El empleo de drones fue una de las novedades del ejercicio “Meteoro”, realizado este fin de semana en Cuba como preparación para la próxima temporada de ciclones en el Atlántico y otras situaciones provocadas por eventos climatológicos y reducir el impacto de diversos desastres.
El uso de “medios no tripulados” en el ejercicio es reseñado por el diario Granma y fue reconocido por el General Ramón Pardo Guerra, jefe del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil cubana, quien dijo que la Isla utilizará “todos los medios técnicos posibles” para enfrentar los efectos de los eventos climatológicos.
Pardo resaltó el uso de los drones “por la precisión que aportan” y comentó que su valor “se pudo apreciar luego de los severos daños del tornado” que azotó a varios municipios habaneros.
“No quiere decir que no se hayan usado en otro momento, pero fue en esa ocasión cuando se les dio publicidad”, acotó.
En el “Meteoro”, los drones fueron utilizados para “visualizar la exitosa maniobra de traslado de algunas naves” en uno de los canales interiores de la Marina Hemingway, en La Habana, “donde se garantiza la seguridad tanto de los barcos estatales como los privados”, explica Granma.
El empleo de los vehículos aéreos no tripulados en interés de la Defensa Civil fue mostrado durante el segundo día del ejercicio #Meteoro2019 @Movitel #DefensaCivilCuba pic.twitter.com/IfDxVG6sfY
— Defensa Civil Cuba (@CubaCivil) May 19, 2019
El ejercicio, finalizado este domingo, tuvo entre sus objetivos puntualizar, en todos los niveles, las medidas previstas en cada etapa del proceso de reducción de riesgo de desastres, verificar los aseguramientos para situaciones de catástrofes y entrenar a la población para realizar primeros auxilios, socorrismo y rescate ligero.
Su primera jornada, el sábado, estuvo dedicada al control de los planes para minimizar los efectos provocados por fenómenos meteorológicos, sismos o sequías intensas, la revisión de las condiciones de los centros de evacuación y la preparación de la población en socorrismo y primeros auxilios, entre otras acciones.
Además, durante los dos días incluyó entre sus acciones la poda de árboles, limpieza de zanjas, el aseguramiento de alimentos en almacenes, la revisión de las condiciones de los centros para acoger a los evacuados, y labores de higiene en comunidades rurales y urbanas.
Los responsables del ejercicio también enfatizaron en la divulgación de las normas de conducta orientadas ante situaciones de desastres, de las “Guías Familiares” para la preservación ante ciclones tropicales, y de las medidas a cumplir en cada una de las fases establecidas por la Defensa Civil.
Este adiestramiento es una experiencia que Cuba ejercitaba desde 1986 inicialmente solo para enfrentar el peligro de los ciclones, y desde mediados de la década de los años noventa se generalizó a otros eventos meteorológicos y también incluye la preparación ante epidemias, accidentes industriales, derrumbes o incendios.
Durante el ensayo, especialistas del Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología indicaron que la temporada de ciclones de 2019 en el Atlántico, comprendida entre el 1 de junio y el 30 de noviembre próximo, se espera estará en un rango “normal”.
No obstante, advirtieron que al margen de la probable cantidad de organismos ciclónicos tropicales, lo más importante es estar preparados para eliminar y disminuir riesgos, así como proteger la vida y los bienes de la economía.
EFE / OnCuba