En treinta segundos un anuncio de televisión le recuerda a los espectadores de FOX News, MSNBC y CNBC que son libres de hacer turismo en un país cuyo liderazgo amenaza a Estados Unidos con un ataque nuclear, mientras una ley federal les prohíbe pasar sus vacaciones en una isla cuyo gobierno apuesta por una coexistencia respetuosa con Washington.
Titulado Adivina Qué, el corto audiovisual pregunta por qué a los americanos se le permite viajar a Corea del Norte, pero no a Cuba, subrayando que las empresas de EE.UU. pierden posibles exportaciones valoradas en 5,9 mil millones de dólares debido al embargo. Así lo condensaron sus autores intelectuales al compartirlo en su página en Facebook.
No escatimaron en talento: contrataron a la firma de consultoría Shorr Johnson Magnus, que trabajó en la primera campaña presidencial de Barack Obama.
El TV Ad es la tarjeta de presentación de Engage Cuba, un grupo bipartidista de acción política que espera derribar el bloqueo desde dentro, en el mismo Capitolio donde congresistas y senadores podrían decidir con sus votos si cierran finalmente uno de los últimos capítulos de la Guerra Fría.
Integrada por asesores demócratas y republicanos, la organización busca respaldo para varios proyectos, como la Ley de Libertad para Viajar a Cuba, que ya tiene 40 copatrocinadores en el Senado, dos quinta partes de la cámara alta del legislativo estadounidense.
La comparación entre Cuba y Corea del Norte no resulta tan novedosa como el sitio escogido para transmitirlo. Sus promotores compraron espacios en los segmentos publicitarios de Fox News, una cadena vista por una audiencia integrada en un 60{bb302c39ef77509544c7d3ea992cb94710211e0fa5985a4a3940706d9b0380de} por un público que se describe como conservador, la facción que concentra a las bases del partido con mayoría en ambas cámaras del Congreso.
“Los republicanos creen en el poder del libre mercado y en apoyar verbalmente los valores estadounidenses en todas partes”, explicó en exclusiva para Oncuba el presidente de Engage Cuba, James Williams.
Esa pieza de propaganda política es una de las primeras iniciativas en una campaña para mover a la opinión pública y la clase política norteamericano contra el conglomerado de sanciones heredadas de los tiempos de Dwight Eisenhower y John F. Kennedy. Su puesta al aire coincidió con el lanzamiento oficial de la organización, aunque las actividades de sus miembros comenzaron mucho antes.
Previo a sus inversiones en telepolítica, el grupo creó su propio comité de acción política, New Cuba PAC, para recaudar dinero en favor de potenciales candidatos o políticos en ejercicio que respalden la normalización desde sus cargos.
Engage Cuba ayudó a la Sección Intereses de Cuba en Estados Unidos a encontrar un banco que operara sus cuentas, pocos días antes de que el nombre de la nación caribeña fuese excluido fuera de la lista de países patrocinadores del terrorismo. El grupo lo asumió como un logro propio, en beneficio de todos aquellos que “quieran tomar parte de la evolución de Cuba”.
“Hay un amplio consenso emergiendo de empresas, la agricultura, expertos políticos y la sociedad civil en general de que el Congreso debe terminar las antiguas restricciones al comercio y los viajes a los estadounidense, algo que se interpone en el camino de un compromiso más significativo con el pueblo cubano” indicó Williams en la entrevista concedida a OnCuba.
Pero también han tomado nota de las recientes maniobras en la Cámara de Representantes, donde se aprobaron leyes de financiamientos con secciones que restringen la reciente apertura hacia Cuba promovida por la administración del presidente Barack Obama.
Los integrantes de Engage Cuba vaticinan que esos proyectos tienen escasas oportunidades de ser aprobadas por el Senado y representan un intento retroceder hacia una postura propia de la Guerra Fría, expresaron en un artículo publicado en The Hill, el diario del Congreso de EE.UU.
Es probable que muchos legisladores republicanos vean Adivina Qué y escuchen el resumen condensado en treinta segundos sobre los absurdos que todavía median en la relación turístico-económica entre su país y la nación insular ubicada a noventa millas al sur de sus costas.
Por eso el anuncio termina recordando que han pasado cincuenta años…y la voz en off pregunta si no viene siendo hora para un cambio.
*Las imágenes utilizadas en este reporte son capturas del TV Ad
Lean con calma quienes tengan duda de lo que es la libertad de opinion y de expresion.
y viceversa…
YES, THERE IS TIME FOR A CHANGE !!!!!!!!!
Creo que es alguo que tenia que pasar desde hace mucho tiempo, los cubanos nunca le hemos hecho daño al pueblo norte americano al contrario somos dos vecinos cercanos que lo unico que nos ha alejado es la politica ,todo por cuba vamos adelanteeeeeeeeeeeee viva la mistad la paz y los buenos negocios
que novedad!!