales en los costos por el incremento del precio de los insumos, y del manejo administrado de los precios); así como el crecimiento de las tarifas en algunos servicios indispensables, han generado la percepción, sustentada en la evidencia del día a día, de que la mejora del salario real no ha sido tal, aun con todo el esfuerzo hecho y la voluntad política de evitarlo y el hecho de que la inflación puede “comerse” aquellos incrementos, sobre todo si el incremento de precios ronda números cercanos a la estimación hecha por Pavel Vidal.
Esperar obtener impactos positivos masivos e inmediatos de este profundo proceso de ajuste estructural llamado “Tarea Ordenamiento” sería, de una parte, ignorar la realidad bajo la cual se lleva a cabo, y de otra, desconocer la historia de procesos parecidos ocurridos en otras latitudes y longitudes; así como la situación de partida de nuestra economía. Más allá de sus aciertos y desaciertos estos procesos son costosos, en especial en lo inmediato.
No será en el corto plazo que se podrán observar la mayoría de esos efectos positivos buscados, y este es uno de los más grandes retos de la conducción de la reforma, porque los seres humanos vivimos todos los días en el corto plazo. Así pues, encontrar recursos para lograr mejoras con la mayor inmediatez posible es, a la vez que un asunto de mucha urgencia, también uno de carácter estratégico.
Sin dudas mirar hacia adentro buscando cuantos más espacios de eficiencia quedan aún es de lo primero y primordial pero dada una determinada dotación de recursos, las reservas de eficiencia tienen un límite.
En este sentido, hay también que promover esa búsqueda incentivando la competencia entre todos los agentes y formas de propiedad en el país. Reservar espacios monopólicos para “determinadas” empresas no parece ser el mejor de los caminos, como tampoco lo es aferrarse a viejos esquemas como el de la “gastronomía popular” y el “comercio minorista estatal”, que tan lejos están de satisfacer en cantidad y calidad la demanda.
Entonces, ¿a qué fuentes podría acudirse en el corto plazo? Con la excepción de lo que pueda ocurrir con los candidatos vacunales cubanos contra la Covid-19, no parece que en el corto plazo pueda lograrse un salto decisivo en el comercio exterior de bienes. Ni el azúcar de caña, ni el ron, ni el tabaco, ni el níquel, parecen poder dar un salto de la magnitud que se necesita. En los servicios tampoco es posible esperar incrementos positivos sustanciales. Ni el turismo, ni los servicios médicos, ni la telefonía parecen poder lograr una variación positiva significativa en este 2021.
Nos quedan oportunidades, no obstante: la inversión extranjera, la inversión privada de nacionales residentes o no, y la capitalización de empresas estatales en sociedades por acciones.
¿Cuánto de incentivos ha traído la Tarea Ordenamiento para la inversión extranjera ya presente y cuanto puede significar para atraer nuevas inversiones?
De un lado tenemos un entorno más abierto y permisivo para relacionarse con toda la gama de formas de propiedad que hay en Cuba. Lo demuestra la propia devaluación de la tasa oficial de cambio, que debe hacer menos costosas las operaciones en el país, junto a la posibilidad de participar en proyectos de desarrollo territorial y el reciente anuncio de que los gobiernos locales, al fin, podrán promover y gestionar proyectos de Inversión Extranjera (IED); así como la Ventanilla Única. Del otro lado, aparece la conversión a pesos cubanos, uno a uno, de las cuentas en dólares que estas empresas mantenían en los bancos; la obligatoriedad de contratar la fuerza de trabajo a través de empresas empleadoras estatales (que paradójicamente y en contra de lo que el país necesita, que es entre otras cosas ingresar más dólares, le recomiendan a los empresarios extranjeros no pagar más de 15 000 pesos cubanos a sus empleados, salario que dichos empresarios deben pagar en dólares al cambio de 24 por 1 CUP), aunque es cierto que el mecanismo de contratación es mucho más transparente que antes de la “Tarea Ordenamiento”. Aquí, sin dudas, hay mucho espacio para hacer el “mercado cubano” más atractivo a los inversionistas extranjeros, algo muy necesario en estos tiempos de reducción de los flujos de la IED a escala internacional.
La inversión privada de nacionales
La inversión privada de nacionales residentes y no residentes; sin dudas es un tema con varias aristas, casi todas sensibles. No obstante, algunos pasos se han dado ya con la eliminación de la lista positiva de actividades a ejercer “por cuenta propia” y la cercana publicación de los documentos normativos de la actividad. Es cierto que el límite es ahora la propia capacidad de emprendimiento de cada cual (con excepción de los trabajos que no pueden ser ejercidos de forma privada), pero el hecho de no poder constituirse en persona jurídica introduce siempre un elemento de incertidumbre que debería ser eliminado.
De igual forma, cada día que demore la aprobación de la pequeña y mediana empresa tendrá un impacto negativo sobre el crecimiento y el desarrollo, sobre las oportunidades de negocios, sobre la atracción de la inversión extranjera, sobre el empleo y los ingresos y sobre la mejora de la situación de la población del país.
A la vez, tenemos más de un millón de cubanos viviendo fuera de Cuba, algunos de los cuales tienen capital suficiente para invertir en el país que los vio nacer y formarse. Otros han desarrollado negocios exitosos fuera de Cuba que pudieran “encadenarse” a la economía nacional. Hay allí una fuerza que puede ser relevante en esta puja que tenemos con nuestra situación económica y social. Si le permitimos a un ciudadano extranjero invertir en nuestro país, ¿por qué prohibirle a quien ha nacido en esta tierra de todos los cubanos? Mucho más ahora que nuestra Constitución admite la propiedad privada sobre los medios de producción.
La emigración en la economía cubana, más allá de las remesas
Convertir activos en recursos financieros
También nos queda un gran recurso: decenas y centenares de empresas, todas estatales, que pudieran ser al menos capitalizadas en parte y serían capaces así de generar liquidez para el país. Aquí se incluyen decenas de hoteles, además de empresas, algunas de las cuales deben ser hoy subsidiadas. Con esto, no se enajenarían los activos del pueblo en su totalidad, sino solo en parte, y el Estado, como su representante, podría mantener el control sobre los mismos.
Son todos temas espinosos, algunos con espinas emponzoñadas. Pero el antídoto existe y el pinchazo es parte del riesgo que todo cambio, si es verdaderamente profundo, entraña.
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Notas:
1 Las referencias directas a los resultados de la encuesta que se hacen en algunas notas corresponden a una recopilación hecha por un amigo en diferentes momentos (están fotografiados) y no deben ser tomados como resultados oficiales. Una vez cerrada la encuesta no se pudo seguir observando el número de respuestas en Cubadebate y no han publicado aún los resultados, pero considero útil hacer este análisis de la tendencia que se observó en las respuestas a la encuesta.
2 Ver: “El trago amargo de la unificación monetaria” : “(…) la tasa más probable para este año alrededor de 500 %. Cerca del 300 % de la inflación se debería al efecto traspaso, es decir, al impacto de la devaluación de la tasa de cambio sobre los precios. El otro 200 % se explicaría principalmente por el exceso de demanda, es decir, el aumento de salario por encima de la productividad”.
Excelente análisis profe,como siempre,que bueno que toco el tema de la IED en especial sobre la devaluación no solo de la moneda cubana sino de su fuerza de trabajo en comparación con otros países,estamos hablando de los profesionales cubanos,que en cuantía y calidad sin pena a decir son los mejores formados del área,que una empresa empleadora( mas trabas y burocracia,idem al OSDE) diga que por un trabajador solo se puede pagar 15000 pesos es una falta de respeto,me cuesta entender mucho como se puede pensar asi desde el MINCEX cuando la necesidad suprema ahora es recaudar dólares,antes incluso de la tarea ordenamiento se pagaba mas por un trabajador del IED lo que lo absorvia la empleadora junto con el presupuesto del estado,y ahi la estafa,ahora supuestamente dicen que destrabar las fuerzas productivas incentivar la IED y al final lo que hacen es no estimular las fuerzas productivas,devaluarnos frente a los empresarios extranjeros,y no recaudar más dólares,para ni hablar de que todas las operaciones tengan que ser en moneda nacional algo absurdo para algunas empresas de la IED,también muchas han entregado su liquidez y mas en ayuda al pais que otra cosa y ahora se las congelan y hasta quieren convertirles esas cifras millonarias que depositaron aqui y que por x o y motivo perdieron su liquidez en moneda nacional nos enfrentamos de nuevo al absurdo,creo yo que en el MINCEX hay que hacer una zafra de los que gestionan mal y de los ineficientes porque se trabaja muy mal o no estan capacitados o no les interesa que la IED se sienta incentivada.
“Nos quedan oportunidades, no obstante: la inversión extranjera, la inversión privada de nacionales residentes o no, y la capitalización de empresas estatales en sociedades por acciones”. MUY BIEN, ABRIR LA BOLSA DE LA HABANA Y COTIZAR EN BOLSA TODAS LAS EMPRESAS QUE LO PUEDAN HACER, ESTATALES, COOPERATIVAS Y PRIVADAS. QUE ESTAS ACCIONES SEAN PUESTAS A LA VENTA LIBREMENTE Y AL MEJOR POSTOR. PERO… Y DÓNDE DEJAMOS EN TODO ESE PROCESO AL SOCIALISMO? LO DISFRASAMOS DE CAPITALISMO SOCIALISTA? O SOCIALISMO CAPITALISTA? O INVENTAMOS EL SOCIALISMO MONOPOLISTA DE ESTADO?
Profe totalmente de acuerdo con ud….Ya ud lo dice todavía hay algunas cartas que se pueden jugar, pero el Crupier parece estár reticente en abrir el juego….
Ud lo dijo y permítame utilizar sus palabras:
Son todos temas espinosos, algunos con espinas emponzoñadas. Pero el antídoto existe y el pinchazo es parte del riesgo que todo cambio, si es verdaderamente profundo, entraña.
Profesor Triana, seria bueno una publicación de usted dónde analizará el preocupante problema de la falta de interés del gobierno en subsidiar la agricultura. Se lo digo porque son varios los trabajos en los que los productores del país se quejan del no acompañamiento financiero para llevar a buen destino nuestra ansiada soberanía alimentaria.
Al parecer se hicieron dos encuestas, yo no vi la misma que usted vio.
Esta tarea maquillaje lleva implícito el mismo final que todas las intenciones anteriores, el por gusto, cuando se acabará de entender que solo se salvará la revolución y el Socialismo realizando una deconstrucción total del Sistema, desde la mismísima esencia, todo lo que se construye sobre bases vanas, huecas terminará desmoronandose._ell criterio único del partido único es contrario al Darwinismo tan necesario para generar competencia de creaciones que acelera el desarrollo.
El sistema de distribución Socialista va en contra de la motivación al obrero, usted primero vive y después produce, no se le puede decir al hombre que vaya a producir lleno de prpblemas para que después según lo que haga podrá cobrar para resolver o no sus problemas.
Por cuanto el salario mínimo tiene que ser para todos equivalente al costo de la vida del trabajador y una familia promedio y tiene que estar en el capital inicial.
Hay que regresar al individuo a la ecuación del mercado con un poder de compra suficiente y adecuado.
Tenemos que empezar a crear valor agregado en todo lo que se produzca, tenemos que aplicar la ciencia y la técnica, mecanizado, automatizando, tenemos que regresar a los campos,, regresar a las represas,…..
Muy acertado este comentario ,es necesario que se entienda en el sentido constructivo y no se malinterprete y que el estado de decida por demás en remitir estos cambios para mejorar la situación del desabastecimiento ,el estado tiene los mecanismos para operar esto ,yo pregunto porque el estado no permite a cualquier transnacional que no tiene que ser americana que opere en cuba, que abastesca los productos y los cobre en su moneda o en dólares o euros y que pague a sus trabajadores en la moneda que quiera y que le pagué al estado por el espacio,la electricidad,otros gastos de servicio que pueda prestarle como teléfono,logística de importación acarreo de materiales y muchos más y además le cobre el famoso IVA.en el mundo entero el estado vive de estos impuestos y dejar que esa transnacional opere y satisfaga la demanda sin trabas burocráticas.
Creo esto destrabaria un poco la situación actual y estamos concientes que no sería para todos como no es ahora para todos las tiendas en MLC pero por lo menos existirían los productos.
Cuantos lugares con condiciones tenemos en el país Miles con cercanía de línea férrea con lugares sin utilizar con naves completamente destruyéndose y sin uso.
Analicemos el estado está para las grandes cosas no las pequeñas ,pero las personas necesitan satisfacer sus necesidades siempre crecientes y hoy en cuba no hay nada solo consignas y promesas que los que nacimos con esta revolución reconocemos lo bueno y hemos quedado aquí pero esperando mejoras que nunca llegan y mirando como se deterioran los principios enarbolados de que quien más trabaja más tiene,hoy solo tienen quienes han hecho dinero con marañas e inventos o quienes les envían dinero de afuera un llamado gusano o amigo ,o un negociante que sacó los recursos desviados del estado ,o quién en un cargo público logro amasar dinero.
Nosotros los de a pie seguimos esperando que nuestro trabajo de algo y solo alcanza para supsistir medianamente.
Realmente no quiero esto para mis hijos que trabajan y están integrados pero no ven esto con los mismos ojos y las esperanzas que yo.
Ellos ven otro futuro mejor que es posible.
Gracias.
Creo muy importante, puntual y venido a estos minutos que vive el país, yo al igual, soy fruto enteramente de este proceso y como Ud, siempre he esperado que mañana será mejor… Tu veras’? Siempre decía y llegue a mi ocaso esperando…..claro no solo esperando que me cayera de cielo, trabaje mucho, sin descanso, sin mirar horas mías, sacrifique mucho, no escatime esfuerzos. Ahora no creo tan paciente la juventud de hoy, que no es solo, ni siquiera la mayoritaria, aquella que habla en un acto político frente a cámaras, ni Tampoco aquella que entrevistan al azar y que despues vemos en un NTV, hay que buscar la real, la de calle y la de mayor cantidad de escuelas, como piensan, como se expresan, esa sin duda no es tan paciente, creo que urgen planes de clntingencias para ganar confianzas sobre todo en la juventud, no es hacer con secciones sino defender y mantener lo primero e importante para no perderlo todo, porque hay mucho de intolerancia entre las personas, mucha violencia, mucho cansancio del devenir cotidiano, del círculo vicioso de nunca acabar, del reciclaje constante de escaces de este u otra cosa, y en los municipios de provincias la gente esta mucho peor que en la capital y están muy dañados, a veces preferible no usar el teléfono para no escuchar, porque no hay forma de ayudar, y no cuento con respuestas, aunque es lo menos que necesitan, sigo creyendo que seremos todo lo inteligente y capaces de no permitir enfrentamientos entre el mismo pueblo y que tomaremos las desiciones más listas para aliviar la carga pesada y no convertirla demasiado tarde, en imposible de cargar
La economía está indisolublemente unida a la política lo q hace siempre a medias los comentarios sobre Cuba desde una posición q trata de ser vista como moderada y no anti sistema.
En la raíz de IED hay muchos más problemas q se enmascaran cuando se habla de balanza. Cualquier análisis en esta área debe hablar del endeudamiento y su estructura a lo largo de los años. Eso pondría a Cuba como un estado en muchas áreas deudor. Eso no contribuye con atraer IED. En el indicador de riesgo país con cierta objetividad cualquier posible inversor debiera considerar este fenómeno; del cual no se publica nada. Si por ejemplo se usan campos de búsqueda como “deuda cubana” y otros relacionados el buscador salvo vagas noticias sobre conversaciones de la deuda, sin datos aparecen en un periódico local; sino me equivoco en Escambray. Granma no pública al respecto, o al menos a través de la opción de búsqueda q provee no se encuentra nada. Lo demás son publicaciones extranjeras: la gran mayoría.
Las actividades prohibidas son un reflejo de selectividad hacia lo q el estado considera maligno a pesar de estar conectado con sectores de mucha demanda o necesidad. Véase el caso de arquitectos, estos siguen sin poder ejercer su oficio a pesar de q es un área donde no pocas décadas siguen contribuyendo con un panorama arquitectónico q nada tiene q ver con el período colonial y republicano. La estética y la funcionalidad no han ido de la mano reciente. Es un área donde a pesar del deterioro de inmuebles no existe el derecho libre a comprar materiales de construcción como cemento y áridos. Y repito, no existe el derecho si no se vende como viene ocurriendo ya por años. Hay q entender q el estado si puede seguir construyendo mientras los ciudadanos no pueden reparar a menos q sea por vías ilegales. Un país q se declara en favor de más turistas y prohíbe q exista el oficio de guía de turismo es como poco raro. Y es q no existan foros donde se discuta la causa de estas medidas es lo peor. Quizás el estado tiene una razón, de hecho la tiene. ¿Por qué no se puede saber? ¿Por qué nuestra prensa no pregunta?
El turismo en Cuba como
Política es la de más turistas, no la de mayor calidad sin aumento excesivo de turistas; y aunque se quiere ahorrar agua y otros recursos nunca se habla desde la capacidad. Me explico: cuando un hotel o grupo de hoteles se construye eso requiere agua, ello es un agrego q en nuestras condiciones significa q el extra consumido habrá q quitarlo de algún lugar. Hasta cuándo veremos bien q haya agua en los hoteles a costa de la de los ciudadanos? Por qué los hoteles pueden hacer piscinas y los privados no. Si la respuesta es el reciclaje debieran favorecer la importación de filtros de piscinas, motores, equipamiento para optimizar esa agua; no ponerle barreras aduanales a algo q el
Propio sector del turismo importa pues no lo
Produce la industria nacional q se dice querer
Proteger. Por qué no se venden sanitarios de menor capacidad, por qué nuestra industria
No produce herrajes de calidad. Ahorrar agua, producir en Cuba, aumentar empleo debieran ser el ABC. Recuerden q nos enseñan a pensar con todos esos documentales japoneses q son como para q sepamos q el mundo existe pero no nos toca.
Es difícil con el mayor respeto, q se inicie un mercado organizado como el sugerido de acciones. Usted no le da a su hijo el
Ferrari para comprar
Aspirinas a dos cuadras. No estamos listos para algo así.
En fin q la voluntad política dice una cosa pero no está pensando en una visión país como a lo q aspira la
Gente de este pueblo. Un país con las cosas q Describo apunta a medias tintas en un mundo q será más competitivo cada día y eso significa q seguiremos atrás siempre.
Como puede ser y con esto lo dejo acá q sigamos
Sin poder subir a un medio náutico rodeados de agua? Q tendría q cambiar para q eso varíe? Lo
Mismo q debiera variar para no seguir poniéndonos traspiés con cada cosa q inventamos para mejorar.
Excelente Mario Ricardo, su comentario, mejor imposible. Estos análisis tienen muchas más aristas enriquecedoras, pero no llevarán a ninguna parte ¿sabe por qué?. El l Dr Triana Cordoví no es asesor del Presidente de Cuba como debía serlo, ni del Ministro de la Agricultura, ni siquiera publica en medios Nacionales, ni es escuchado por los parlamentarios, es más, publica en On Cuba, revista digital No muy grata para el Gobierno cubano en palabras de Díaz Canel hace unos dos o tres años. Su comentario y otros muy inteligentes publicados aquí lo leen poca gente, ¿te imaginas al Ministro del Turismo en Turno hablando contigo o conmigo, con algún interesado en el desarrollo de este sector? ¿escuchar y menos responder este tipo de inquietudes del pueblo? El tema del agua y los hoteles es una falta de respeto tan grande a la inteligencia del pueblo ¿dónde hablamos o somos escuchados? ¿a quién escribimos que nos responda? en Cubadedate de 5 comentarios me publican dos o tres y no me responden ninguno. La verdad que es lastimoso que se pierdan tantas ideas, podríamos tener un país mejor, pero esto es como “seguir arando en el mar” y “sabemos con que bueyes se ara”, lamentablemente.
Para los que hayan tenido la posibilidad de vivir en Viet Nam o China sabrán que muchas de estas reformas y cambios se han llevado a cabo…Por citar solo unos ejemplos en Viet Nam está la cadena de supermercados “Big C” que también está representada en muchos países del sureste asiático y del mundo y la cadena de Fast Food “KFC”…Por solo citar algunas…En China todos saben que existe la bolsa de Shanghai, la de Hong Kong y en Viet Nam está la VNINDEX bolsa de valores de
Ho Chi Minh…Y se consideran países Socialistas… El sistema está en constante evolución…La existencia de empresas privadas , cadenas de supermercados etc, etc no define que el sistema sea Socialista…Sino hacemos reformas, cambios, y modernizamos el Sistema no estaríamos haciendo REVOLUCIÓN…RECUERDEN EL SIGNIFICADO DE ESA PALABRA QUE PARECE QUE ALGUNOS LO CONFUNDEN…SIN RENUNCIAR NUNCA A NUESTRA SOBERANÍA…
De lo contrario seguiremos con la OFICODA, las viejas y obsoletas bodegas, carnicerías etc, etc…
Ya lo expresó el Profe:
Son todos temas espinosos, algunos con espinas emponzoñadas. Pero el antídoto existe y el pinchazo es parte del riesgo que todo cambio, si es verdaderamente profundo, entraña.
Yo me atrevería a afirmar que si tenemos Líneas de Celulares propias y no a nombre de extranjeros, si tenemos Internet, si podemos vender nuestros carros sin traspaso de propiedad, si podemos vender nuestras casas, se lo debemos en gran medida al Dr.C Juan Tríana Cordoví. Nunca olvidaré aquella conferencia que dió el profe a los altos oficiales del Minint sobre muchos de estos temas…
Saludos doctor. Creo que seria dificl describir la situación actual por la que pasa nuestro país. Son tantos años innovando, experimentando, culpando a otros de los malos procederes y medidas tomadas que resulta difícil creer que ahora si veremos la luz al final del túnel. Como usted dijo sobran ejemplo de países que ha pasado por procesos parecidos pero en ninguno de esos se han implementado todas esas medidas de choque al mismo tiempo. Lógicamente eso sólo se podría hacer en cuba donde una vez más el pueblo pone la cara, confia y soporta el golpe. Se están tomando muchas decisiones importantes que aunque el gobierno hace alarde de no ser en forma de salvavidas sabemos que si es así, sabemos cuanto les cuesta admitir que necesitan al sector no estatal para salir adelante y la prueba es que se sigue satanisando, persiguiendo y asfixiando al sector no estatal, no sólo se topan precios de productos básicos y necesarios, sino también el precio de cualquier cosa que aunque no se reconozca su costo de inversión se determine que supuestamente es un precio especulativo. El día que el estado empiece a llamarle por su nombre real “sector privado” ese será el dia en que empiecen a ser creíble todas esas garantías que están anunciando. Se está promoviendo que el cubano que se encuentra fuera de cuba invierta en nuestro país y lógicamente en más de 2 millones de cubanos sueltos en el mundo deben haber unos pocos que se lancen en esta aventura, pero lamentablemente no serán todos los que podrían hacerlo y esto se debe a la falta de credibilidad evidenciada durante años y dudas generadas por la falta de transparencia y poco acceso a datos relajantes al respecto.
Para empezar soy licenciada y no me pagan por lo que soy, aunque de todas maneras el salario no alcanza para nada,no entiendo que el presupuesto no alcance para sus profesionales que se juegan la vida contra el covid,dónde está la justicia!
Un artículo sumamente interesante.
Mis Felicitaciones a Juan por ese enfoque siempre objetivo.
Muy buenos los comentarios. Los he guardado para cuando el país no este agredido y bloqueado.
Es muy difícil atravesar por un marabusal y no salir arañado por el otro lado.
Es una persona muy objetiva y sin disfras .más claro no el agua