Exactamente dentro de una semana comenzará la 63 Serie Nacional de Béisbol. El evento trae novedades en su reglamento y en la estructura del calendario, que constará de cinco juegos entre cada equipo con un día de descanso fijo —los viernes— cada semana. Ante la situación económica del país, parece lo más prudente.
Se mantendrá entonces la misma cantidad de juegos (75) y clasificarán a la postemporada los ocho punteros de la lid. Otro aspecto significativo será el vinculado a las altas y bajas durante el torneo, que, según el reglamento, podrán ocurrir solamente en los juegos 20, 40 y 60. En el choque 74 solo podrán dar alta los equipos clasificados a los playoffs o los que todavía conserven chances de llegar a la discusión de las posiciones de avanzada.
Estas ventanas permitirán que peloteros que, por determinadas causas, no pudieron comenzar el torneo, suban, y en muchos casos aumentará la calidad competitiva de los conjuntos.
La mayor cantidad de altas para un equipo durante la justa son ocho, sin tener en cuenta a los atletas contratados en el exterior, bajo el amparo de la Federación Cubana de Béisbol. El tope impone una cuota necesaria ante el historial de equipos que en una campaña veían desfilar a innumerables peloteros.
Otro aspecto que cambia es la incorporación de los atletas que llegan de contratos. En torneos anteriores, el jugador que llegaba de otras ligas debía cumplir un descanso obligatorio. Para esta edición, el pelotero tiene el derecho a descansar cuando regrese del contrato, pero si determina incorporarse inmediatamente a su equipo, lo puede hacer. Así se elimina la posibilidad de que ocurra lo que sucedió en la segunda Liga Élite con el artemiseño Dayán García, quien tuvo que esperar varios días para sumarse a la postemporada.
Desde el punto de vista técnico-táctico, la Comisión Nacional será más exigente en el cumplimiento de los horarios de prácticas antes de los juegos, así como con los entrenamientos de potencia, velocidad y fuerza explosiva, a realizarse de manera obligatoria en las mañanas, según afirmó Humberto Guevara, jefe técnico del béisbol cubano, en declaraciones al periodista Guillermo Rodríguez Hidalgo-Gato.
Con estas cartas sobre la mesa, parece un torneo muy bien organizado, sin muchos detalles que se puedan escapar de la mano, aunque la pelota es redonda…
Pronósticos, ejercicio de riesgo
¿Qué equipos tienen más opciones de clasificar a la postemporada? ¿Cuáles son las mejores nóminas? ¿Cuánto afectarán a las selecciones las ausencias de jugadores contratados en otras ligas? Juguemos a la ruleta rusa de los pronósticos rumbo a la 63 Serie Nacional de Béisbol.
Varias novenas sobresalen con sus nóminas para entrar sin problemas a los playoffs de la 63 Serie Nacional de Béisbol. Entre ellos está la selección de Matanzas, aunque su director Armando Ferrer se muestre escéptico respecto a la clasificación. ¿Preocupación de cocodrilo viejo?
Los yumurinos tendrán varias ausencias por contratos, como Yoanni Yera, Yurisbel Gracial y Yadir Drake. Además, Erisbel Arrubarrena no arrancará con el grupo. Pero, más allá de estos nombres, los Cocodrilos cuentan con figuras suficientes para colarse, sin problemas, entre los ocho elegidos. Jugadores como Ariel Sánchez, Eduardo Blanco, José Amaury Noroña, Andrys Pérez, Aníbal Medina y el guantanamero Luis Ángel Sánchez, un fichaje de lujo, cargarán con la mayor responsabilidad.
Otro de los conjuntos que aspira con fuerza a la siguiente fase es el actual campeón nacional. Con los Leñadores de Las Tunas repite el mismo núcleo que se coronó en la campaña anterior, aunque tendrán dos bajas importantes desde el montículo: Carlos Juan Viera (no hizo el grado por un caso de dopaje del que existe muy poca información) y el zurdo Ángel Sánchez, quien por decisión propia no jugará el torneo.
Se les incorpora el holguinero Rubén Rodríguez, programado en rol de abridor, aunque siempre ha tenido protagonismo en el bullpen. El picheo tunero nunca ha sido la octava maravilla, pero la ofensiva casi siempre hace el trabajo. No tengo dudas, contaremos con hachas en la postemporada.
Mayabeque parece otro de los destinados a seguir con vida en la fase definitoria. Regresa 16 series después el lanzador Yusdel Tuero, y se suman desde Industriales el receptor Lázaro Ponce, el torpedero Sandy Menocal, el jardinero Yoasán Guillén y el lanzador Julio Rodríguez.
Lo más complicado será suplir a Rangel Ramos en el campo corto, pero Michael González cuenta con armas suficientes para caminar lejos en la lid. Resulta increíble que los Huracanes no hayan clasificado en la edición anterior, porque en papel no tiene nada que envidiar a ningún rival. ¿Será esta la campaña para redimirse?
Después del exitoso debut de Yuliesky González como mánager y el subcampeonato en la segunda Liga Élite del Béisbol Cubano, no se les puede pedir menos que una clasificación a los Cazadores de Artemisa, que sumaron a los lanzadores Leonardo Ocle y Juan Ramón Olivera desde Pinar del Río y Granma, respectivamente. Además, contarán con el guantanamero Yoelkis Baró para redondear el infield.
Otra vez los artemiseños tendrán un trío de abridores importantes, con Yuniesky García, Geonel Gutiérrez y Elian Moreno. Motivaciones aparte, no colarse entre los ocho después de los mejores resultados históricos en la campaña anterior, sería una decepción.
Sancti Spíritus es el equipo con mejor bullpen del campeonato. La dupla Yankiel Mauri-Yaniesqui Duardo preservará muchas victorias en los finales de los partidos, y es un lujo contar con dos relevistas de ese nivel en nuestra pelota.
Regresa un puntal desde la lomita como José Eduardo Santos, mientras que Alex Guerra, José Isaías Grandales y Ariel Zerquera suman otro año de experiencia como lanzadores. El retorno de Carlos Gómez y de Alexis Miguel Varona puede ayudarlos mucho en la ofensiva.
Los ilustres veteranos Frederich Cepeda y Yunier Mendoza tirarán del carro en el centro del lineup. Las mayores dudas pasan por la defensa en el infield, un coladero en la serie anterior, pero les alcanzará, como casi siempre, para llegar a los playoff. Los problemas vendrán después…
Granma es otro de los conjuntos con papeletas para los playoffs. Regresa al banquillo Ángel Ortega Liens y se mantiene el núcleo de jugadores importantes, aunque la duda radica en si Roel Santos, Guillermo García y Alfredo Despaigne podrán jugar gran parte del torneo ante la posibilidad de contratos.
La incorporación de Alexander Guerra en la receptoría será un plus importante, pues se trata de una posición que ha tenido muchos problemas en los últimos años. El cuerpo de lanzadores es de los que tiene más rodaje competitivo, y para el nivel de la pelota cubana luce aceptable. ¿El nuevo mánager le cambiará la cara a los Alazanes en la era post Carlos Martí?
Otro con todas las papeletas para seguir en liza es Industriales. Es cierto que perderán en el medio de la competencia a sus principales lanzadores por contratos, pero se refuerzan con jugadores importantes. Contarán desde el día inicial con Yasmani Tomás. Además, llegan para reforzar el cuadro el matancero Julio César González y Alfredo Rodríguez, con varios años de experiencia en Ligas Menores en Estados Unidos.
El regreso tras lesiones de Andy Vargas y Fher Cejas será fundamental en el propósito de continuar hacia la fase definitoria, así como la labor de Maykel Taylor. ¿Podrá ese cuerpo de lanzadores realizar el trabajo cuando sufran de cuatro a cinco bajas importantes a mitad del torneo?
El octavo pasajero me deja muchas dudas, pero creo que pudiera estar entre Pinar del Río y Camagüey. Con los vueltabajeros regresa el ex Grandes Ligas Alexei Ramírez, y tendrán además un picheo que tradicionalmente ha rendido, incluso con figuras no tan conocidas. Para este equipo será crucial el aporte de Juan Carlos Arencibia como bujía, y la producción de poder de William Saavedra y Yasser Julio González.
Los agramontinos, por su parte, tendrán el refuerzo de Jorge Luis Peña, un jardinero de poder que ha llegado desde Holguín, y conservan una dupla sólida al bate con Alexander Ayala y Luis González. Está por ver lo que pueden aportar lanzadores de renombre como Dariel Góngora y José Ramón Rodríguez, aunque este último es posible que salga en algún punto del campeonato a cumplir contrato.
El resto de los elencos no parece tener armas suficientes para cumplir el objetivo de clasificar, pero la pelota cubana actual es muy veleidosa y con tanta paridad nunca se sabe.
Si tuviera que apostar por alguna sorpresa, serían los históricos Santiago de Cuba (medallista en la contienda pasada) y Villa Clara, porque los demás no inspiran mucha confianza: Holguín sufrió una gran renovación y el mentor debutante, Lugdis Pineda, comienza un ciclo que le llevará años para estabilizar resultados, mientras Cienfuegos, Isla de la Juventud, Ciego de Ávila y Guantánamo se antojan en el papel como los equipos más débiles de la contienda.
La voz de ¡Play ball! está a la vuelta de la esquina. ¿Acertaremos en los pronósticos?