Ninguna de las vacunas contra la COVID-19 pueden causar o estar relacionadas con problemas de fertilidad o impotencia, recalcó este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS), que también dio el visto bueno al fármaco indio Covaxin.
“No hay posibilidad biológica de que las vacunas estén relacionadas con problemas de impotencia o fertilidad”, precisó el experto de la OMS Joachim Hombach en respuesta a uno de los bulos más extendido y que difundido por sectores antivacunas.
“Pienso que son rumores totalmente desprovistos de fundamentos y que no responden a la lógica de los mecanismos biológicos”, comentó el especialista.
En la misma interacción virtual con el público, la directora adjunta de la OMS para el acceso a los medicamentos, Mariangela Simao, recalcó la importancia de informarse a través de fuentes confiables. Entre estas mencionó la propia página web de la organización, así como por sus cuentas oficiales en redes sociales, en las que se informa extensamente de los mecanismos rigurosos que se aplican para la aprobación de las vacunas y sus garantías de seguridad y eficacia.
Esta aclaración se produjo poco después de que la OMS anunciara la aprobación del uso de emergencia de la vacuna anticovid Covaxin, producida por los laboratorios indios Bharat Biotech.
Se trata del séptimo inmunógeno que es evaluado y aprobado por el organismo con el fin de frenar la pandemia, que ha causado ya más de cinco millones de muertes en el mundo. Las vacunas anteriormente respaldadas por la OMS son las de Pfizer-BioNTech, Moderna, Johnson & Johnson, AstraZeneca, Sinovac y Sinopharm.
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La aprobación de uso de emergencia da a estas vacunas la posibilidad de entrar en el programa COVAX, creado por la OMS en cooperación con otras agencias para distribuir a bajo precio y de forma equitativa dosis de vacunas anticovid en todo el mundo.
Como en los casos anteriores, un grupo de asesores técnicos de la OMS examinó los estándares de calidad, eficacia y seguridad de la vacuna, desarrollada a base de versiones inactivadas del coronavirus SARS-CoV-2, causante de la COVID-19.
El fármaco indio tiene una eficacia del 78 %, y la OMS recomienda administrarla en dos dosis, con al menos dos semanas de diferencia entre la primera y la segunda. Según la organización es “extremadamente apropiada para países de ingresos bajos y medios, por su facilidad de almacenamiento”.