Las personas más altas tienen un mayor riesgo de cáncer por el solo hecho de ser más grandes y, por lo tanto, tienen más células en sus cuerpos en las que pueden ocurrir mutaciones peligrosas, sugiere una investigación de la Universidad de California.
Varios estudios ya habían encontrado previamente una relación entre una estatura elevada y un mayor riesgo de desarrollar algún tipo de cáncer. Las nuevas investigaciones afirman que por cada 10 centímetros de altura, el riesgo aumenta en aproximadamente un 10%. También se ha encontrado un vínculo similar en los perros, las razas más grandes tienen un mayor riesgo de tales enfermedades.
Leonard Nunney, profesor de biología en la Universidad de California en Riverside, dijo que su trabajo, publicado en la revista de la Royal Society, muestra cómo los individuos acumulan mutaciones en sus células a lo largo de su vida. La teoría sugiere que tener más células, o más divisiones por célula, aumentaría el riesgo de cáncer.
Los casos estudiados revelan un aumento del 13% en el riesgo para las mujeres por cada 10 centímetros adicionales de altura y un aumento del 11% en los hombres por cada 10 centímetros más altos. En general, se observó un aumento del riesgo según aumenta la altura en 18 de los 23 cánceres considerados.
Tall people are more likely to develop cancer https://t.co/afyyjecWw2 pic.twitter.com/URihSDx4nF
— New York Post (@nypost) 26 de octubre de 2018
La investigación también arrojó algunas sorpresas: por ejemplo, el melanoma del cáncer de piel muestra un vínculo mucho más fuerte con la altura de lo esperado, algo que Nunney sugiere que podría deberse a que las personas más altas tienen niveles ligeramente más elevados de una hormona de crecimiento llamada IGF-1.
La profesora Dorothy Bennett, directora del Instituto de Investigación de Ciencias Moleculares y Clínica de la Universidad de Londres, dio la bienvenida a la investigación. Dijo que los cálculos de Nunney involucraron una serie de simplificaciones pero que el argumento y el método es convincente.