El gobierno de Cuba reaccionó con un mensaje de “apoyo y confianza” para el expresidente de Ecuador, Rafael Correa, tras conocerse que la justicia de su país lo condenó este martes a ocho años de prisión y la retirada de sus derechos políticos por un supuesto delito de cohecho.
“Reafirmamos apoyo y confianza en expresidente de #Ecuador, Rafael Correa @MashiRafael. Rechazamos los procesos judiciales políticamente motivados contra los líderes de izquierda que tienen lugar en #NuestraAmérica”, escribió el ministro de Relaciones Exteriores de la isla, Bruno Rodríguez, en su cuenta de Twitter.
Reafirmamos apoyo y confianza en expresidente de #Ecuador, Rafael Correa @MashiRafael. Rechazamos los procesos judiciales políticamente motivados contra los líderes de izquierda que tienen lugar en #NuestraAmérica.
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) April 7, 2020
Durante el mandato presidencial de Rafael Correa (2007-2017) el país suramericano se convirtió en un fuerte aliado político de Cuba. Desde entonces el hoy expresidente ha visitado en numerosas ocasiones la Isla, incluso tras finalizar su gobierno y entregar el poder a Lenín Moreno.
El más reciente viaje de Correa a Cuba fue en septiembre de 2019, cuando realizó una visita privada durante la cual se reunió con el expresidente y líder del Partido Comunista de la Isla, Raúl Castro.
El exmandatario de Ecuador fue sido condenado este martes a ocho años de cárcel y 25 años de inhabilitación política como autor de un presunto delito de cohecho agravado, por el que perdería, además, sus derechos políticos durante 25 años, según dictaminó el tribunal penal de la Corte Nacional de Justicia.
La sentencia atribuye a Correa haber liderado una red de corrupción entre 2012 y 2016 mediante la cual recibió “aportes indebidos” en el palacio presidencial de Carondelet para la financiación irregular de su movimiento político, el izquierdista Alianza País, a cambio de la adjudicación de millonarios contratos del Estado a varias empresas, entre ellas Odebrecht.
Tras conocer la condena, el expresidente, quien reside actualmente en Bélgica, denunció este martes la “judicialización de la política” en su país para inhabilitarlo antes de que pueda inscribirse como candidato para las elecciones de 2021.
En declaraciones a la agencia Efe, Correa dijo que “es un atentado a los derechos humanos y a la democracia”, consideró el caso de “ridículo” y aseguró que “no existen sobornos por ningún lado”.
No se podía esperar otra cosa de Lenin Moreno y su banda de traidores