James Williams trabaja para derogar las sanciones y restricciones que en Estados Unidos se suelen llamar “embargo” y en La Habana “bloqueo”. Preside Engage Cuba, un grupo de lobby que a partir del próximo mayo, apoyará o convencerá a congresistas y senadores para que voten a favor de un acercamiento con la isla.
“Hay muchos miembros de ambas alas del Congreso que necesariamente no apoyaron la política anterior, pero no actuaron porque no existían incentivos y parecía improbable avanzar”, comentó Williams a Oncuba en una entrevista vía correo electrónico.
“El statu quo, la posición de línea dura, era la única respuesta políticamente viable unos años atrás, pero ya no es así.” En ese contexto, su organización resulta “oportuna” porque “hay un nuevo ambiente en Washington, tanto desde el punto de vista regulatorio como en el político. Eso hace posible el cambio.”
Desde su perspectiva, la mayoría republicana en la rama legislativa no es un obstáculo. Su grupo de lobby cuenta con varios políticos profesionales del Great Old Party (GOP) como el ex subsecretario de Trabajo Steven Law o la ex asistente presidencial Kirsten Chadwick. Ambos sirvieron a la administración de George W. Bush.
“Creemos que hay mucho más interés en el Congreso del que antes pensamos posible.” Habla, por supuesto, del mismo Congreso donde la oposición al demócrata Barack Obama tiene una superioridad numérica sin precedentes desde los años veinte del siglo pasado.
Obama le solicitó al Congreso un cambio el pasado 20 de enero, durante su discurso del Estado de la Unión: “En Cuba, estamos poniendo fin a una política que debería haber terminado hace tiempo. Cuando uno hace algo que no funciona durante cincuenta años, es hora de probar algo nuevo. Nuestro cambio de política en relación con Cuba tiene el potencial de poner punto final a un legado de falta de confianza en nuestro hemisferio; desmorona una excusa ficticia para imponer restricciones en Cuba; defiende los valores democráticos; y extiende una mano de amistad al pueblo cubano. Y este año, el Congreso debería iniciar el trabajo de poner fin al embargo. Como dijo Su Santidad, el papa Francisco, la diplomacia es un trabajo de ´pequeños pasos´.”
En Washington
“Hasta el presidente republicano del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, Bob Coker, dice que el embargo ha sido inefectivo” explica Williams, mencionando además una carta donde otros siete senadores de ese mismo partido expresaron al presidente estadounidense su respaldo al nuevo curso de la política hacia la isla.
“En este panorama cambiante, ya hay una legislación bipartidista introducida para expandir el comercio, y un grupo bipartidista de senadores de Estados Unidos presentó además una ley para terminar la prohibición de viaje [que impide] a los estadounidenses ir a Cuba.”
“Esa es la nueva realidad en Washington, y es una que hará mucho más por hacer avanzar los intereses de EE.UU., promover nuestros valores y apoyar al pueblo cubano, mientras trabaja para definir su propio futuro y mejorar sus derechos humanos básicos”, señala Williams.
La organización que encabeza se describe como “un grupo de operadores políticos de pesos pesados” que “están configurando una nueva campaña para presionar al Congreso para derogar el prolongado embargo comercial y de viajes”, una reseña cortesía de The Wall Street Journal.
Para alcanzar ese propósito, una de sus primeras prioridades sería conseguir votos en el Senado. Precisamente, dos de los asesores de Engage Cuba, Steven Law y Billy Piper, trabajaron en el pasado con Mitch McConnell, líder de la mayoría republicana en esa cámara.
Un tiempo de cambios
Williams responde varias preguntas reiterando que es el momento apropiado. “Hay un amplio consenso emergiendo de empresas, la agricultura, expertos políticos y la sociedad civil en general de que el Congreso debe terminar las antiguas restricciones al comercio y los viajes a los estadounidense, algo que se interpone en el camino de un compromiso más significativo con el pueblo cubano.”
La mayoría dominante en el Congreso no tiene por qué oponerse, ni siquiera por una cuestión de principios. “Los republicanos creen en el poder del libre mercado y en apoyar verbalmente los valores estadounidense en todas partes.”
A pesar de la apertura iniciada en diciembre de 2014 por la Casa Blanca, el Departamento del Tesoro mantiene la mayor parte de su programa de sanciones contra Cuba, como reconoció en una audiencia parlamentaria John E. Smith, subdirector de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC).
El presidente de Engage Cuba insiste en que en el interior del Capitolio “hay suficiente apoyo” para actualizar la política hacia la isla caribeña. La reciente decisión del Congreso de no oponerse a la exclusión de Cuba fuera de la Lista de Estados Patrocinadores del Terrorismo podría indicar que están digiriendo la nueva política.
La representante republicana por La Florida, Ileana Ros Lehtinen, consiguió 35 cofirmantes para un proyecto contra esa remoción. Sus planes se quedaron a mitad de camino. No pudo convocar una mayoría simple para ofrecer lo que era desde el principio una resistencia simbólica: el veto presidencial dejaría sin efecto cualquier legislación contraria a las decisiones del propio Obama.
El principio del fin
¿Cuánto tiempo coexistirán Engage Cuba y la ley Helms-Burton? James Williams prefiere hablar de hechos y encuestas, no ofrecer predicciones. “Puedo decirles que hay varias organizaciones e individuos importantes involucradas en este esfuerzo, porque pensamos que ha llegado el momento para una política más inteligente y efectiva hacia Cuba…”
“No puedo decirles cuánto demorará, pero si el Congreso actúa, nuestras políticas tendrán un impacto mucho más significativo y rápido que las políticas fracasadas de los últimos cincuenta años.”
En otras palabras: dejemos el garrote y utilicemos la zanahoria. A comer zanahoria gente.
Ya es hora para el levantamiento del bloqueo contra Cuba, si han pasado 54 años y no ha dado resultados como dice el presidente, ya es hora de eliminarlo y experimentar nueva politica, creo que esa es la mejor solucion para un asercamiento con Cuba.
Me perdonan todos, pero realmente sigo bastante incrédulo y receloso (lo cual no indica que niegue el acercamiento) con todo este rejuego de cartas bajo la mesa.
Es que no me acaba de pasar por la garganta esta extraña mezcla de PIRATERÍA DEL SIGLO XXI, SOFTPOWER Y ZANAHORIAS CON TOQUES DIPLOMÁTICOS.
No sé por qué siempre tiendo a leer entre líneas textos como este (del propio artículo, eh !!!):
“…porque pensamos que ha llegado el momento para una política más inteligente y efectiva hacia Cuba…”
Y me pregunto nuevamente: ¿Que conduzca a qué y a dónde?
senores esto es para que elmundo se de cuenta que lo que pasa en cuba no es por culpa de los americanos porque llevamos 56 anos diciendo que todo lo que pasa en cuba es por los americanos y ponen a los castros como las victimas y no es haci a demas que alguien me diga en que a trabajado el bloqueo en cuba porque en cuba para los de del govierno siempre ahay de todo de todo el mundo y el unico que no tiene es el pueblo y los que gosan con el sufrimiemto del puecblo cubano son los politicos de a qui que soo hacen politica a costa del pueblo cubano y nunca buscan una solucion para el puebloel diga que haya un cambio en cuab de que van hablar porque no hacen nada por los que lo llevan a donde estan solo le interesa seguir oprimiendo al pueblo de cuba para complacer a unos pocos en miami que son mas comunistas que los de cuba