Los presidente Donald Trump y Volodímir Zelenski volvieron a cruzar reproches y declaraciones sobre el conflicto bélico en Ucrania, mientras Rusia se mantiene a la ofensiva y lanzó este jueves una ola de ataques contra Kiev.
Mientras el mandatario estadounidense airea públicamente que cuenta con la anuencia de Moscú para poner fin a la guerra, su homólogo europeo rechazó de plano cualquier plan que contemple ceder territorios ocupados por las fuerzas militares rusas, entre ellos la península de Crimea.
“Ucrania no cederá ni va a renunciar a su integridad territorial”, declaró el líder ucraniano, que recordó la condena oficial de Estado Unidos durante el primer mandato de Trump sobre la invasión rusa a Ucrania y la ocupación de Crimea, reporta la agencia EFE.
Zelenski hizo referencia a un documento firmado por el entonces Secretario de Estado, Mike Pompeo, en el que se afirmaba que “ningún país puede cambiar las fronteras de otro por la fuerza” y que Estados Unidos no reconocería las reclamaciones de soberanía del Kremlin sobre “territorios conquistados en violación del derecho internacional”.
Emotions have run high today. But it is good that 5 countries met to bring peace closer. Ukraine, the USA, the UK, France and Germany. The sides expressed their views and respectfully received each other’s positions. It’s important that each side was not just a participant but… pic.twitter.com/lDFV5WK8tw
— Volodymyr Zelenskyy / Володимир Зеленський (@ZelenskyyUa) April 23, 2025
Trump, por su parte, reprochó la postura del mandatario ucraniano y, desde su cuenta en la red Truth Social, calificó sus declaraciones como “muy perjudiciales”.
“Crimea se perdió hace años” bajo el mandato de Barack Obama, apuntó el republicano, para quien la soberanía de esa península “ni siquiera es un punto de discusión”.
“Si la quiere, ¿por qué no lucharon por ella hace once años cuando se entregó a Rusia sin un solo disparo?”, agregó en referencia al reclamo de Zelenski.
Posiciones encontradas
Trump prometió durante su campaña electoral terminar la guerra en Ucrania en “menos de 24 horas”, pero hasta el momento sus planes han quedado en el aire por las marcadas diferencias entre sus propuestas y las aspiraciones de Ucrania y sus aliados.
Las recientes declaraciones de Zelenski vieron la luz a tenor de las conversaciones que este miércoles sostendrían en Londres representantes de EE.UU, Europa y Ucrania, y que terminaron sin la presencia de los principales actores en la negociación.
La posibilidad de ceder parte de su territorio es vista como una línea roja para Kiev.
“No hay nada de qué hablar; es nuestra tierra, la tierra del pueblo ucraniano”, dijo al respecto el presidente ucraniano.
Zelenski ya había dicho esta semana que la Constitución de su país impide otorgar reconocimiento alguno a Moscú sobre Crimea y dio a entender, además, que la propuesta estadounidense servía para que Rusia continúe con la guerra y con sus ansias expansionistas.
Trump, por su parte, consideró “incendiarias” las palabras del líder de Kiev y aseveró que esa postura no haría más que prolongar la guerra
“¡No tiene nada de qué presumir! La situación de Ucrania es desesperada: puede lograr la paz o puede luchar durante otros tres años antes de perder todo el país”, afirmó, citado por EFE.
El presidente de Estados Unidos remarcó que un posible acuerdo entre Moscú y Kiev podría estar “muy cerca” y que su intención era ayudar a ambas partes a” salir de este completo y total desastre”.
“Estamos muy cerca de un acuerdo, y el hombre ‘sin cartas que jugar’ debería, finalmente, concluirlo”, dijo Trump en referencia a Zelenski.
El plan de Trump
Varios medios estadounidenses han adelantado el documento que Trump ha puesto sobre la mesa de negociaciones y al que el mandatario habría calificado como “propuesta final”, reseña el diario español El País.
Según estas fuentes, los planes de Estados Unidos para acabar con la guerra obligarían a Ucrania a dar por perdida la península de Crimea, ocupada por Rusia desde 2014, una anexión respaldada por un plebiscito en esa región que ni Kiev ni las potencias occidentales reconocen como válido.
El plan incluiría también la renuncia a otros territorios del este y el sur del país, sobre los que las fuerzas rusas han ido ganando control desde la invasión iniciada en 2022. Igualmente, Ucrania se abstendría a formar parte de la OTAN y aceptaría el control estadounidense de la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa, actualmente en manos rusas.
En ese caso, Washington prevé que sigan siendo consideradas como territorio ucraniano, aunque pasen a estar bajo su control y pueda suministrar electricidad tanto a Rusia como a Ucrania.
A cambio, Moscú detendría los combates en la línea del frente. Además, sus fuerzas militares abandonarían las zonas de la región de Járkov que en estos momentos controlan y permitirían la libre circulación a través del río Dniéper, principal arteria fluvial del país. La propuesta añade una compensación y ayuda para la reconstrucción, sin precisar los montos, según los reportes.
Las autoridades estadounidenses han advertido que si Rusia y Ucrania no llegan finalmente a un acuerdo, Washington abandonaría las negociaciones. Así lo adelantó días atrás el secretario de Estado Marco Rubio, y así lo dijo este miércoles el vicepresidente DJ Vance, para quien ha llegado el momento de que ambas partes la acepten o “Estados Unidos se retirará del proceso”.
EEUU advierte que abandonará el proceso de paz si no hay avances entre Ucrania y Rusia
Rusia vuelve a golpear
Con la propuesta de Estados Unidos en el aire, Rusia atacó este jueves la capital ucraniana y otros territorios del país con drones y misiles.
Los ataques causaron la muerte a nueve personas, y decenas de heridos, entre ellos varios niños, según diversas fuentes.
Zelenski, que se encontraba en Sudáfrica, canceló parte de su visita para regresar antes al país tras este hecho. Además, llamó a un cese “inmediato y sin condiciones” de los bombardeos rusos.
“Es extremadamente importante que todos alrededor del mundo vean y comprendan lo que realmente está sucediendo”, afirmó el mandatario, quien dijo que se pondría en contacto con sus socios internacionales con vistas a fortalecer sus defensas aéreas, refiere CNN.
Moscú, por su parte, negó haber atacado objetivos civiles y calificó las informaciones ucranianas y occidentales sobre los bombardeos como “propaganda”.
No obstante, sí reconoció haber llevado adelante un “ataque masivo” en Ucrania con armas de largo alcance y alta precisión, el cual —dijo— iba dirigido contra instalaciones militares.
Los ataques no solo impactaron en la capital, sino también en otras zonas del país como Dnipro, Járkov, Poltava, Jmelnitski y Sumy, de acuerdo con reportes de prensa.
A la par, las tropas rusas siguen avanzando en varios sectores del frente y pretenden consolidar sus posiciones en los territorios ocupados, que representan casi el 20 % de toda Ucrania. Ello, según analistas, añade aún más presión al gobierno de Zelenski y dificulta sus argumentos de cara a una posible negociación.