Redacción OnCuba
Desde hoteles hasta agencias de viaje, transitando por restaurantes, almacenes y ventas mayoristas, entre otras dependencias, la XVI Comprobación Nacional al Control Interno le pasará una inspección a la industria turística, una de las más importantes de la isla y destino de la mayoría de las inversiones del Estado.
Iniciada este miércoles en dependencias ubicadas en todas las provincias y el municipio especial Isla de la Juventud, la inspección se extenderá hasta el 31 de octubre con 170 acciones de control en empresas y entidades relacionadas con el turismo, según un informe publicado en el periódico Granma.
De acuerdo con el medio, este ejercicio anual para controlar la marcha de las políticas públicas evaluará el ritmo e implementación de las medidas, disposiciones y normas establecidas que permitan mejorar la eficiencia en la gestión administrativa.
El objetivo general declarado es vigorizar la empresa estatal socialista, entronizada en la Constitución de la República como el sujeto principal de la economía nacional, por lo que el resto de las formas de producción y propiedad asumen un papel complementario.
Se inspeccionará en las entidades seleccionadas la gestión administrativa y el uso eficiente de los recursos, en primer lugar los energéticos, la formación de precios, las relaciones de suministro o encadenamientos de los diferentes actores de la economía con el turismo, en específico: la producción agrícola y de alimentos; la industria nacional de muebles y la elaboración de productos de aseo.
La selección de entidades incluye a todas las provincias y el municipio especial Isla de la Juventud.
Las acciones se realizarán en 43 municipios, el 25,6 % de los 168 municipios del país y con preeminencia se evaluará el uso y destino del combustible, excepto en las comprobaciones especiales a los suministradores, y otros aspectos complementarios que requieran ser verificados (contratación, cuentas por cobrar y pagar e inventario, entre otros).
La muestra a inspeccionar
En la muestra seleccionada aparecen 52 hoteles, moteles y similares; 16 otros tipos de centros de alojamiento temporal; 13 restaurantes, cafeterías y comedores; 12 ventas mayoristas de productos; 11 actividades de agencias de viajes, excursiones y guías y una decena de distintas prestaciones para el transporte regular de pasajeros por vía terrestre, entre otros.
En relación con los suministradores, se verificarán las actividades de 13 de elaboración de productos lácteos; 9 de producción de carnes y productos cárnicos y 8 de venta mayorista de productos agropecuarios.
De las 170 acciones de control previstas en el territorio nacional, 115 corresponden a entidades de las Organizaciones Superiores de Dirección Empresarial (OSDE) ,atendidas directamente por el Ministerio de Turismo (Mintur), y una de atención directa del organismo, correspondiendo a ellas 68,8 % del total de entidades seleccionadas.
GAESA
El informe no discrimina dentro del más de medio centenar de hoteles a revisar, cuántos pertenecen al Grupo de Turismo Gaviota, gestionado por GAESA, el Grupo de Administración Empresarial del aparato militar de la isla.
La cartera de este emporio posee una parte importante de los hoteles de 4 y 5 estrellas de Cuba, además de marinas y agencias de viajes, transportes y otros servicios hoteleros, entre otros activos.
En una entrevista en mayor pasado a la agencia española EFE, la ex contralora Gladys Bejerano dijo que el conglomerado empresarial GAESA no estaba bajo su supervisión.
Argumentó entonces que GAESA cuenta con “disciplina y organización superior” por sus décadas de experiencia empresarial y que la Contraloría concentra “fuerzas” donde hacen falta “avances”.
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Luego de realizada la compatibilización de las fuerzas calificadas en cada territorio y en todas las unidades organizativas del Sistema Nacional de Auditoría (SNA), se prevé la participación de aproximadamente 1 575 efectivos en la XVI Comprobación Nacional al Control Interno, precisó el informe de Granma.
Igualmente, en el ejercicio fiscalizador intervendrán poco más de 600 estudiantes universitarios, y se coordina la participación de expertos de la Oficina Nacional de Normalización, de los ministerios del Transporte y del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, así como del Banco Central de Cuba.
La contralora general de la República, Mirian Marbán González, afirmó que existe toda una metodología para la revisión de la actividad turística e hizo hincapié en disposiciones concretas para verificar el uso y control sobre el combustible.
De acuerdo con Granma, es una prioridad alentar la innovación, explotar las potencialidades y reservas que existen para promover el destino Cuba con sistemas de comunicación más robustos y generalizando buenas experiencias.
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Turismo bajo régimen de privilegio
El pasado año, Cuba invirtió en turismo 500 % más que en educación, salud y agricultura juntas.
Estadísticas oficiales convalidan que la hotelería, como sector inmobiliario, captura con creces las mayores partidas de la política inversionista, pero aún está lejos de resarcir los gastos a su nombre y de tirar del resto de la economía, tal como pretende el Gobierno.
En la recién finalizada Feria Internacional de Turismo (FITCuba-2024), el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez reiteró que “el turismo siempre nos lo hemos planteado como una industria que genera el desarrollo del resto de las industrias en el país, y de todo el sistema empresarial”, hizo notar Granma.
Hasta el presente, Cuba no ha igualado los niveles prepandémicos de visitantes internacionales, que en 2019 estuvieron en el entorno de los 4,5 millones.
Para este año, la meta es de 3,2 millones de turistas, pero hasta hoy los reportes de viajeros la colocan como altamente improbable de alcanzar, dada las sanciones estadounidenses, las propias deficiencias internas y la alta competitividad de destinos vecinos como República Dominicana, México y Florida.
