Benito Martínez
Las expectativas creadas para la cura del cáncer mediante el uso del medicamento cubano Vidatox 30 CH (veneno del escorpión Rhopalurus Junceus), son cuestionadas por integrantes de la comunidad científica nacional, al considerar que solo es un producto homeopático complementario.
El debate provocó un pronunciamiento del Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (CECMED), que en su condición de autoridad nacional reguladora dictaminó que se autoriza como “Terapia complementaria para el tratamiento de síntomas provocados por los efectos del cáncer y alivio del dolor, considerando que no han sido presentadas evidencias científicas que avalen su autorización como un tratamiento único.”
La institución exhorta a la comunidad científica y a los medios de difusión, el apego a “los principios éticos en la promoción de medicamentos y sustancias potencialmente curativas en las actividades de información y promoción para estos productos.”
En el contenido de algunos sitios web que publicitan el producto homeopático cubano, se asegura que cura el cáncer, mientras que sus creadores, los laboratorios Labiofam, solo lo recomiendan como “potencial alternativa terapéutica para el tratamiento de enfermedades neoplásicas en humanos y le acreditan que ha mejorado la calidad de vida de pacientes, además del alivio del dolor y una mejoría sintomática.”
Se interpreta del comunicado del CECMED que también se ofertan en el mercado internacional productos similares, y para ello alerta:
“Cualquier preparado elaborado a partir del veneno de alacrán Rhopalurus junceus que no sea el medicamento homeopático VIDATOX® 30 CH, gotas sublinguales, no cuenta con autorización sanitaria; su distribución y uso no está autorizada y constituyen un riesgo para la salud.”
También la entidad reguladora cubana explica en su declaración pública que “otras indicaciones o propiedades terapéuticas atribuidas al VIDATOX® diferentes a las aprobadas por el CECMED, no cuentan con respaldo científico requerido y su promoción no es ética.”
Labiofam otorgó licencias de distribución a empresas radicadas en 21 países de Latinoamérica y el Caribe, además de China, y el medicamento se vende igualmente en una tienda online que sugiere el productor. También han hecho la promoción en Europa, con aceptación por parte de empresarios en Reino Unido, Bélgica y Francia.
El Vidatox es un bioterapéutico homeopático que tiene como principio activo el veneno del escorpión Rhopalurus Junceus, especie endémica de Cuba. 
Reportes médicos y estudios realizados demostraron que personas diagnosticadas con diversas manifestaciones de enfermedades tumorales, que no respondieron a tratamientos convencionales, mejoraron la calidad de vida con el empleo del medicamento.
Entre ellas, se encontraban pacientes aquejados de tumores de páncreas, en el tallo del sistema nervioso, la próstata y los pulmones, entre otros órganos, según reportes de medios nacionales de prensa.
Pero sobre el tema, el CECMED señala que los resultados de investigaciones aisladas no son concluyentes, ni es ética su anticipada divulgación, ya que crean falsas expectativas sin respaldo científico que pueden inducir al abandono de tratamientos bien establecidos.
Además, tales prácticas –asegura la institución- constituyen una agresión ética para las personas que desesperadas ante la enfermedad o la de sus seres queridos, cifran sus esperanzas de curación guiados por informaciones indebidas.
