Cuba encontró finalmente un equipo que cometiera más errores en la cancha de Varna y se despidió del Campeonato Mundial de Voleibol con victoria. Puerto Rico fue la víctima del elenco varonil de la Mayor de las Antillas, que cierra así su temporada, sin grandes dividendos más allá de la clasificación panamericana.
El joven plantel dirigido por Nicolás Vives sometió sin sobresaltos a los boricuas en cuatro sets (25-15, 22-25, 25-21 y 25-17), apoyados en el destructivo poder ofensivo de Miguel David Gutiérrez (31 puntos) y en la superioridad del bloqueo y el servicio, conceptos que aportaron 24 unidades.
Desde la línea de saque se lograron 12 aces, además de incordiar permanentemente a la defensa puertorriqueña, a la cual le costó armar complejos uno efectivos. Por su parte, los cubanos dominaron ampliamente en la net con una docena de bloqueos repartidos entre Miguel Ángel López y la pareja de centrales Roamy Raúl Alonso-Livan Osoria.
No obstante, la clave del partido estuvo en los errores puertorriqueños (35), que dejaron una ventana abierta a los cubanos para permanentes embestidas. La punta de lanza en este apartado fue el opuesto Gutiérrez, quien marcó él solo la misma cantidad de unidades en ataque que todo el plantel boricua, con más de un 60% de efectividad.
“Este fue el mejor final posible para nosotros en el Mundial, a pesar de las derrotas en los partidos anteriores. ¡Gran victoria contra un oponente muy duro! Estoy satisfecho no solo con el triunfo, sino también con nuestra actuación durante todo el campeonato. Perdimos algunos juegos, pero nos volvimos más fuertes ganando una experiencia invaluable”, sentenció al culminar el encuentro el técnico Nicolás Vives.
Cuba quedó sin opciones de avanzar a la segunda ronda del certamen desde este domingo, cuando cayeron contra Bulgaria, su cuarto revés en fila. Tras un complicado inicio frente a los monarcas defensores, Polonia, los caribeños no supieron sobreponerse en duelos sucesivos ante Irán y Finlandia.
A la postre, luego de completarse la fase de grupos, el sexteto antillano evitó el último lugar de su llave, con un éxito en cinco salidas, seis sets a favor y 13 en contra.
Esta actuación mundialista no sorprende; Cuba no estaba y tampoco se le esperaba, a tenor con los resultados de los últimos meses. Si bien se logró el boleto a los Juegos Panamericanos de Lima 2019, el conjunto no exhibió jamás estabilidad en su juego, detalle que los hundió en el cuarto puesto de los Centroamericanos de Barranquilla, uno de los más ridículos resultados en la historia de este deporte en la Mayor de las Antillas.