Para los agricultores estadounidenses de visita ahora en La Habana, el intercambio bilateral debería estar por encima de las tensiones políticas y obstáculos.
“Independientemente de la Administración o los cambios políticos, todos tenemos que comer”, dijo a Prensa Latina P. J. Haynie durante la Conferencia Agrícola Cuba-Estados Unidos que tiene lugar en la capital cubana.
Haynie y sus colegas no solo apuestan por el comercio. “Queremos asegurarnos de consumir productos de la mejor calidad posible”, agregó el agricultor, director de Haynie Family Foods —firma líder en maíz, soja, arroz y trigo—, y promotor de intercambios de técnicas sostenibles con productores cubanos para aumentar rendimientos y asegurar arroz de alta calidad en la isla.
Andrés Schade, directivo de la delegación, precisó que el viaje fortalece esa alianza, permitiendo a investigadores analizar prácticas cubanas y optimizar variedades locales para mayor eficiencia.
Por su lado, Paul Johnson, presidente de la Coalición Agrícola bilateral, destacó la diversificación comercial y memorandos entre universidades y entidades productivas, a pesar de restricciones por la inclusión de Cuba en la lista estadounidense de patrocinadores del terrorismo.
Se trata del acuerdo trilateral de 2024, firmado entre el Centro Agrícola de la Universidad Estatal de Luisiana, el Departamento de Agricultura de EE.UU. y el Ministerio cubano de la Agricultura, según PL.
De trabas y perspectivas
En la Conferencia anterior, celebrada en mayo de 2024, la vicedirectora del departamento de Estados Unidos en el Ministerio cubano de Exteriores, Johana Tablada, recordó que el ámbito alimentario dispone de la “única ventana significativa” ante las sanciones de Washington, pero recalcó que solo es para importar productos a Cuba y no para que la isla venda a EE.UU.
“Hoy sabemos que las regulaciones, las leyes y las decisiones del Gobierno de EE.UU. no parecen ir en la dirección de flexibilizar la relación con Cuba o permitir las relaciones comerciales. Sabemos incluso que para el sector no estatal (cubano) se habló mucho de cambios, pero no los ha habido. Ojalá”, afirmó entonces la funcionaria en declaraciones a EFE.
Mientras, el abogado, empresario y excongresista demócrata Joe García, quien para entonces hacía asesorías sobre temas comerciales, señaló también a la agencia española que La Habana debía aún, entre otros asuntos, favorecer la inversión extranjera en el sector privado y garantizar jurídicamente estas inversiones, además de permitir la expansión de las licencias y el uso de la propiedad agraria para el comercio.
Los números
Las exportaciones de productos agrícolas y alimentarios de Estados Unidos a Cuba registraron en julio de 2025 un aumento del 34,6 % respecto al mismo mes del año anterior, alcanzando los 42,3 millones de dólares, según cifras oficiales. El dato supone un incremento frente a los 31,4 millones reportados en julio de 2024 y los 32,3 millones de 2023, refirió Cubatrade.
Exportaciones agrícolas y alimentarias de EEUU a Cuba crecen un 34 % en julio de 2025
Entre enero y julio de este año, las exportaciones acumuladas sumaron 285,7 millones de dólares, un 18 % más que en el mismo periodo de 2024, cuando se situaron en 242 millones.
El listado de productos incluye alimentos básicos como huevos (500 827 dólares), trigo (1,7 millones) y maíz (11 951 dólares), además de otros como cacahuetes, aceite de soya y diversos insumos industriales.
En septiembre de este año, en un paso que indica la dualidad de la política comercial hacia Cuba, el presidente Donald Trump anunció la prórroga por un año, hasta el 14 de septiembre de 2026, de las licencias que autorizan exportaciones desde Estados Unidos a la isla.