La jueza Sara Cockerill, de la sala Comercial del Tribunal Superior de Londres, rechazó una apelación del Gobierno de Cuba para revertir su veredicto en el juicio del pasado abril, con el fin de determinar si el fondo de inversión CRF I era acreedor legítimo del Estado cubano y del Banco Nacional de Cuba (BNC) por una rueda ascendente a 72 millones de euros.
En su decisión inicial, la magistrada había determinado que existían fundamentos legales para que el mencionado fondo pudiera demandar al BNC por el impago de esa deuda, pero no para considerar al grupo de inversores como acreedor del Estado cubano por los préstamos otorgados en 1984 por los bancos europeos Crédit Lyonnais Bank Nederland e Istituto Bancario Italiano, a través del BNC.
En nota de prensa divulgada este miércoles por CRF I, el fondo valoró la decisión de Cockreil como un “importante avance en su batalla legal en curso”, porque “afirma la decisión original de la corte a favor de CRF I” y “limita las opciones defensivas del Gobierno de Cuba y mejora significativamente la posición de CRF en el caso”.
Añade el comunicado que “en un movimiento sin precedentes, el Banco Industrial y Comercial de China, a través de su filial británica ICBC Standard Bank, ha iniciado un proceso judicial contra Cuba por aproximadamente 1100 millones de euros”.
Para CRF I, considerado por Cuba como un fondo buitre, “esta acción sigue a la presión significativa de CRF para que ICBC proteja sus intereses como custodio de los activos cubanos de CRF. La decisión del ICBC de litigar contra Cuba es un importante paso adelante para CRF y agrega otra dimensión a los crecientes desafíos legales”.
El grupo inversor también destacó que ya el Gobierno de la isla “reembolsó a CRF por los costos legales ordenados por el tribunal luego de la victoria inicial de CRF en el Tribunal Superior del Reino Unido”.
A su entender, “esta compensación reconoce la validez de los reclamos de CRF y es una indicación positiva para CRF y sus inversores”.
Hasta el momento, ni el Gobierno cubano ni las entidades financieras de la isla involucradas en el proceso, han emitido declaraciones relacionadas con la nueva decisión de la corte británica.
Según ha trascendido, CRF I está registrado en Islas Caimán y fue creado para invertir en deuda soberana de Cuba impagada. Tiene una cartera de bonos que en 2017 ascendía a 1200 millones de euros (1.300 millones de dólares al cambio actual), por lo que es considerado el mayor tenedor de deuda cubana.
Es muy interesante las informaciones que la plataforma emite, los Cubanos no tenemos confianza en las nacionales por el nivel parcializada y poco Crítico de la realidad que se vive.