Los autores del asesinato ocurrido la noche del pasado sábado en Villa Clara fueron detenidos este lunes, luego de haberse dado a la fuga tras el trágico suceso.
El arresto, resultado del proceso investigativo por parte del Ministerio del Interior, generó “un clima de alivio y satisfacción en la ciudadanía”, aseguró el sitio Cubadebate al dar la noticia.
Según la nota oficial, “continúa el proceso de investigación penal, con el fin de poner a los imputados a disposición de los tribunales”.
“No habrá nunca impunidad para aquellos que delinquen, menos para quienes privan a otros del bien más preciado: la vida”, concluye el breve comunicado.
En el hecho, que tuvo como escenario el Centro Cultural Somos Jóvenes, perdió la vida un trabajador de seguridad del Complejo Recreativo y otros dos resultaron heridos.
De acuerdo con lo informado entonces por la ministra de Comercio Interior de Cuba, Betsy Díaz Velázquez, el desencadenante del asesinato fue una riña iniciada entre dos hermanos, que intentó ser contenida por el cuerpo de seguridad y los trabajadores del centro.
“Expresamos nuestras más sinceras condolencias a los familiares del compañero fallecido, especialmente a su esposa y a sus dos niñas, que hoy quedan huérfanas por culpa de individuos como estos”, escribió la ministra.
Sobre los heridos, la titular de Comercio Interior precisó que uno de los trabajadores permanecía en terapia intensiva a causa de los golpes recibidos en la cabeza, mientras que otro se encontraba en proceso de recuperación tras sufrir una herida en la espalda.
“Que todo el peso de la ley caiga sobre los culpables”, sentenció Díaz Velázquez al cierre de su mensaje.
Hasta el momento no han sido divulgados los datos personales de las víctimas ni de los implicados en este episodio, que se suma a otros hechos de esta naturaleza denunciados en los últimos tiempos en las redes sociales y que reflejan el crecimiento de la violencia en el país.
En las últimas semanas, han trascendido otros sucesos violentos en la isla. Entre estos se cuenta el asesinato de un custodio, y las heridas de gravedad sufridas por otro durante un robo en Santiago de Cuba, cuyos autores fueron posteriormente capturados por la policía.