Otra vez diciembre y cine
son el binomio perfecto.
Ir al cine es un proyecto
de vida que nos define.
Otra vez cuando termine
la fiesta del Festival,
Cuba, portal a portal,
será una enorme pantalla
proyectando la batalla,
la lucha por el Coral.
Recuerdo la época mía
de joven festivalero,
cuando estaba el día entero
de cine en cine y crecía
con tanta filmografía
de una América preclara.
Largas colas en el Yara.
Larga cola en el Payret.
Sin Facebook. Sin Internet.
A buen cine, buena cara.
Un filme hispano-argentino
dirigido por Gastón
Duprat y Mariano Cohn
abrió este largo camino.
Esta película vino
con laureles de antemano
Se titula “El ciudadano
ilustre” y su historia y fondo
dicen que ha calado hondo
en el público cubano.
Y hubo en la inauguración
otro momento feliz:
la danza-fusión de Lizt,
su cine-danza-fusión.
Y hubo lluvia. Y emoción.
Y colas. Y visitantes
tan célebres e importantes
que la ciudad de La Habana
es un plató esta semana:
todos somos figurantes.
Brian De Palma en La Habana
junto a Oliver Stone.
Tristán Bauer en acción
y Sonia Braga, cercana.
Diciembre de nuevo gana
metraje en todas sus sedes
Y según dicen las redes
desde el territorio hispano
vendrá Benito Zambrano
junto a Marisa Paredes.
La Escuela Internacional
de Cine y Televisión
recibe en esta ocasión
honorífico Coral
que le entrega el Festival
a 30 años de aquel
día en que Birri y Gabriel
García Márquez lograron
unir fuerzas y fundaron
su sede junto a Fidel.
18 largometrajes
de ficción (¡corre la voz!)
junto a otros 22
cortos y mediometrajes.
Hay fílmicos reportajes
de diferentes niveles.
Y el jurado en sus papeles
puntuará las creaciones
de 25 guiones
y 24 carteles.
También buscan sus corales
y tocar fílmicas cimas:
18 óperas primas,
26 documentales
y 27 geniales
filmes de animación.
Hay otra generación
de cinéfilos cubanos.
Un “pasaporte” en las manos
a la multi-proyección.
Mas no todo es hermosura.
Hay polémica esta vez.
La cinta Santa y Andrés
abre el debate, figura
víctima de la censura
porque la organización
impidió la proyección
de un film sobre homosexuales
basado en hechos reales
aunque se cuente en ficción.
“El filme presenta una
imagen distorsionada
de Cuba”, visión basada
en la pésima fortuna
de una época. Aunque reúna
una experiencia real
la reacción oficial
fue no aceptar su importancia,
su foto de “intolerancia
y violencia cultural”.*
Aunque para el director
Fernando Pérez, cineasta
laureado e iconoclasta,
vetarla ha sido un error.
ICAIC, órgano rector,
tiene derecho, es verdad.
Pero “la sinceridad
es el único alimento
para el país”. Un lamento
que iguala a la libertad.**
En fin, otro Festival
de cine estrena emociones,
y abundan las proyecciones
en búsqueda de un Coral,
En lo que llega el final
comparto con mis lectores,
mis on-cuba-seguidores,
un poema adolescente
homenaje a un cine ausente,
un muerto con pocas flores.
Cine perdido
Antiguo cine Moderno,
sala de manos confusas
y de películas rusas
y de besos en invierno.
Foto fija, plano eterno.
Domingos de matiné.
Porky bailando un cuplé
delante de Betty Boo.
¿Y la del fondo, eres tú?
¿Y aquél soy yo? No se ve.
¿Por qué esa loma de escombros?
¿Por qué la sala apagada?
¿Por qué persiste callada
la tela de los asombros?
¿Nadie se echará en los hombros
la sombra del negro Jim?
¿Ni tú, Huckle Berry Finn?
¿Ni tú, Clark Kent? Disolvencia.
Lentitud de la secuencia.
Contrapicado. Zoom in…
Ya no están sobre la acera
las faldas de las muchachas.
Risa de las cucarachas.
Gárgaras de polvo afuera.
Nostálgica cartelera.
Fúnebre y sorda la banda.
Sobre un haz de sombras anda
el rostro de lo que fuimos.
Viejo cine, te morimos.
Descansa en paz. (Fin de tanda).
(Ficha técnica)
Sin Efectos Especiales.
Sin casting. Sin maquillista.
El cine: protagonista.
El público: los portales,
las moscas, los barandales,
las piedras, los roedores.
Cero actrices. Cero actores.
Fotograma-monograma.
Cero extras. Cero fama.
Cero voz. Cero colores.
Título: “Cine perdido”.
La Nostalgia: Dirección.
Tiempo: Argumento y Guion.
Intérpretes: el olvido
y el cine y yo y lo vivido.
Música: Melancolía.
Infancia: Fotografía.
Banda sonora: mi llanto.
Único trucaje: el canto
que el cine se merecía.
* Cita extraída de un texto de Roberto Smith de Castro, director del ICAIC.
** Cita extraída de una entrevista al cineasta cubano Fernando Pérez.
W El cineasta Pimienta. Director en bianco en negro de peliculas muy economicas, llenas de effetti speciali.