El transporte en Cuba aún no se recupera del duro golpe del huracán Melissa, una semana atrás. Aunque ya las rutas de guaguas y los vuelos hacia la zona oriental comenzaban a restablecerse, todavía persisten serias afectaciones en las carreteras y el sistema de transportación en sí.
Según explicó el ministro del sector en sus redes, este lunes se inició el restablecimiento progresivo de los servicios en la zona oriental con “nuevos itinerarios y medidas logísticas para garantizar la movilidad segura y el abastecimiento de la población”.
En el caso de los ómnibus nacionales, esta noche comenzarán a reanudarse sus frecuencias habituales, aunque con “modificaciones en los recorridos para sortear las zonas aún comprometidas” por el huracán, refirió Eduardo Rodríguez Dávila.
La principal modificación es el desvío por Holguín de las rutas que transitan entre Las Tunas y Bayamo, y también en dirección contraria, lo que, si bien alarga el recorrido, evita el cruce de un tramo de vía severamente afectado por las inundaciones posteriores al azote de Melissa.
Además, en Granma todas las salidas se realizarán desde la cabecera provincial, Bayamo, en tanto se mantienen suspendidas las rutas Santiago–Moa, Santiago–Pilón y Santiago–Manzanillo, “hasta que se garantice la seguridad vial”.
Estos cambios en los itinerarios “se mantendrán hasta que las condiciones permitan retomar los recorridos oficiales, lo cual será informado oportunamente”, explicó el ministro.
Trenes y vuelos
Mientras, los trenes nacionales y locales de pasajeros continúan suspendidos desde y hacia Guantánamo, Santiago de Cuba, Holguín y Granma, en tanto el restablecimiento de las vías férreas afectadas por el huracán “se realizará de forma escalonada, previa certificación técnica”.
Por su parte, los aeropuertos Antonio Maceo, de Santiago, y Frank País, de Holguín, ya están operativos, con operaciones nacionales e internacionales, de acuerdo con Rodríguez Dávila.
El ministro señaló que los pasajeros que no deseen viajar, podrán reintegrar el 100 % del valor de su boleto hasta 15 días después de la fecha de su viaje, en tanto los que quieran hacerlo una vez vez restablecidos los servicios “deberán contactar con las agencias de venta de la empresa Viajero para reprogramar su viaje, según las capacidades disponibles”.
En lo que respecta al transporte marítimo, los puertos están ya activos y con “medidas reforzadas” para garantizar la descarga de alimentos y otros productos, según el funcionario, quien exhortó a la población a “mantenerse informada por los canales oficiales y a respetar las indicaciones de seguridad en cada territorio”.
Daños en las carreteras
En otra publicación, Rodríguez Dávila confirmó que el huracán dejó “una estela de afectaciones en la infraestructura vial de varias provincias” y que, a pesar de las labores en marcha, persistían “limitaciones en tramos clave que comprometen la movilidad y el acceso a comunidades vulnerables”.
Entre las vías con daños relacionadas por el ministro están la Moa–Baracoa, habilitada solo “para transporte especializado” y las de Holguín–Moa y Palma–Barajagua, que están siendo recuperadas y permite el paso “con precaución”.
Igual es la situación de otras carreteras, como las de Santiago–Holguín (por Palma Barajagua) y la del Cobre y Palma Soriano; así como la de Guantánamo–Baracoa y las que unen a Las Tunas con Puerto Padre y Ojo de Agua.
En el caso de Granma, el titular de transporte advirtió que es una de las provincias más golpeadas. Allí se reportan daños en numerosas vías y tramos, tanto en la zona del Cauto en dirección a Las Tunas como en la zona del Manzanillo, Pilón y Niquero.
También es complejo el escenario en la carretera que une a Santiago y Granma por la costa sur, que cuenta con tramos con problemas y restricciones, mientras que un grupo de comunidades permanecían incomunicadas.
Como cierre de su mensaje, el ministro pide a la población “evitar desplazamientos innecesarios hacia las zonas comprometidas”.












