El coronavirus sigue su camino en Florida. Este miércoles, de nuevo por segundo día consecutivo, las autoridades de salud informaron de 9.446 nuevos casos de contagio, 216 más que en la jornada anterior. Desde que comenzaron a contabilizarse las víctimas de la COVID-19, en marzo, suman ya 451.423. Hubo 216 muertos, con lo cual se alcanzó un total 6.333 decesos.
El condado Miami-Dade es el de mayor volumen, con 2.791 nuevos contaminados. La buena noticia es que fueron 246 menos que el martes, para un total general de 113.143 contagiados desde marzo. Pero hubo 30 fallecidos. Ya suman 14.555.
Mientras tanto, llegaron al estado 250 enfermeros para mitigar la falta de médicos y enfrentar el virtual colapso de las unidades de cuidados intensivos en 42 hospitales públicos.
Pero la preocupación del sur de Florida se ha desviado ahora a la ansiedad provocada por la tormenta tropical Isaías, que se encuentra en el este del Caribe. Se está desplazando a una velocidad de 30 kilómetros por hora. Eso podría traerla hasta Miami el sábado.
Hasta hoy miércoles no está previsto que se transforme en el primer huracán en llegar a Florida esta temporada. De hecho, los pronósticos del Centro Nacional de Huracanes ubican la posibilidad de que suceda en menos del 60%.
Si ocurre lo contrario, un huracán vendría a empeorar el panorama en medio de la pandemia, que parece haber llegado para quedarse con cifras aterradoras y sin fin a la vista.
Y coincidiría, además, con la realización de un proceso electoral local que empieza el lunes 3 de agosto con la votación anticipada. Las elecciones son el 18 de agosto e incluyen alcaldes, concejales, legisladores estatales y algunos referendos sobre legislaciones municipales.
Las autoridades electorales hicieron un ejercicio el martes para preparar los centros de votación a fin de proteger a los electores del coronavirus.
La portavoz del Departamento de Elecciones del condado Miami-Dade, Suzy Trutie, garantizó a la prensa que se van a tomar todas las medidas necesarias para asegurar el bienestar del electorado y de los empleados que atenderán los 23 centros de esta votación anticipada.
Entre las medidas, Trutie mencionó que será obligatorio que todo el que entre a un colegio use una mascarilla. “Los trabajadores electorales tendrán mascarillas, máscaras plásticas, guantes y desinfectante para limpiar la maquinaria frecuentemente, de manera de asegurarnos de que el recinto esté completamente esterilizado”, afirmó.