Este sábado 9 de marzo terminó con mucha oscuridad en Cuba, donde los apagones han sido la tónica en las últimas semanas por el creciente déficit de capacidad de generación.
La “indisponibilidad” de combustible, las averías y y los mantenimientos en las centrales termoeléctricas han provocado que en algunas localidades se haya afectado el servicio eléctrico hasta más de 18 horas al día.
El panorama electroenergético se agravó más en la semana que concluye, solo unos días después de que saliera del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) la central matancera Antonio Guiteras, que habitualmente aporta más de 200 MW.
El principal bloque generador del país quedó fuera de circulación en la última madrugada de febrero para un “mantenimiento impostergable” que debe durar, al menos, hasta el 18 de marzo, según anunció la Unión Eléctrica (UNE) a finales de febrero.
Esta situación, unida a las roturas y trabajos de optimización en otras plantas y un déficit de más de 800 MW en unidades de generación distribuida por falta de combustible, ha sido el detonante para llegar a cifras récord de afectaciones.
El viernes 8 de marzo, por ejemplo, hubo un déficit de capacidad de generación de 1566 MW, el más alto de 2024, superando los 1378 MW del pasado 13 de febrero.
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La condición no mejoró demasiado este sábado, jornada en la que se reportaron prolongados apagones en todas las provincias. Inicialmente, la UNE había estimado una afectación de 1258 MW para el horario de máxima demanda, pero al final el déficit se elevó hasta los 1483 MW, el segundo registro más alto del año.
Solo al final de la noche, con la entrada en funcionamiento de la unidad 4 de la central Carlos Manuel de Céspedes (115 MW), en Cienfuegos, y la puesta en marcha del emplazamiento diésel de Moa (150 MW), en Holguín, disminuyeron discretamente los niveles de afectación, aunque no se logró cubrir la demanda en ningún momento del día, ni siquiera en la última madrugada.
Reportes críticos en todo el país
Desde la mañana de este sábado, la Empresa Eléctrica de Sancti Spíritus, en el centro del país, anunció que se tendría que adelantar la afectación de algunos circuitos, mientras el restablecimiento de otros bloques podría demorar un tiempo superior a lo planificado.
Esa fue la tónica en múltiples territorios como Santiago de Cuba, Las Tunas, Villa Clara, Holguín, Matanzas, Mayabeque o Pinar del Río, los cuales reportaron a través de sus oficinas provinciales que en determinados horarios tendrían que afectar circuitos fuera de su programación por bloques, lo que se tradujo en más tiempo de apagón.
La Empresa Eléctrica de Matanzas informó que “se brindará servicio eléctrico aproximadamente dos horas, dependiendo del comportamiento de la demanda, y se apagarán seis horas”.
Esto, en la práctica, sufre alteraciones. De hecho, diversos usuarios consultados por OnCuba en la urbe yumurina aseguraron que estuvieron sin corriente por más de 12 horas desde las 2:00 de la madrugada de este sábado 9 de marzo. Otros clientes del propio territorio precisaron que solo tuvieron servicio eléctrico en tres momentos del día que no duraron más de dos horas cada uno.
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Por su parte, la Empresa Eléctrica de Mayabeque explicó en sus redes sociales que este viernes tuvieron una afectación promedio de 17 horas y 28 minutos, mientras que el tiempo máximo sin servicio a lo largo de la jornada fue de 19 horas y 51 minutos.
En Pinar del Río, el director de la Empresa Eléctrica de la provincia, Pablo Pérez San Jorge, dijo que el sábado se ofrecerían de manera continua tres horas de servicio, con una afectación estimada entre ocho y nueve horas, según la rotación de los bloques.
“Ello significa que cada circuito tendrá en 24 horas, aproximadamente seis horas de servicio y entre 17 y 18 horas de apagón”, apuntó una nota divulgada por Tele Pinar.
La muestra más elocuente de que la situación ha llegado a un punto en extremo crítico es que en La Habana también se están apagando circuitos por déficit de capacidad de generación, algo que en meses anteriores no había ocurrido, a pesar de las múltiples afectaciones en el resto del país.
Este sábado, la Empresa Eléctrica de la capital alertó a sus usuarios de los bloques 1 y 2 que se afectaría el servicio de 10:00 de la mañana a 2:00 de la tarde, aunque en algunos puntos no se cumplió la programación y los apagones se extendieron hasta pasadas las 3:00. Igualmente, anunciaron la afectación al bloque 3 desde mitad de la tarde hasta las 8:00 de la noche.
Los de esta semana son los primeros apagones en La Habana por déficit de capacidad de generación en más de un año. En julio de 2022, cuando se agravó la situación del sistema eléctrico con afectaciones regulares por encima de los 1000 MW, las autoridades de la capital decidieron aplicar cortes de energía planificados “como una manera de ser solidarios con el resto de la nación”.
Domingo sin garantías de mejora y futuro incierto
Luego de dos jornadas caóticas, este domingo Cuba volverá a superar los 1000 MW de déficit durante todo el día. Lázaro Guerra, director técnico de la UNE, informó en televisión nacional que se prevé una disponibilidad de 2055 MW y una demanda máxima de 3100, por lo que se pronostica una afectación de 1115 MW en el pico nocturno.
El funcionario explicó que se mantienen fuera del sistema cinco unidades termoeléctricas (Santa Cruz, Felton, Mariel, Guiteras y Nuevitas) por averías y mantenimientos, mientras 88 centrales de generación distribuida tampoco brindan servicio por falta de combustible.
Guerra aseguró que, como estrategia, se incrementará la afectación respecto a la demanda durante el día. “Vamos a administrar adecuadamente los combustibles para tener una mejor condición en la noche, que son las horas más sensibles para la población”, puntualizó el director técnico de la UNE, aunque no dio garantías de que se pueda cerrar la demanda en la próxima madrugada.
Mirando más allá de la jornada dominical, el panorama es igualmente incierto.
Así lo dejó entender Vicente de la O Levy, ministro de Energía y Minas, quien también compareció esta mañana en televisión nacional: “La situación del déficit de combustible continúa. Tenemos previsiones de soluciones, en el futuro será ligeramente mejor el suministro, pero no va a haber una estabilidad como el año anterior, en el que nosotros consumíamos 2000 toneladas de diésel en la generación de electricidad y 4000 toneladas de fuel todos los días para las patanas”.
El Gobierno cubano ha rentado en los últimos años hasta siete centrales eléctricas flotantes a la empresa turca Karpowership para paliar de manera temporal el déficit de capacidad de generación. Sin embargo, la falta de divisas ha limitado la importación de combustibles para el funcionamiento de dichas plantas, lo que, en la práctica, atenta contra esta solución de contingencia y aumenta los apagones.