La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, advirtió que la opción de derribar cazas y drones rusos que violen el espacio aéreo de los países miembros de la OTAN “está sobre la mesa”.
En una entrevista con la cadena CNN, Von der Leyen señaló que Europa debe defender cada centímetro de su territorio y que la invasión aérea no puede quedar impune.
“Mi opinión personal es que tenemos que defender nuestro territorio y eso significa que, si hay violaciones del espacio aéreo, la opción de derribar un caza debe estar disponible, siempre siguiendo los protocolos y las alertas correspondientes”, declaró la funcionaria.
A su vez, subrayó que Rusia está sometiendo a Europa a una “guerra híbrida” y enfatizó que la Unión Europea (UE) mantendrá su apoyo a Ucrania, tanto en el plano económico como en el militar.
El mensaje de Von der Leyen refleja la creciente preocupación en Bruselas sobre la seguridad de los países miembros de la OTAN, que han visto aumentar las incursiones aéreas y ciberataques atribuidos a Moscú.
En este contexto, la Comisión Europea reafirmó su compromiso de fortalecer las capacidades defensivas de Ucrania para que pueda seguir haciendo frente a las fuerzas rusas.
Polonia y la OTAN derriban drones rusos sobre territorio polaco en una “violación sin precedentes”
La respuesta de Moscú y las acusaciones de Lavrov
En contraste, el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, aprovechó la reunión del G20 en Nueva York para responsabilizar a Occidente por el estallido y la prolongación del conflicto en Ucrania.
Según Lavrov, la crisis fue provocada por el “Occidente colectivo”, que con la OTAN y la UE, a través de Ucrania, han declarado una guerra abierta contra Rusia, indicó un despacho del portal Russia Today (RT).
El canciller ruso acusó a las potencias occidentales de participar directamente en el conflicto y advirtió que las sanciones unilaterales impuestas a Rusia no solo son injustas, sino que también representan una amenaza para la economía mundial.
Lavrov describió estas medidas como manifestaciones de ambiciones neocoloniales que socavan la estabilidad global y violan los principios de la Carta de las Naciones Unidas.
Incidentes de drones en Dinamarca y nuevas medidas en Europa
En paralelo, Dinamarca enfrenta una ola de incidentes relacionados con drones no identificados que han sobrevolado varias infraestructuras críticas, incluyendo aeropuertos civiles y bases militares.
Durante esta semana, aparatos desconocidos fueron detectados en las localidades de Aalborg, Esbjerg, Sonderborg, y en la base aérea de Skrydstrup, lo que provocó cancelaciones y retrasos en vuelos.
El Ministerio danés de Defensa calificó estas incursiones como “sistemáticas” y atribuyó las mismas a un “actor profesional”, aunque por ahora no se ha confirmado quien estaría detrás de estas operaciones.
Mark Rutte, secretario general de la OTAN, afirmó que la alianza militar toma “muy en serio” estos ataques y está intensificando medidas para proteger las infraestructuras críticas en la región.
Por su parte, el jefe de los servicios de inteligencia daneses señaló que el riesgo de sabotaje ruso en el país es “alto”, mientras que Moscú negó toda implicación y calificó los incidentes como una “provocación orquestada”.
Simultáneamente, Rumanía anunció una simplificación en el protocolo para responder a intrusiones aéreas.
A partir de ahora cualquier oficial responsable de la vigilancia del espacio aéreo podrá autorizar el derribo de aeronaves militares que invadan el territorio rumano, siempre que se ignoren todas las advertencias y la aeronave no abandone el espacio aéreo.
La medida se produce tras un reciente episodio en el que cazas rumanos respondieron a la presencia de drones rusos, un claro reflejo de la tensión en la frontera oriental de la OTAN.
Estos episodios, junto con incursiones similares en Polonia, Noruega y Estonia, evidencian un aumento en la frecuencia y gravedad de estos retos a la soberanía europea, y muestran un escenario de escalada militar y psicológica en la región.