Después de varios meses de progreso constante, el número de nuevos casos de la COVID-19 se acercó aniveles sin precedentes en Estados Unidos esta semana. Los expertos atribuyen ese incremento a un país que se ha vuelto complaciente. Nuevas encuestan han arrojado que el apoyo a las medidas para contener la propagación del coronavirus ha ido en declive comparado con los primeros días de la pandemia.
Una encuesta realizada en junio por The Associated Press y el Centro NORC para la Investigación de Asuntos Públicos revela que muchos estadounidenses nunca aprobaron la reapertura que se realiza en muchos estados: a la mayoría le preocupa contagiarse con la COVID-19. Una porción importante aún está a favor de las restricciones en materia de salud pública que muchos estados han decidido levantar.
“Creo que se está levantando todo demasiado pronto”, dijo Tamela Andrews, de 51 años, quien recientemente se mudó a New Orleans. “Hay algunas personas que están siguiendo las reglas, intentando contener el virus, pero hay muchas que no”.
La encuesta revela que lo que alguna vez fue una opinión unánime sobre la pandemia se ha disipado durante en los últimos dos meses. Actualmente, la mitad de los estadounidenses están a favor de las órdenes de confinamiento, comparada con casi el 60% hace un mes y con el 80% en abril. Y alrededor de 6 de cada 10 están a favor de los límites a la manera en que las personas pueden reunirse, una reducción respecto al 70% de hace un mes y al 80% de abril.
Crece la inquietud por rebrotes de coronavirus y el fuerte impacto en América
En abril, el 78% de los estadounidenses dijo que le preocupaba, al menos de manera moderada, que ellos o algún familiar pudiera contraer el virus, pero la cifra se redujo al 68% a principios de junio. El número de los que están sumamente preocupados también se redujo de 43% en abril a 32% este mes.
El miércoles, Estados Unidos reportó 34.000 nuevos casos de la COVID-19, cerca del récord de 36.400 reportados en un solo día en abril, de acuerdo con el conteo de la Universidad Johns Hopkins. El país ha sufrido más 120.000 fallecimientos a causa de la enfermedad, la mayor cantidad a nivel mundial, la mayoría de ellos ancianos.
El preocupante incremento en el número de casos confirmados ha empeorado esta semana en varios estados que alcanzaron una cifra récord de infecciones diarias: Arizona, California, Mississippi, Nevada, Texas y Oklahoma. Algunas de estas entidades también rompieron su marca previa de hospitalizaciones, al igual que Carolina del Norte y Carolina del Sur.
Caitlin Oppenheimer, quien encabeza el departamento de investigación de salud pública en NORC en la Universidad de Chicago, señaló que los resultados de la encuesta muestran que el país claramente experimenta una “”atiga de cuarentena”.
“Ya nadie quiere estar encerrado”, dijo. “Considerando que la enfermedad persiste, al igual que los contagios, no es sorpresa que estemos viendo cómo los números en algunas comunidades llegan a sus puntos más altos”.
Associated Press/OnCuba.