Cubanos exigen respuesta a congresista Díaz-Balart sobre reunificación familiar

Desde 2017 todos los casos de Parole quedaron detenidos debido a la cancelación de los servicios consulares en La Habana. Desde entonces, muchos cubanos reclaman su activación para poder encontrarse finalmente con sus seres queridos.

Cubanos frente a la oficina de Mario Díaz-Balart en reclamo a la reactivación del programa cubano de Parole. Foto: Marita Pérez Díaz.

Una treintena de personas realizaron una protesta pacífica en Miami frente a la oficina del congresista republicano Mario Díaz-Balart, para reclamar la reactivación del programa cubano de reunificación familiar.

Desde lugares tan lejanos como Key West o más al norte, en el condado Broward, llegaron cubanos de todas partes de la Florida para exigir una respuesta ante la detención del programa de Parole.

Para muchos de ellos, sus familiares en Cuba son ahora números y letras: “Yo tengo un F2A”, “Lo mío es un FP”, “Yo renuncio al parole y me voy por la vía de los seis pasos”, se oye decir en el pequeño grupo que se reunió desde las 9:00 am en el Doral.

Esta es una jerga en la que sólo podrían comunicarse entre sí o con sus abogados, y que han aprendido a lo largo de años de espera y trámites costosos –uno de ellos asegura haber invertido 12 mil dólares en el proceso– para reunirse con hijos, padres, hermanos.

Cubanos frente a la oficina de Mario Díaz-Balart en reclamo a la reactivación del programa cubano de Parole. Foto: Marita Pérez Díaz.

Desde 2017 todos los casos de Parole quedaron detenidos debido a la cancelación de los servicios consulares en la capital cubana, hecho atribuido a los padecimientos de salud reportados por diplomáticos estadounidenses, en un principio llamados “ataques acústicos” y actualmente conocidos como el “síndrome de La Habana”.

Susana Yánez tiene a su hermana en un limbo migratorio desde 2014, pues justo cuando le tocaba su turno en la embajada estadounidense en La Habana se detuvieron los procesos.

“Necesitamos que nos ayuden, que nos den respuesta, queremos reunirnos con nuestros familiares”, dijo Yánez.

“Si hay que viajar a Guyana o a otro país no importa, pero reabran el programa”, añadió.

A mediados de 2019, el Servicio de Inmigración y Ciudadanía de Estados Unidos (USCIS) canceló otros programas similares para ciudadanos filipinos y haitianos, mientras comunicó que mantendría el cubano “bajo revisión”.

El programa, llamado CFRP, fue creado en el 2007 para acelerar la reunificación de las familias, las cuales podrían vivir y trabajar en Estados Unidos “bajo palabra”, mientras esperaban sus documentos como residentes legales.

Regla María Ramírez viajó desde el norte de la Florida para apoyar a otros que están en su misma situación.

“Yo tengo a mi hijo mayor de edad en Cuba, con su esposa y dos hijos, reclamados desde 2015, y nadie da una respuesta, nada”, dijo Ramírez, quien aseguró estar en “una incertidumbre”.

“No importa que sea ciudadana estadounidense, solo encuentro silencio total, pero alguien tiene que dar la cara”, explicó.

Consulta Legal: ¿Qué puede pasar con el Programa Cubano de reunificación familiar?

La oficina de Díaz-Balart emitió un comunicado de prensa en el que explica que el congresista, de origen cubano-americano, “está trabajando para encontrar una solución viable y real a la suspensión prolongada del CFRP”.

Luego de la reunión de este jueves entre los manifestantes y Díaz-Balart, representante del distrito 25 de Miami-Dade, no quedó claro cuál sería esa solución concreta.

OnCuba intentó conseguir declaraciones directas sobre esta nueva propuesta y el tiempo que demoraría en aplicarse, pero no recibió respuesta hasta el momento de la publicación de este artículo.

Un esfuerzo demócrata en octubre de 2019 para aprobar un proyecto de ley que solucione el problema no ha surtido efecto, en un año electoral donde las acciones políticas de ambos partidos toman especial relevancia.

Las congresistas demócratas Debbie Mucarsel-Powell y Donna Shalala del sur de la Florida lideraron el proyecto legislativo para reactivar el programa, e hicieron un llamado a sus colegas de ambos partidos para solucionar el tema.

Idania Chapotín tiene a su única hija en Cuba, mayor de edad, y lleva cinco años separada de ella. La vida de su hija, por otra parte, está en una especie de stand-by, pues no debería casarse ni tener hijos para no complicar aún más el proceso.

“Pero ya casi tiene 30 años, imagina, tenemos la vida parada. Yo solo quisiera que se reunieran y buscaran una solución, para agilizar esos procesos”, contó Chapotín, cuya vestimenta de este jueves fue de por sí una declaración. La mujer vistió un pulover con la imagen de la bandera cubana y un letrero que no deja dudas sobre el objetivo que los une: ”Cubanos Unidos por la Reunificación Familiar”.

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