El torneo cubano de fútbol vuelve a cambiar de formato. A partir del próximo 19 de enero, la edición 104 del campeonato nacional estrenará una nueva estructura, en la que estarán representadas todas las provincias de la Isla en una misma categoría, informa el diario Granma.
El nuevo sistema desecha el formato utilizado en los últimos tres años, con un torneo de ascenso que otorgaba dos boletos a la primera división. Luego, 12 equipos pugnaban organizados en tres grupos por seis cupos para la ronda final, de la que emergía campeón el equipo que sumaba más puntos.
Uno de los aspectos más criticados entonces era la celebración de partidos con apenas un día de descanso en la etapa eliminatoria, algo que se rectifica en la próxima estructura. En la misma, la cifra de encuentros se incrementará a 14 en la primera etapa –en la anterior eran 12–, los que se desarrollarán los miércoles y sábado de cada semana, “siempre desde las 4:00 p.m.”, explica Granma.
El nuevo campeonato cubano se dividirá en dos zonas: occidental y oriental, cada una con ocho equipos. En la del oeste se agruparán Pinar del Río, Isla de la Juventud, Artemisa, Mayabeque, La Habana, Matanzas, Cienfuegos y Villa Clara; mientras en la del oeste estarán Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Camagüey, Las Tunas, Granma, Holguín, Guantánamo y el doble campeón nacional Santiago de Cuba.
En la primera etapa, a desarrollarse hasta el 20 de marzo, cada equipo enfrentará dos veces –una como local y otra como visitante– a los conjuntos de su misma zona. En esta fase clasificarán cuatro elencos por el oriente y otros cuatro por el occidente, de los que emergerá el nuevo rey del fútbol cubano en una liguilla final que se celebrará entre el 30 de marzo y el 24 de abril, también con encuentros de ida y vuelta.
El campeón, como el formato anterior, será el que acumule la mayor cantidad de puntos.
A priori, el nuevo sistema mejora varios de los problemas señalados al anterior, aunque tiene como principal limitante que la mitad de los equipos involucrados –los que no pasen a la segunda fase– solo jugarán contra rivales de su misma región geográfica, lo que “debilita la posibilidad en el crecimiento de cada joven futbolista”, apunta Granma.
Además, a juzgar por lo sucedido en los últimos torneos, la calidad luce desbalanceada pues los principales contendientes al título se concentran en la zona oriental. En el campeonato anterior, cinco de los seis equipos que avanzaron a la segunda etapa están ahora en ese apartado: Santiago de Cuba (campeón), Ciego de Ávila (subcampeón), Camagüey (4to), Sancti Spíritus (5to) y Granma (6to).
A esto habría que agregar que conjuntos como Las Tunas y Guantánamo han mostrado su fuerza en las temporadas recientes.
En el occidente, en cambio, solo Pinar del Río, Cienfuegos y los descendidos en el torneo anterior Villa Clara –multicampeón histórico– y La Habana, muestran credenciales.