La Asamblea General de la ONU condenó nuevamente el embargo estadounidense contra Cuba, al aprobar mayoritariamente este jueves la resolución presentada por la Isla en el foro internacional.
Un total de 187 países respaldaron el reclamo cubano de “poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero” en la edición 28 de una votación, que esta vez tuvo como novedad el voto en contra de Brasil. De esta forma, el gobierno de Jair Bolsonaro se unió a la tradicional negativa de Estados Unidos e Israel y acentuó su enfrentamiento con La Habana.
Además, Colombia y Ucrania se abstuvieron, mientras Moldavia optó por no ejercer su derecho al voto.
Tras la votación, la cancillería cubana celebró el apoyo de la “abrumadora mayoría de la comunidad internacional” y el “indiscutible aislamiento de Estados Unidos”, a pesar de las “brutales presiones reflejan la bancarrota moral y podredumbre de su actual gobierno”, según reflejó en su cuenta de Twitter.
187 países votan por el fin del bloqueo. Indiscutible aislamiento de #EEUU. Brutales presiones reflejan la bancarrota moral y podredumbre de su actual gobierno. #VictoriaDeCuba pic.twitter.com/I1QECmLTh4
— Cancillería de Cuba (@CubaMINREX) November 7, 2019
En 2018, solo Estados Unidos e Israel habían votado en contra, mientras Moldavia y Ucrania decidieron por no votar.
En vísperas de la votación, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, denunció “presiones” de Estados Unidos a países latinoamericanos para obtener su voto en contra del proyecto de resolución que Cuba presenta cada año ante Naciones Unidas para condenar el embargo impuesto por Washington a la Isla.
La oposición de Brasil y la abstención de Colombia, cuyos gobiernos son fuertes aliados de la Casa Blanca en la región, rompieron esta vez el habitual apoyo de América Latina y el Caribe a la petición cubana. En el caso de Brasil, el voto en contra contrasta con la posición favorable a la Isla de los anteriores gobiernos del Partido de los Trabajadores y mantiene la línea confrontacional asumida por Bolsonaro, quien ha sido muy crítico con La Habana y su programa de colaboración médica.
Sin embargo, la gran mayoría de los países mostraron entre ayer y hoy su respaldo a Cuba, tanto en discursos de sus respresentantes en la Asamblea General como en la votación definitiva.
Poco antes de votar, la nueva representante permanente de Estados Unidos en la ONU, Kelly Craft, acusó a la comunidad internacional de “cuestionar” el derecho de su país a elegir con quién comercia y de criticar el embargo que Washington mantiene contra Cuba desde hace casi seis décadas.
“Como todas las naciones decidimos cuáles son los países con los que comerciamos. Este es nuestro derecho soberano, nos preocupa que la comunidad intencional en nombre de la protección de la soberanía, siga cuestionando este derecho”, dijo Craft ante la Asamblea General de Naciones Unidas.
Su afirmación fue rechazada por numerosos países en su intervención, incluidos los Estados miembros de la Unión Europea que, a través de una alocución del representante de Finlandia en la ONU, Jukka Salovaara, reafirmaron que la “aplicación extraterritorial” de las sanciones por parte de EE.UU. “afectan a los intereses de la UE”, en referencia al título III de la como ley Helms Burton.
Este acápite activado por la administración de Donald Trump, permite demandar ante tribunales estadounidenses a las compañías de terceros países que supuestamente se estén beneficiando de propiedades en Cuba nacionalizadas tras la Revolución de 1959.
Por fin!