La embajada de Cuba en Washington mantendrá “todos los servicios consulares” pese a la reducción de su personal provocada por la decisión de Estados Unidos de expulsar a 15 diplomáticos cubanos a causa de los supuestos “ataques acústicos” sufridos por funcionarios de ese país en La Habana.
“El Consulado ofrece disculpas de antemano a todos los usuarios por los retrasos que pueda ocasionar en la tramitación de los distintos trámites consulares, esta infundada e inaceptable decisión del Gobierno estadounidense”, señala una nota publicada hoy en el sitio digital del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba.
En el comunicado se indica que “a pesar de la arbitraria e injustificada decisión” de EE.UU., “la Sección Consular de la Embajada continuará brindando todos los servicios, sin interrupción”.
Lo hará, explica, “tanto a través de las agencias autorizadas, como directamente en la taquilla, en el caso de los trámites que deben ser presenciales, como poderes y autorizaciones de menores”.
El Consulado cubano en Washington atendía las solicitudes de viaje de la nutrida comunidad cubanoamericana en ese país.
Expulsión de 15 funcionarios cubanos
EE.UU. pidió a Cuba el martes la salida inmediata de 15 de sus 23 funcionarios con estatus diplomático en Washington, lo que deja un solo oficial consular cubano en ese país, según fuentes de la Cancillería cubana.
La decisión estadounidense busca “nivelar” el tamaño y servicios que brindan las mutuas embajadas, porque la misión de EE.UU. en Washington ha quedado reducida al mínimo y solo brinda servicios consulares de emergencia tras la evacuación, ordenada por Washington, de dos tercios de su personal.
El Departamento de Estado de EE.UU. justificó esa medida en la necesidad de proteger a su personal tras los “ataques acústicos” sufridos por más de una veintena de sus diplomáticos en Cuba entre 2016 y agosto de este año, unos incidentes que aún se encuentran bajo investigación y sobre los que el Gobierno cubano niega tajantemente cualquier responsabilidad o conocimiento.
Debido a la reducción de personal, la embajada de EE.UU. en La Habana ha suspendido indefinidamente la tramitación de visados para cubanos, que por ahora deberán viajar a otros países para obtener un permiso de entrada a Estados Unidos.
La medida ha afectado a numerosos cubanos que ya tenían cita para entrevistas de solicitud de visado y otros trámites por los que además, en muchos casos, ya habían pagado las tasas establecidas por la administración estadounidense, un dinero que ahora no saben si recuperarán ni cuándo.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, condenó esta semana la decisión de EE.UU. y cuestionó cómo es posible evaluar a posteriori “el impacto en los temas de reunificación familiar y otorgamiento de visas, de cortar bruscamente y de manera casi total los servicios consulares en La Habana y Washington”.
Los dos países restablecieron oficialmente sus lazos diplomáticos en julio del 2015 con la mutua reapertura de embajadas, pero el proceso de deshielo se frenó abruptamente con la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, que dio paso a tensiones bilaterales agudizadas en los últimos meses por la misteriosa trama de los “ataques acústicos”.
EFE / OnCuba