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Antes del primer acorde de Silvio Rodríguez en el Movistar Arena de Buenos Aires, antes de que Martí llegara en su voz, antes de que propusiera fundar un partido de sueños y vistiera la noche con su épica de trovador incansable, una mujer subió al escenario con una guitarra.
Paula Ferré, la misma del Canto de Todos de Vicente Feliú, la fundadora de MUJERTROVA, la que impulsa desde Argentina la integración entre artistas de varias partes del mundo, no fue solo “el preámbulo” de la promesa de un concierto para agradecer la vida, para sostener la esperanza. Su voz, calidez y lírica cubrieron al público de buena vibra, la primera sustancia que se necesita para ser feliz.

“Antes del concierto, pensaba que un lugar tan amplio y con tantas personas me provocaría vértigo. Sin embargo, gracias al recibimiento del público, me sentí muy cómoda. Pude habitar el escenario con soltura y alegría.
”Fue emocionante entrar, y que unas casi 4 mil personas me recibieran con tanto cariño. En la segunda canción ya el público había aumentado considerablemente, y para la quinta, había casi 10 mil.
”Cantar ante tanta gente implica una gran responsabilidad. No era la primera vez, recuerdo haber estado con Vicente Feliú, León Gieco y otros cantores, en el 80 aniversario del natalicio del Che en Rosario, frente a unas 50 mil personas.
”Pero esta vez fue especial. Se trataba de un concierto en un lugar cerrado, con más intimidad. Me encantó el público, todo el tiempo consciente de mi presencia, con la disposición de escuchar y apoyar mi actuación, a pesar de que era bastante más temprano de la hora pactada para el comienzo de Silvio.
”Disfruté compartir con toda esa gente hermosa, muchas vinculadas a organizaciones sociales, otras que me conocen por mi militancia cultural; a todas nos unía el amor por la música de Silvio, un verdadero maestro.
”En 2019, me envió una invitación para formar parte de la Gira por los Barrios que él realizaba en Cuba. Estaba previsto que sucediera en junio de 2020, pero la pandemia lo impidió. Sin embargo, fiel a su estilo y a su palabra, él no se olvidó de esa propuesta.
”Por eso, me honró profundamente con este regalo. Fui su primera telonera en los conciertos que realizó en Buenos Aires. Ese gesto tiene un valor enorme, no solo por la oportunidad artística, sino porque provino directamente de él: un hombre de palabra y de una sensibilidad inmensa.

”Llegué a sus canciones cuando tenía trece años, en aquellos fogones de la playa mientras descubríamos la pasión por la guitarra. En 1984, cuando vino a la Argentina, fue decisivo para mí. Pude conocer su obra con más profundidad y comprender la magnitud de su poesía.
”Lo conocí personalmente mucho después, en 1997, en la casa de Vicente Feliú. Me habían invitado a un almuerzo y no sabía que Silvio estaría. Cuando lo vi llegar, me emocioné tanto que empecé a llorar.
”Él se acercó, preguntó por qué lloraba. Le respondí que había conocido Cuba a través de sus canciones y que me emocionaba muchísimo verlo en persona. Entonces dijo entre risas que era una trovadora lacrimosa y que, si hubiera sabido que alguien podía conocer los paisajes del país a través de sus canciones, habría escrito mucho más sobre cada rincón.
”Aquella tarde pasamos más de tres horas escuchando sus historias, incluso sobre la guerra de Angola. Compartimos canciones con Vicente y otros invitados. Fue un encuentro tremendamente humano y luminoso, de esos que se graban para siempre.
”En 2019, nos reencontramos en Ojalá, y allí se comprometió a grabar juntos una de mis canciones. Después, el material fue utilizado para acompañar la lucha por la liberación de Milagro Sala, una mujer indígena, presa injustamente por el gobierno de Macri, que aún continúa detenida. La grabamos a la distancia en medio de la pandemia. Se llama Mujer originaria, se encuentra en todas las plataformas, y sirve también como homenaje a los pueblos originarios que sufren tanto y resisten en nuestros países del sur.
”Yo soy una ferviente militante de la canción colectiva. Creo que la música es mucho más valiosa cuando representa a un grupo de artistas, una visión compartida del mundo, intereses comunes, dolores similares y aciertos que celebramos juntos y juntas.
”MUJERTROVA surge en 2013 con la necesidad de visibilizar el trabajo de las mujeres trovadoras de mi país. Con el tiempo, el proyecto comenzó a incluir invitadas internacionales, convirtiéndose en un encuentro que, aunque se realiza en Argentina, abarca a más de 70 compositoras latinoamericanas.
”Todas ellas defienden su obra con algún instrumento y están comprometidas con su entorno, llevando su música y mensaje a la sociedad de manera activa y consciente.
”Si bien yo soy la fundadora, MUJERTROVA es un movimiento que se construyó entre todas. Nuestra madrina es Teresa Parodi y nuestro padrino, Vicente Feliú. Ellos nos acompañan e inspiran en este camino.

”También formo parte del Canto de Todos. Estos colectivos se crean para armar cofradía, construir identidad, para resistir y proyectarse dentro de una sociedad, a veces, bastante hostil, tanto para las mujeres como para los artistas en general, cantautores y cantautoras. A mí me gusta estar ahí, en la manada.
”En 2016 fundé La Casa Museo de la Trova Argentina, un poco inspirada también por Vicente. Él convivía con mi familia todos los años, en mi propia casa. Tuve el placer de gestionarle 17 giras por el país.
”En mi sala, entre más de 50 músicos, festejamos el último cumpleaños de Humberto del Monte Mar, y ese día de marzo de 2016 fundamos oficialmente la Casa.
”Desde entonces, mi propio hogar se ha convertido en un espacio vivo de la cultura latinoamericana. Recibimos cantoras y cantores de muchas partes del mundo, cuentacuentos, poetas; proyectamos largometrajes, hacemos ferias, festivales; tenemos una exposición con libros, discos, carteles. Hemos organizado más de 60 conciertos, entre ellos, por supuesto, algunos de Vicente, Teresa Parodi, Cecilia Todd y toda MUJERTROVA.
”La Casa Museo, en definitiva, es mi propia casa. Entonces las personas no solamente llegan a escuchar un concierto o a ver objetos, sino que viven una experiencia completa: les abro mi intimidad, mi familia, los recibo con amor y dedicación.
”Ahora, a punto de cumplir 10 años, vamos a lanzar el proyecto de la Casa Museo de la Trova Virtual. A través de videos, mostraremos objetos del lugar, anécdotas, para que cualquier persona, desde cualquier parte del mundo, pueda conocerla y vivir, aunque sea a la distancia, la experiencia de este espacio tan particular.
”Mi estudio de grabación, es otro proyecto que llevo adelante junto a Adrian Ocdriozola, mi compañero de vida. Actualmente, se utiliza para nuestras producciones y para la grabación de los alumnos del Taller Canto Sincero, que dicto desde hace varios años y que en mayo de este 2025 pude brindar en Islas Canarias en formato de master class.
”En este taller de interpretación, promuevo que vivan la canción como una ofrenda y como una forma de ver el mundo, más que como un simple espectáculo.
”Ahora mismo estoy trabajando en mi próxima producción discográfica, Palomas del bien, Paula Ferré canta a Humberto del Monte Mar, que espero editar para 2026.

”Seguiré adelante, confiando en mi camino. Capitalizando esta experiencia con Silvio, fomentando nuevos espacios y oportunidades más certeras para mí y para mis compañeras y compañeros. Seguiré abriendo pasajes de la canción en el mundo, mediante iniciativas que promuevan conciencia, reflexión, compromiso social y militancia a través del arte.
”Ojalá que toda esta repercusión en la prensa por estos días, se traduzca en nuevas oportunidades, porque soy una trabajadora de la cultura. Que se abran puertas a festivales nacionales, hoy monopolizados por los hombres, y a encuentros internacionales que permitan seguir sembrando vínculos y redes con otros y otras colegas.
”Estoy feliz y agradecida de la invitación de Silvio; es un privilegio formar parte de esta historia. Fue una experiencia profundamente hermosa y reconfortante.
”La canción de Silvio Rodríguez es muy amada en mi país. Pero, en este momento de tanta crueldad, desigualdad e injusticia, su música se convierte en un gesto de rebeldía y resistencia que la gente necesita más que nunca.
”Por eso sus canciones siguen vigentes, tan dolorosamente actuales, para nosotros y para toda Latinoamérica. En el contexto político de Argentina, son una bocanada de aire fresco para una parte de la sociedad que busca cambiar esta realidad y necesita construir un país más justo.”












