La existencia de una fosa con los restos del poeta cubano Pablo de la Torriente en Barcelona ha sido descartada tras una excavación en esta ciudad española.
El Gobierno de la región de Cataluña (noreste) informó este miércoles que técnicos de su Dirección General de Memoria descartaron la existencia de la fosa en la zona del cementerio de Montjuïc de la capital catalana, donde se creía que estaba enterrado el poeta, que luchó con el bando republicano durante la Guerra Civil española (1936-1939).
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Pablo de la Torriente murió en combate en la localidad de Majadahonda, en la región de Madrid (centro), a finales de 1936.
El intelectual cubano fue enterrado inicialmente en el cementerio de Chamartín de la Rosa en Madrid, aunque los restos fueron posteriormente embalsamados y trasladados a Barcelona para ser repatriados a Cuba, pero finalmente la situación bélica impidió el regreso a su país.
La Dirección General de la Memoria dio por finalizada la intervención en el cementerio de Montjüic iniciada el pasado 28 de abril para buscar sus restos y los de otras once personas, después de que los arqueólogos excavaran la zona hasta topar con la capa geológica sin que aparecieran restos humanos.
Una nueva excavación fue descartada puesto que no hay ninguna otra hipótesis sobre su lugar de entierro.
Poeta, periodista, intelectual y revolucionario, autor de varios cuentos, novelas y ensayos, Pablo de la Torriente se exilió a Nueva York en 1933 y con el inicio de la Guerra Civil viajó a España como corresponsal de guerra, si bien acabó compaginando este trabajo con su incorporación a la lucha armada como voluntario internacional.
Murió en combate en Majadahonda, alrededor del 19 de diciembre de 1936, en la conocida como Batalla de la Niebla, y en Cuba se convirtió después en un símbolo y fue conocido como el “héroe de Majadahonda”.
La Asociación de Amigos de las Brigadas Internacionales, como se conoce a los voluntarios extranjeros que combatieron con el bando republicano, impulsó una investigación que demostraba, con los registros del cementerio de Montjuïc, que Pablo de la Torriente fue enterrado provisionalmente en el nicho 3772 el 13 de junio de 1937.
Abren fosa común donde podrían hallarse los restos de Pablo de la Torriente
En 1939, una vez acabada la guerra y finalizado el plazo de ubicación temporal, sus restos fueron exhumados y trasladados a una fosa, en la que se ha realizado la excavación a raíz de testimonios y de las investigaciones posteriores.
El Gobierno catalán, el Ayuntamiento de Barcelona y el Consulado General de Cuba firmaron un convenio en 2018 para los trabajos de recuperación y repatriación del poeta.