La vicegobernadora de Minnesota, Tina Smith, es la primera figura de alto rango gubernamental de Estados Unidos en visitar Cuba tras el anuncio de cambio de política hacia la Isla del presidente Donald Trump.
Smith, quien ocupa el cargo desde enero de 2015, viaja al frente de una delegación bipartidista que incluye políticos, empresarios y miembros de instituciones agrícolas con intención de explorar oportunidades comerciales, en particular en el sector agropecuario.
“El acceso a nuevos mercados en Cuba es una tremenda oportunidad para los productores de Minnesota”, dijo la vicegobernadora en una nota de prensa. Mencionó que la Isla importa aproximadamente el 80 por ciento de sus alimentos y productos agrícolas al año, “incluyendo 20 millones de dólares de Minnesota”.
En su opinión, la misión comercial que lidera “dará lugar a nuevas oportunidades de exportación y crecimiento de empleo” para los comerciantes y trabajadores de su estado.
La visita, considerada “histórica” por la oficina de la vicegobernadora, comenzó este lunes e incluye encuentros en los Ministerios de Agricultura y Asuntos Exteriores de Cuba. Además, Smith y sus acompañantes visitarán cooperativas agrícolas, mercados y el Instituto de Ciencia Animal de la Isla, antes de partir el próximo viernes, apenas una semana después del discurso de Trump en Miami.
La delegación incluye, entre otros, la senadora estatal Julie Rosen, el comisionado de Agricultura Dave Frederickson, el presidente de la Asociación de Productores de Maíz de Minnesota, Harold Wolle Jr., y el Presidente de la Oficina de Fincas del estado Kevin Paap.
“Los agricultores de Minnesota producen alimentos saludables y de alta calidad. Estamos deseando compartir nuestros productos agrícolas y nuestra experiencia con la gente de Cuba”, comentó Paap acerca del viaje.
Por su parte, Evan Berquist, quien integra la comitiva en representación de la firma Cozen O’Connor, dijo que la Isla es “un mercado significativo y en expansión para las compañías de Minnesota” y resaltó que “esta misión es particularmente oportuna, dados todos los cambios de política que tienen lugar en Cuba y en los Estados Unidos”.
La senadora Amy Klobuchar opinó que “hacer negocios con Cuba significa más empleos para Minnesota y es bueno para el país”. En 2015, presentó un proyecto de ley para permitir a los estadounidenses comerciar libremente con la Isla y junto al congresista Tom Emmer lidera esfuerzos bipartidistas para modernizar las relaciones entre los dos países.
Luego de los anuncios de Trump sobre las relaciones con la Isla, Klobuchar llamó a “ampliar el compromiso con Cuba” y “no retroceder el progreso que se ha hecho en los últimos años”.
Situado al norte de Estados Unidos, Minnesota es el cuarto mayor estado exportador de productos agrícolas del país. El maíz, la soja y sus derivados, el pienso, la carne y los productos lácteos representan el 70 por ciento de sus exportaciones, las cuales se han triplicado en lo que va de siglo.
Cuba importa anualmente cerca de 2.000 millones de dólares en alimentos y productos agrícolas, por lo que es un mercado apetecido por los productores de todos los Estados Unidos. En la actualidad, los agricultores norteamericanos pueden vender sus productos a la Isla, pero las transacciones están condicionadas legalmente por el requisito de pago en efectivo, lo que en opinión del congresista republicano Rick Crawford “es realmente un impedimento para lograr plenamente el potencial de ese mercado”.
Crawford promueve un proyecto de ley para favorecer las exportaciones agrícolas a la Isla, que cuenta con el respaldo prometido del Secretario de Agricultura Sonny Perdue. Su propuesta incluiría el cobro del 2 por ciento de las ventas a Cuba para pagar a quienes reclaman una indemnización por las propiedades confiscadas por el gobierno cubano desde 1959.