La Base de Supertanqueros de Matanzas, parcialmente consumida por un incendio de grandes proporciones en agosto de 2022, pudiera recuperar en un plazo de cuatro años su capacidad de almacenar 200 000 metros cúbicos de combustible, según valoraciones de los responsables de su reconstrucción.
Liber Sams Toledo, jefe del área de inversiones, confirmó al diario Granma que los trabajos para restituir el primero de los cuatro tanques afectados comenzarán durante el presente mes.
Las inversiones para la recuperación integral del enclave incluyen catorce objetos de obra, entre ellos el completamiento de interconexiones con los muelles, la construcción de los tanques y del nuevo laboratorio de ensayos.
La Base de Supertanqueros de Matanzas cuatro meses después del incendio
También se incluye en este plan el redimensionamiento del sistema eléctrico y la rehabilitación de los talleres de mantenimiento con nuevas unidades de mecánica, electricidad y maquinado, agrega la información.
Entre las labores inmediatas está la nivelación del terreno hasta lograr la demanda exigida. Una vez construida la base con su cimentación, se emprenderá el montaje mecánico del primer depósito, que se estima sea en abril.
Según Sams Toledo, el empalme de ese tanque marca la arrancada de la segunda etapa de la recuperación tras concluir la fase de demolición de los objetos y edificios dañados, y de saneamiento de las áreas contaminadas.
Los especialistas esperan necesitar unos 16 meses para erigir la nueva estructura, de un diámetro ligeramente inferior a los tanques destruidos por el fuego, pero con una estructura bastante similar, incluida la membrana interna flotante de aluminio y el domo geodésico.
Además, tendrá condiciones de operar los combustibles con mayor seguridad, pues contará con un sistema eléctrico soterrado.
Expertos venezolanos trabajan en nuevo sistema de pararrayos en base de Supertantequeros de Matanzas
Aseguró el directivo que la distancia entre los depósitos será ahora de unos 110 metros, casi cuatro veces superior a la anterior. Otra marcada diferencia está relacionada con el cubeto o dique de contención, cuya capacidad será mayor que la del tanque, de forma tal que ante un derrame todo el crudo quede concentrado en esa estructura.
Apunta la publicación que el dique se armará con tierra revestida de hormigón, cualidad que evita el colapso de esa estructura cuando la embiste el fuego. También se dispondrá de cañones de espuma más potentes, y de una nueva posición para los bomberos en caso de emergencia, establecida a una mayor distancia del fuego.
El ingeniero Rigel Rodríguez, director de la División Territorial Comercializadora de Combustibles, destacó que uno de los propósitos ha sido concebir proyectos más resistentes en los que todos los sistemas se engranen y muestren vitalidad ante accidentes de cualquier naturaleza.
A su vez, informó sobre la restitución de dos líneas principales para comunicar a los muelles con la Base, una a través de un ducto de 20 pulgadas de diámetro que conduce el diésel hasta los tanques del área de residuales, y de la línea de 24 ,que posibilita el paso del crudo hacia otros puntos vitales.
La base de supertanqueros, ubicada en la zona industrial de la ciudad de Matanzas, fue afectada por un gran incendió originado, según versiones oficiales, por el impacto de una descarga eléctrica sobre el domo de uno de sus depósitos.
A pesar del esfuerzo de varias unidades del Cuerpo de Bomberos, el tanque incendiado explotó y las llamas se extendieron paulatinamente al resto de los depósitos de la batería. En el suceso fallecieron 17 personas, la mayoría bomberos que participaban en labores de extinción.
Además, otras 129 personas resultaron lesionadas y fueron atendidas en centros hospitalarios de Matanzas y La Habana.