Redacción OnCuba
Varias cajas de colores, con fotos de chabolas y que simulan ser una favela, adornan uno de los pasillos de la sede de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana como parte de la exposición “La anarquía del espacio” del fotógrafo español Ángel Marcos, inaugurada el viernes.
En entrevista con Efe, el artista nacido en Medina del Campo (Valladolid) hace 68 años explica que la muestra -con 27 piezas inéditas- intenta formular “una reflexión” sobre “los lugares que se habitan con escasos recursos”.
En pocas palabras, la “arquitectura para sobrevivir, sin normas de urbanismo”, subraya el fotógrafo español.
“No pretendo que este proyecto sea ni documental ni queja, sino que se establezca una relación con la memoria afectiva de quien lo observa”, agrega.
La exposición es una muestra de distintos materiales, bajo una misma temática que el artista ha recolectado desde hace dos décadas en lugares como su natal Medina del Campo, África, Cuba o Estados Unidos.
Algunas piezas son ya clásicos del autor, como la serie Shipibo, un homenaje al pueblo indígena de la Amazonía peruana o la visión de Marcos de la capital cubana en el paso del tiempo.
Mensaje social
El punto final, no es el lugar sino lo que evoca. Y la idea de la periferia más allá de lo geográfico o lo físico.
En palabras de Marcos: “La periferia que se produce cuando las personas no tenemos ningún derecho o posibilidad de ejercer cierta influencia”, recuerda. En su mensaje también hay una clave social y política.
Es en la periferia, en donde coexiste aquella anarquía del espacio y la supervivencia, donde no llega ni el eco del discurso político.
“El arte por definición es político… no pretendo que este proyecto sea ni documental ni de queja, sino que se establezca una relación con la memoria afectiva de quien lo observa”, remarca.
La exposición, según se desprende del programa oficial, contempla la proyección de una versión del documental Alrededor del sueño, un trabajo -aún en elaboración- del periodista y director vallisoletano José Ramón Rebollada.
El fotógrafo, quien al momento de la entrevista cumplía una semana de haber aterrizado en La Habana, ciudad que visitó por primera vez en los años ochenta, sabe muy bien del poder de su mensaje en una isla que vive inmersa en una profunda crisis económica que se traduce, entre otras cosas, en escasez.
Sin caer en los lugares comunes, Marcos -galardonado por la Diputación de su provincia con el Premio Trayectoria Artística Provincia de Valladolid 2017- espera de los habaneros que encuentren en la exposición un punto de “acercamiento de cada uno a uno mismo” y de “emoción”.
“La anarquía del espacio” se expondrá hasta 8 de octubre.
EFe/OnCuba.
