El Producto Interno Bruto (PIB) de Cuba cayó un 13% entre 2020 y 2021, dijo este miércoles el Ministro de Economía y Planificación de la Isla (MEP), Alejandro Gil, durante las sesiones de la Asamblea Nacional de Poder Popular.
En su presentación, Gil detalló que el plan de ingresos hasta el cierre de septiembre estaba al 60% (unos 2 mil millones de dólares), y que se espera terminar el año con 700 millones por debajo de lo planificado, de acuerdo con el reporte de Cubadebate.
La economía cubana ha perdido 13% de su PIB entre el 2020 y lo que va de 2021, “un impacto realmente duro” para el país, informó el viceprimer ministro y titular de Economía y Planificación, @AlejandroGilF , ante la Asamblea Nacional del Poder Popular. pic.twitter.com/dm3bZm5fDn
— Ministerio de Economía y Planificación de Cuba (@MEP_CUBA) October 27, 2021
“Estamos hablando que en un período de casi dos años hemos perdido más de 3.000 millones de dólares. La economía ha venido casi que resistiendo”, explicó el titular del MEP, quien recordó que en 2020 Cuba dejó de ingresar 2.400 millones.
Asimismo, el ministro precisó que las exportaciones ascienden a alrededor de 1.344 millones de dólares de bienes, lo que representa el 68,7% del plan, entre tanto las importaciones rondan los 5.800 millones de dólares, el 65% de lo planificado.
Afirmó que se han invertido 1.348 millones de dólares para comprar alimentos, una cifra muy por debajo de lo necesario para cubrir la demanda de los cubanos que, no obstante, Gil atribuyó a “esfuerzos que ha venido haciendo el país para, en la medida de lo posible, respaldar la ofertas de los alimentos básicos a la población”.
El ministro de Economía cubano justificó la disminución de esas importaciones por el aumento de precios de varios productos en el mercado internacional, como el combustible que ha estado por encima de los 80 dólares el barril, además de los propios alimentos y los fletes, que —según dijo—se han encarecido hasta el doble y el triple.
“No siempre la ejecución financiera tiene que ver con la ejecución física. Se puede traer menos alimentos, pero le cuesta más caro por el transporte”, añadió.
Por otra parte, Gil señaló incumplimientos en las ventas de dos de los principales bienes exportables cubanos: el tabaco, al 91% del plan, y el ron (al 86%), debido a problemas relacionados con la pandemia de coronavirus, que han afectado la producción de algunas fábricas y, a su vez, ha provocado la disminución la demanda internacional de esos productos.
Durante su presentación ante el parlamento, el titular de economía afirmó que las ventas de níquel “mantienen un buen comportamiento”, y su precio está por encima de lo previsto, “pero no hemos alcanzado los niveles de producción física planificados en el plan”, aclaró.
Además, expuso que la exportación de miel y de productos farmacéuticos exhiben números favorables, al igual que los ingresos resultantes de los servicios de las telecomunicaciones aunque no detalló cifras.
Según el reporte oficial, el ministro precisó que la planificación de ventas al exterior “no tomó en cuenta los impactos que provocaría la COVID-19”. Ejemplificó el caso de la exportación de servicios, que apenas alcanza el 67% del plan, sobre todo a causa de la profunda caída del turismo en la Isla.
“Diseñamos recibir 2.000.000 de visitantes internacionales, que ya no será posible. Nos quedaremos muy por debajo. No obstante, lo importante es aprovechar y recuperar la industria lo más rápido posible”, dijo.
En cuanto a la producción de alimentos en Cuba, Gil calificó la situación de “muy compleja” a causa del déficit de insumos, combustibles, piezas y equipamientos, así como problemas organizativos.
Afirmó que se registran incumplimientos en casi todos los renglones, como el arroz, maíz, frijoles, carne de cerdo y la leche, “con 63 millones de litros por debajo de lo previsto que ha imposibilitado respaldar todos los niveles de las dietas”.
Dijo que, aunque “se ha podido asegurar la canasta básica, hay un gran incumplimiento en la producción nacional de huevos, debido a afectaciones en la importación de maíz”.
“Estamos viviendo en el mundo un desorden en la logística internacional. Ahora mismo tenemos miles de contenedores, incluso pagados, de mercancía internacional que no han podido llegar al país, influido por la COVID-19 y también por el bloqueo (económico de EE.UU.)”, comentó.
Respecto a la generación de energía, el también viceprimer ministro cubano confirmó retrasos en “determinados mantenimientos e inversiones”, y especificó que se espera cerrar el año con unas 3 millones de toneladas de petróleo y gas, 90.000 más que las previstas en el plan.
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“Hay varias fuentes que tributan a la generación de energía en el país. La térmica es la que más ha generado, el 55% de la generación total del país, pero en el plan teníamos previsto que fuera un 60%. Los motores diésel representan alrededor de un 10% y teníamos previsto un cinco”, detalló el ministro.
“Cuando usted genera menos con la térmica y más con la diésel, que tiene que ver con los productos importados, el costo de la generación crece. Se ha priorizado el diésel para la generación eléctrica y esto afecta al resto de las producciones”, señaló.
Por otra parte, Gil informó que en 2021 se incumple la producción de cemento (80% del plan) y está “muy afectada la producción de acero” (52%), “resultado de las medidas que hemos ido tomando para reducir el consumo energético en esas industrias”.
En general, el ministro de economía especificó que se registra un déficit de oferta que asciende a 16.500 millones de pesos, que se refleja en una circulación mercantil de bienes y servicios que al cierre de septiembre debió alcanzar el 75% de lo planificado, “y estamos a un 67.7%”, según dijo.
Afirmó, además, que la circulación mercantil minorista en pesos cubanos está al 64%, y en divisas al 75%. Al respecto explicó que “no se ha vendido más en divisa que lo previsto en el plan. Se está cumpliendo en divisa lo previsto en el plan. Los problemas están en el déficit de ventas en pesos cubanos. En pesos cubanos, la canasta está al 75% pero la que no se cumple es las ventas en pesos. Esto tiene que ver con los procesos inflacionarios que está enfrentando el país”.
Cuba atraviesa una crisis económica con serias carencias de productos básicos y una creciente inflación, un escenario agravado por los efectos de la pandemia y el embargo de los Estados Unidos. Ante este contexto el gobierno cubano ha dado luz verde a un grupo de medidas, entre ellas la legalización de las Mipymes y una mayor autonomía a las empresas estatales, en busca de potenciar la producción nacional, aunque en opinión de expertos son necesarias más medidas y transformaciones en esta dirección.