Las autoridades del Acuario Nacional de Cuba (ANC) aseguraron este sábado que el centro cuenta con un programa de manejo de mamíferos “sustentado en bases científicas y en las normas internacionales”, tras la polémica desatada en las redes sociales por la reciente muerte de uno de los animales de esa institución.
La Máster en Ciencias María de los Ángeles Serrano, directora del acuario, dijo que los especialistas que allí atienden este tipo de animales tienen “muy en cuenta” las indicaciones de la Asociación Mundial de Zoológicos y Acuarios, de acuerdo con un despacho de la Agencia Cubana de Noticias.
Además, señaló que los animales del ANC “son muy queridos por sus entrenadores” y que “se lleva un control de la historia clínica de cada uno de ellos desde el mismo día que llegan al centro, sobre cualquier manipulación y hasta el cambio de dieta”, añade el reporte.
Las declaraciones de la directiva llegan poco después de que el centro fuese cuestionado en redes sociales por varios activistas y protectores de animales, luego del fallecimiento del lobo marino bautizado con Jocker, sucedido el pasado 20 de abril en las instalaciones de dicho centro.
“Hoy la familia del Acuario Nacional de Cuba amanece con la triste noticia, deja de estar en la institución nuestro querido Jocker, lobo marino de la especie zalophus californianus, este ejemplar nació el 5 de junio de 1998 y llega al Acuario en marzo del 2003, durante todo este tiempo muchas generaciones de visitantes pudieron disfrutar de su presencia en las exhibiciones de mamíferos marinos”, publicó ese día la institución en su perfil de Facebook.
Sin embargo, varios usuarios de la red social responsabilizaron a la institución por lo sucedido, y achacaron la muerte del animal a una presunta atención deficitaria y a malas condiciones del lugar donde estaban ubicados los ejemplares de esta especie dentro del acuario.
En publicaciones propias, animalistas afirmaron que “Jocker llevaba tiempo en estado de desnutrición y nadie hizo nada” y que desde semanas atrás era “alarmante y preocupante”el estado en que se encontraba el animal. Incluso, un día antes de su muerte, en el perfil de Facebook Vive como Daguerre se denunciaba que en el ANC existían animales “con un estado de desnutrición severo, caquecticos, deshidratados, con lesiones en la piel”, y se mostraban varias fotos, entre ellas una del lobo marino después fallecido.
De igual forma, se exigía a las autoridades de la institución “el tratamiento médico urgente de estos animales (los que aún queden vivos) condiciones óptimas , alimentación y de ser posible considerar su posterior liberación”. En esta demanda incluía a los delfines “que se encuentran en las misma situación”, aseveraba la publicación.
En lo que al parece es una respuesta institucional a estos señalamientos, la directora del Acuario Nacional señaló que en el caso de Jocker, que falleció a los 24 años, se trata de un animal “anciano” porque superaba el promedio entre 20 y 30 años que suelen durar los miembros de esta especie.
De acuerdo con el reporte de prensa, Serrano indicó que “desde los primeros síntomas de enfermedad (al lobo marino) se le dio un seguimiento muy fuerte por los veterinarios y entrenadores.”
Aclaró, además, que en su colectivo lo alimentaron hasta casi minutos antes de fallecer, con el volumen de comida que él aceptaba. “Recibió tratamiento por una neumonía diagnosticada y en la necropsia se detectó una cardiopatía”, agregó la máxima autoridad del ANC.
“Jocker había nacido el 5 de junio de 1998 y llegó al Acuario Nacional en marzo de 2003, pero por naturaleza perdió masa corporal, su comportamiento no era igual, estaba ciego, y no lo desatendimos en ningún momento porque formaba parte de los ejemplares del acuario”, detalló la directiva.
Según Serrano, en su estado de salud era peor aislarlo, porque donde estaba “tenía las condiciones necesarias” y consideró que “sacarlo de ahí era agudizar su padecimiento”. “Fuimos muy cuidadosos y nunca lo forzamos a comer porque resultaba peor, la alimentación forzada a estos animales puede provocarles un infarto”, añadió, citada por la agencia.
Este suceso sale a la luz poco después que los defensores de los animales y parte de la sociedad cubana emplazaran a las autoridades por el maltrato a un pequeño gato durante un rodeo realizado como parte de las actividades de la Feria Internacional Agroindustrial Alimentaria Fiagrop 2022 en la capital cubana.
Entonces, los animalistas exigieron el cumplimiento del decreto-ley de bienestar animal aprobado recientemente. El Ministerio de Agricultura (Minag), uno de los organizadores del evento, rechazó lo sucedido, y luego de investigar los hechos anunció penalizaciones a los involucrados en el lamentable acontecimiento.
Maltrato animal en feria agropecuaria cubana lleva al Ministerio de Agricultura a pedir disculpas
La nota emitida al respecto por el organismo aclaraba que las sanciones administrativas, disciplinarias y contravencionales “corresponden según lo establecido en el Decreto-Ley No.31/2021 de Bienestar Animal y su Reglamento, normas que desarrollan la Constitución de la República de Cuba, en cuanto al deber de los ciudadanos cubanos de proteger los recursos naturales, la flora y la fauna y velar por la conservación de un medio ambiente sano”.
La aprobación de esta normativa llegó tras años de insistencia por parte de activistas y también de entidades vinculadas al tema y fue celebrada por la creciente comunidad animalista cubana, si bien no satisfizo todas las demandas al respecto, y ha incrementado su labor de activismo, vigilancia y denuncia para que lo establecido se cumpla, y se penalice a quienes maltraten a algún animal en el país caribeño.