Seis gráficos interactivos de Max Roser, economista de la Universidad de Oxford, muestran la evolución del mundo en los últimos 200 años. Pobreza extrema, educación básica, alfabetización, personas que viven en democracia, vacunas y mortalidad infantil son los puntos analizados por Roser en la web Our World in Data, con el título de “La breve historia de las condiciones de vida en el mundo y por qué es importante que la conozcamos”.
“Una encuesta reciente preguntó: Teniendo en cuenta todo, ¿cree que el mundo está mejorando o empeorando, o que ni está mejorando ni empeorando? En Suecia, el 10 por ciento pensó que las cosas estaban mejorando, en los EE.UU. solo el 6 por ciento y en Alemania solo el 4 por ciento. Muy pocas personas piensan que el mundo está mejorando.
“¿Cuál es la evidencia que debemos tener en cuenta al responder esta pregunta? La pregunta es cómo ha cambiado el mundo y, por lo tanto, debemos tomar una perspectiva histórica. Y la pregunta es sobre el mundo como un todo y la respuesta debe considerar a todos. La respuesta debe considerar la historia de las condiciones de vida globales: una historia de todos”, dijo Roser en su artículo.
Roser dijo a El País que “los cambios positivos necesitan mucho tiempo”, pero “por supuesto, debemos fijarnos en lo que sigue mal para intentar mejorarlo”.
Su perspectiva es un retroceso en el tiempo más allá de 50 años, porque estima que este es un período insuficiente. Considera que un análisis del mundo solo en nuestro tiempo de vida podría dar la impresión de que el está estático. Roser retrocede dos siglos.
Pobreza
“Adopta una perspectiva más larga y queda muy claro, países que son ricos hoy día eran muy pobres recientemente y, de hecho, estaban peor que países que son pobres en la actualidad. Para evitar retratar el mundo de una manera estática –el Norte siempre es mucho más rico que el Sur– tenemos que comenzar 200 años atrás, antes de que las condiciones de vida realmente cambiaran dramáticamente”, dice Roser.
En 1820 una pequeña élite tenía nivel de vida elevado (5,6 por ciento) y la gran mayoría vivía en lo que hoy llamaríamos pobreza extrema (94,4 por ciento). Pero esa tendencia se revirtió constantemente, porque más “regiones del mundo se industrializaron y, por lo tanto, aumentaron la productividad, lo que permitió sacar a más personas de la pobreza”.
La productividad fue determinante en un mundo que multiplicó su población en siete veces en los últimos 200 años. Según los gráficos en 1950 tres cuartas partes del mundo vivían en pobreza extrema; en 1981 todavía era 44 por ciento. Para 2015 la investigación sugiere que la pobreza extrema ha caído por debajo del 10 ciento.
Alfabetización
Como ocurrió con los niveles de pobreza y riqueza, dos siglos atrás eran pocos los que podían leer y escribir (100 millones). De las personas mayores de 15 años el 12,4 por ciento. Fue precisamente en la década de los 80del siglo XX cuando la tendencia se revirtió drásticamente: de 56,05 por ciento en 1980 pasó, en 2015, a poco más del 85,3 por ciento.
“Si vivías en 1800 había una posibilidad de 9 de cada 10 de no pudieras leer; hoy más de 8 de cada 10 personas pueden leer. En la actualidad, hay 5,400 millones de personas mayores de 15 años que si pueden”, dice Roser.
Salud
“Una razón por la cual no vemos progreso es que no somos conscientes de lo malo que fue el pasado”, comienza diciendo Roser.
Tal fue el cambio que 200 años atrás el 43, 3 por ciento de los niños morían antes de cumplir los cinco años. En 2015 esa cifra se situó en 4,39 por ciento.
Las mejoras en la vivienda y el saneamiento aumentaron las posibilidades de sobrevivir a las enfermedades infecciosas. También lo posibilitó una dieta más saludable, debido a mayor productividad en el sector agrícola y en el comercio exterior. Mejorar la nutrición y la salud también nos hizo más inteligentes y más altos, explica Roser, aunque añade también importaron los adelantos de la ciencia y la medicina, relacionados con tener una población más educada.
Libertad
“Hay varios intentos de medir los tipos de regímenes políticos que gobiernan los países del mundo y capturar algo tan complejo como un sistema político que es necesariamente controvertido. Simplemente no hay forma de evitar eso. En este análisis confiaré en el índice Polity IV ya que es la menos problemática de las medidas que presentan una perspectiva a largo plazo”, advierte Roser.
Este es, quizás, el más controversial de los gráficos y muestra quienes viven en democracia y quienes en dictaduras. Existen las anocracias abiertas y cerradas (sistemas con mezcla de prácticas democráticas y autocráticas). Además , en lila, las personas que viven o vivían en colonias. En verde están aquellos que viven en democracia.
“Los derechos humanos son igualmente difíciles de medir consistentemente a lo largo del tiempo y en el tiempo. Los mejores datos empíricos muestran que después de un tiempo de estancamiento, la protección de los derechos humanos mejoró globalmente en las últimas 3 décadas”, afirma Roser.
Población
Al hacer clip en “Absoluto” en cualquiera de los gráficos anteriores se el aumento de la población en 200 años. En 1800 era de alrededor de mil millones en el año 1800 y desde entonces se multiplicó por siete.
“El crecimiento de la población aumentó la demanda de recursos de la humanidad y amplió el impacto de la humanidad en el medio ambiente. Pero este aumento de la población mundial debería evocar más que fatalidad y tristeza. En primer lugar, este aumento muestra un tremendo logro. Muestra que los humanos dejaron de morir a la velocidad a la que nuestros antepasados murieron durante muchos milenios antes”.
“El crecimiento de la población es una consecuencia de la fertilidad y la mortalidad que no disminuyen simultáneamente. El rápido crecimiento de la población ocurrió cuando la fertilidad aún era tan alta como en el ambiente insalubre del pasado, pero la mortalidad ya ha disminuido a los niveles bajos de nuestro tiempo”, explica Roser.
Pero, añade, por varios factores “el crecimiento de la población llega a su fin”.
“La fertilidad global se ha reducido a más de la mitad en los últimos 50 años, desde más de 5 niños por mujer a principios de la década de 1960 hasta menos de 2.5 en la actualidad. Esto significa que el mundo está bien en la transición demográfica y el crecimiento de la población mundial de hecho ha alcanzado su punto máximo hace medio siglo”, dice.
Eduación
Este es el logro fundamental, porque nada del resto hubiera sido posible. “La revolución en la forma en que vivimos no solo fue impulsada por la educación sino que también hizo que la educación fuera más importante que nunca”, dice Roser.
Añade, según el análisis de los gráficos, que “la proyección sugiere que para el año 2100, casi no habrá nadie sin educación formal y habrá más de 7 mil millones habrán recibido al menos educación secundaria”.
Conocer la historia
“Hay grandes problemas que quedan y ninguno de los anteriores debería darnos motivos para volvernos complacientes. Por el contrario, nos muestra que aún queda mucho por hacer: lograr la reducción más rápida de la pobreza es un logro tremendo, pero el hecho de que 1 de cada 10 personas viva hoy en la pobreza extrema es inaceptable. Tampoco debemos aceptar las restricciones de nuestra libertad que permanecen y que se ponen en práctica. Y también está claro que el impacto de la humanidad en el medio ambiente está en un nivel que no es sostenible y está poniendo en peligro la biosfera y el clima del que dependemos. Necesitamos urgentemente reducir nuestro impacto”, dice Roser.
“Pero lo que está claro desde la perspectiva a largo plazo es que los últimos 200 años nos han llevado a una mejor posición que nunca antes para resolver estos problemas (…). Debido a que nuestras esperanzas y esfuerzos para construir un futuro mejor están inextricablemente ligados a nuestra percepción del pasado, es importante comprender y comunicar el desarrollo global hasta ahora”, añade.