Redacción OnCuba
Cuba enfrenta un momento de crisis, de salud, económica, social y política. El pasado 11 de julio sucedieron una serie de protestas en varias provincias cubanas y la Isla vive una muy tensa situación. En este contexto, OnCuba les ofrece la opinión de tres intelectuales del arte y las ciencias sociales de diversas generaciones que pudieran ofrecer luces sobre un problema muy complejo. Ellos dan su interpretación sobre las causas del estallido social en la Isla y también posibles caminos para solucionarlas.
Fernando Pérez
Director de cine y realizador cubano. Ha sido laureado con un Premio Goya de cine y su obra cinematográfica pasa por títulos como Suite Habana, José Martí, el ojo del canario, Clandestinos, Madagascar, entre otros.
Cuando el 27 de noviembre un grupo de jóvenes artistas se reunió frente al Mincult y surgió el 27N dije y luego escribí: “En esta acción pacífica percibo el inicio de un nuevo lenguaje que le hace falta a la cultura cubana y a este país”.
Ese nuevo lenguaje reclama libertad de expresión, inclusividad, derecho al disenso, participación activa de una sociedad civil plural y diversa. Ha pasado el tiempo y las puertas han continuado cerradas: sus voces no encontraron espacios, sino desconfianza, linchamientos mediáticos, “manotazos”, silencio.
Cuando el 11 de julio muchos de esos jóvenes artistas y cineastas (los conozco, sé lo que piensan y con ellos comparto su actitud contestataria) se plantaron pacíficamente frente al ICRT para plantear, una vez más, su derecho a ser escuchados, ese acto es para mí el símbolo de la temperatura de muchos sectores en Cuba hoy: NO más exclusión, NO más inmovilismo, NO más represión ante el que piensa diferente.
El problema no está en las redes, donde estos jóvenes encuentran un espacio que aquí les niegan, sino en unos medios cerrados que informan un solo discurso y nunca la diversidad en la que nuestra realidad se forja.
Por eso hoy sí hay un estallido social y no solo “disturbios” o “vandalismo”.
Quiero una Cuba independiente, soberana, sin injerencias extranjeras, pero una Cuba como la expresó Daniel Romero interpretando al joven Martí en “El ojo del canario”: una Cuba inclusiva, con el derecho a la palabra, al pensamiento libre y el respeto a la libertad individual.
La construcción de ese país tiene que ser a través del consenso y no de la violencia y la represión. Una Cuba en la que la tranquilidad y la unidad tengan que ser preservadas con las calles en manos de las tropas especiales, será una Cuba rota.
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Katia de Llano Cuesta
Economista. Trabajó como Asesora Económica del presidente de la Asamblea Nacional de Cuba durante 10 años y como profesora de Economía de la Facultad de mismo nombre, entre otras actividades. Actualmente está jubilada. Fue miembro del Movimiento 26 de julio y ostenta, entre otras, la medalla de combatiente clandestina. Fue fundadora del Partido y militó en el mismo durante más de 50 años, hasta que se desactivó por solicitud propia hace dos años.
Existe en Cuba una escasez de alimentos, que a partir de los últimos meses del año 2019 se ha agudizado y desde inicios del presente año ha alcanzado niveles insospechados. Similar situación tienen los medicamentos, algunos de ellos imprescindibles. El reordenamiento monetario, necesario pero inoportuno, ha complicado más el panorama económico, sin que se perciban los beneficios anunciados de esa medida. El aumento de los precios de productos y servicios, por el Estado y los privados, ha superado con creces el de los salarios y pensiones. La casi total desaparición del turismo ha provocado la caída de los ingresos de miles de personas que dependían de esa actividad, directa o indirectamente. La pandemia de la COVID-19 ha alcanzado proporciones alarmantes y ha afectado la vida de todos, incluyendo a aquellos que no han sufrido de cerca la enfermedad por la suspensión de clases, de actividades culturales y deportivas, el confinamiento domiciliario y la imposibilidad de atenderse en los los hospitales a las personas que tienen padecimientos, que no son graves, pero sí molestos. Y, por supuesto, el recrudecimiento del bloqueo, causante de la mayoría de nuestros males pasados y presentes, pero que ha servido también, en no pocos casos, de justificación.
Desde la pose del actual presidente cubano, se ha desarrollado una intensa actividad, caracterizada como nunca antes, por la visita a provincias, centros de trabajo y reuniones de análisis de la situación. También, los esfuerzos por enfrentar la pandemia y desarrollar nuestras propias vacunas son encomiables. Pero el pueblo está agobiado por las dificultades y la imagen que refleja la prensa, destacando como generales logros puntuales y con el triunfalismo que siempre la ha caracterizado. Esto contribuye al criterio que tienen muchas personas, de que el gobierno no está consciente de la situación por la que estamos atravesando. Adicionalmente, hay comprensión de la apertura de las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC), anunciadas inicialmente solo para electrodomésticos de alta gama y que posteriormente han extendido su oferta a productos de primera necesidad, agudizando las diferencias entre los que pueden comprar en esas tiendas y los que solo pueden hacerlo en las aun más desabastecidas, que venden en moneda nacional.
Hay criterios opuestos a que se continúen gastando recursos y especialmente materiales de construcción, en hoteles que no serán ocupados en el corto plazo, mientras que la construcción de viviendas está afectada por falta de ellos. No se comprende plenamente el por qué la Aduana no flexibiliza las restricciones a la entrada de alimentos y medicinas 1. Atribuirle entonces a “mercenarios” y “anexionistas” pagados por el gobierno de Estados Unidos el origen de las manifestaciones ocurridas el pasado domingo en varios puntos del país es de un simplismo extremo y demuestra la ignorancia del Partido y el gobierno sobre la situación existente.
Es cierto que el gobierno de ese país está detrás de muchos eventos similares y los apoya financiera y políticamente la oposición, pero, sobre todo, es oportunista y se aprovecha de situaciones que existan en países cuyos gobiernos no le son afines. Especialmente en cuanto a Cuba, nunca se han recuperado de la frustración histórica por haberla perdido. Pero no se puede ignorar las dificultades por las que atraviesa la mayoría de la población cubana. Aunque muchas de ellas son a causa del bloqueo, otras son por las deficiencias, decisiones erróneas y resistencia a hacer transformaciones atrevidas, pero necesarias, por parte de los que dirigen y sobre todo por la falta de esperanzas en cuanto al futuro.
El pueblo está agobiado y eso no puede ser ignorado. Las recientes intervenciones del presidente y algunos ministros evidencian una falta de comprensión sobre el significado de las recientes manifestaciones. No se puede etiquetar a todos como “mercenarios” y “anexionistas”. Hay que combatir el vandalismo y tratar diferenciadamente a los antisociales, pero no es enfrentando en las calles a unos cubanos contra otros, como se resuelve esta situación. Eso genera más violencia y más malestar. Urge analizar esos hechos autocríticamente, convencer al pueblo de que se conocen sus dificultades y adoptar medidas para mejorar la situación en lo que respecta principalmente a la producción de alimentos, en lo que una verdadera transformación de la producción agropecuaria traería consigo y la tantas veces anunciada apertura del trabajo por cuenta propia para incentivar la creatividad. Las declaraciones y consignas por sí solas no son suficientes.
Es necesario devolver la confianza en el gobierno y la esperanza a quienes han perdido ambas cosas.
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Abel Somohano
Periodista e investigador. Ha trabajados temas de periodismo oficial y medios independientes en Cuba.
Lo que se ha vivido en los últimos días en Cuba no es inexplicable. Se ha llegado ahí por algo. Se está en un contexto marcado por la existencia de un gobierno que no ha sabido gestionar la(s) crisis. Hay también una política agresiva estadounidense orientada históricamente a asfixiar y desestabilizar, que si bien es una condición importante, no explica necesariamente todo lo que ha sucedido en el país, al menos no con el énfasis asumido en el discurso oficial. Algo como esto podía darse más temprano que tarde, con mayor o menor intensidad y capacidad de propagación porque había condiciones para ello.
Lo que ha pasado no podría decirse que careció de anticipación. Hubo señales. Hubo antes ciudadanos inconformes, hubo antes críticas, hubo antes denuncias, hubo antes acciones similares… Y hubo un gobierno que no supo responder como debía.
Frente a las protestas, desde el discurso oficial se ha optado por secuestrar los términos. Se ha optado también por distribuir los espacios a conveniencia. La calle, el espacio público, es para “el revolucionario”, se ha dicho. Y un revolucionario es, desde este marco, quien se identifique con el orden de cosas. Esto no es nuevo, se inscribe en una matriz histórica. Carga, sin embargo, con la debilidad de la exclusión en una Cuba diversa.
De “revolucionarios [sin apellidos]”, de “revolucionarios comunistas”, de “revolucionarios confundidos” y de “mercenarios”, entre otros actores, se ha hablado desde el discurso oficial. No parecen etiquetas que agoten lo que somos ni lo que nos atraviesa. Del bloqueo y de desatinos del gobierno, y de problemas económicos, políticos y sociales “habla” la realidad del país, entre otras cosas. De personas atravesadas por todo ello, agotadas, “hablan” las acciones populares.
Ha habido protestas, ha habido agresiones, ha habido detenciones arbitrarias, ha habido personas que no han llegado a sus casas, ha habido muerte… En medio de todo, los ciudadanos han activado discursos para acompañarse, protegerse e informarse. Han emergido otros para lo contrario: para “dinamitar”, “parcelar” y desinformar. Se han hecho más visibles posturas intervencionistas. Se vuelven a desatar enfrentamientos discursivos en los que los sujetos se ubican en polos al parecer irreconciliables.
En este contexto, sería conveniente trascender la “orden de combate”, los discursos de odio y vengativos y los deseos de linchar. Cuba necesita paz. Se haría necesario también construir un marco respetuoso y abarcador para una Cuba futura mejor, en la que quepamos todos, para fundar, construir y abrazar.
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Nota:
1 Este miércoles 14/07 el gobierno cubano anunció un Paquete de medidas económicas en la cual quedó establecido: “autorizar excepcionalmente y con carácter temporal la importación vía pasajero con equipaje acompañante, alimento, aseo y medicamentos sin límite de valor de importación y libre de pago de aranceles hasta el 31 de diciembre de 2021. Los límites los pone la aerolínea”.
La decision tardia de permitir el ingreso de alimentos, medicinas e insumos acompañados sin pago de arancel en las aduanas de Cuba, es un placebo o paliativo que nada resolvera debido a los escasos vuelos que llegan al pais.
Si se quisiera enfrentar y resolver la genesis de la crisis que asola al pais, Cuba converteria los pocos aviones de que dispone y de cuantos buques haya en puerto para la carga en rutas regulares a los diferentes paises vecinos como son Mejico, Republica Dominicana, Haiti, Honduras, Jamaica etc., donde recogerian miles de toneladas de alimentos, medicinas e insumos adquiridos por cubanos residentes en el exterior, que trasladarian regularmente al pais.
La creacion de un eficiente sistema de distribucion interna de la paqueteria internacional a cargo de cuantos vehiculos civiles y militares existan en Cuba para entregar dichos bienes en 3 o 4 dias a lo sumo de su llegada al pais, es el unico antidoto nuetralizante del hambre, la insalubridad y la desesperacion que se ha adueñado del pais.
De la misma manera que el gobierno pifio la bola y no detecto el malestar ciudadano que se ha venido incubando a lo largo y ancho del pais debido a las noticias triunfalistas y arribistas de los medios masivos de comunicacion, esta tampoco parece haber reconocido la magnitud del peligro que se cierne sobre Cuba, al sentar el enemigo las bases para una intervencion militar similar a Kosovo, Panama, Grenada o Libia.
Ningun cubano honesto puede aceptar como bueno y justificable, el excesivo uso de la fuerza bruta contra una poblacion inerme, agotada por la ansiedad y las angustias para adquirir los productos vitales mas elementales, el dolor de ver a sus hijos sin alimentos o medicamentos y por haberlo expresado, sean calificados de delincuentes o vendepatrias al servicio del imperialismo.
Eso es falso, cruel y abusador que el estado unico dueño del megafono, acuse sin oportunidad de replica a los mas debiles de la sociedad.
Basta de jueguitos con la vida y el bienestar de once millones de seres humanos, por la obsecacion y los caprichos del gobierno que persiste en mantener el monopolio sobre todos los medios de produccion del pais, que no han sabido administrar, no han sabido producir ni permiten a millones de sus hijos radicados en el exterior, que han demostrado sin lugar a dudas su amor patrio y deseos de colaborar con la solucion de los graves problemas que afligen al pais.
Una lectura lineal de lo expresado por estos intelectuales pudiera ser la verdad del templo, así sin matices parece que son dueños de la verdad.
Podemos coincidir en la necesidad de lograr máximos niveles de democracia, un Partido único está en la obligación de ofrecer todas las opciones posibles para lograrlo.
Lo que sucede y los intelectuales ignoran, no por ignorancia, es que Cuba es una plaza sitiada, por el simple hecho de querer construir un modelo político y económico diferente y gestionar la política y la economía bajo un estado de sitio por parte de una superpotencia es más difícil y complejo que hacer cine o un análisis económico.
El bloqueo es el arma para rendirnos y a vez en el colmo del cinismo, quienes nos bloquean dicen que para nosotros es mero pretexto. La única forma de demostrarlo es que lo eliminen.
Los intelectuales de una forma sutil llegan a la conclusión de que los actos vandálicos demostrados son culpa del gobierno, con el cinismo de Biden tenemos bastante, no hace falta más.
En lo que podemos coincidir es que sin dejar de denunciar el bloqueo y las campañas furibundas y mentirosas, debemos concentrarnos más en los problemas internos que son nuestra responsabilidad y entre todos buscar solución.
Comparto plenamente la opinión de Carlos Manuel Balan Carballo. Hay que contextualizar y reconocer la situación histórica de Cuba. Se trata de en país del tercer mundo en estado de sitio desde el 1 de enero de 1959. Con un sistema que ha acumulado los efectos negativos del bloqueo (una guerra económica, política, cultural, etc.). Cualquier análisis que ignore estos y otros elementos históricos es una explicación acrítica.
Otra observación, en los últimos días se generaron contradicciones antagónicas que condujeron a enfrentamientos violentos. Las causas de esas oposiciones son múltiples, intervinieron fenómenos exógenos y endógenos. Entre estos hay que mencionar el influjo de la ideología neoliberal que aboga por el desmantelamiento del Estado para ponerlo al servicio de la propiedad privada.
No seamos ingenuos. En esas acciones pacíficas no hay “un nuevo lenguaje que le hace falta a la cultura cubana y a este país”. Se trata del mismo pensamiento conservador liberal que renuncia a la superación del viejo régimen de producción y consumo capitalista burgués.
Recuérdalo bien compatriota, en ese “nuevo mensaje de salvación liberal” no hay nada de nuevo.
Muy real y verdadero lo que dicen los tres.primera vez q veo alguien coincidir con lo de la tiendas mlc , al inicio para equipos eléctricos de alga gama , después para todo , ha Sido una falta de respeto al pueblo , creando diferencia marcadas y dando pie a aprovecharse de eso a negociar, además de ser ese el mercado q marca los precios y que los pone el mismo estado, porque la gente le pone precio a las cosas según las tiendas mlc.
Además que el gobierno no ha sabido llevar la situación del país producto de la escasez d alimento medicamento y aseo personal, para ahora después de estos disturbios poner medidas de importación, tuvo que pasar esto para que se dieran cuenta, pero llevamos más de 60 años d bloqueo y como 15 que la gte pueda viajar. Porque no haberse dado CTA antes , o es que no les conviene. Bueno es mucho lo que se pueda decir pero mucho .
Gcias a estas tres personas por decir las cosas con tal son y como han Sido
Todo lo que dicen es la pura realidad. Gcias por decirlo pues es la primera vez que veo a tres intelectuales decir las cosas tales como son
Excelente el articulo de Fernando Perez en relacion a las protestas ocurridas en Cuba el domingo 11 de julio, es el resultado de tanta miseria y mala gestion del gobierno, de no escuchar la voz del pueblo cubano y reprimir la sociedad civil, es un verdadero estallido social aunque han intentado negarlo. Cuba despertó para siempre.
Interesante leer noticia desde la isla
Los que el pasado 11 de julio salieron a las calles a apedrear vidrieras, a tomar estaciones de policías, a agredir a agentes del orden, poner gomas arribas vehículos, incendiar y destruir contenedores de basura son delincuentes de mala calaña y elementos antisociales cuyo objetivo fue crear estado de pánico y alarma en una sociedad acostumbrada a vivir en paz. Ese es uno de los grandes logros de la Revolución que tomó el poder en 1959 y que los promotores de los actos del domingo 11, la mayoría desde afuera de Cuba, intentaron torpedear y destruir.
Tales escenas de bandidaje y delincuencia fue lo que matizó la jornada del domingo último. Realmente esperaba que los tres intelectuales dedicaran todo su arsenal a rechazar a atacar los hechos vandálicos vividos y la guerra descomunal de manipulaciones y mentiras que se orquesta contra Cuba desde las plataformas digitales. Increíble como en medio de esta guerra contra esta tierra los intelectuales hablen de represión cuando lo que se ha visto es una contención sin límites de las fuerzas del orden ante tales actos.
Corresponde al gobierno cubano continuar buscando nuevas formas de gestión, adoptando medidas urgentes para impulsar la producción de alimentos seguir eliminando trabas para desatar las fuerzas productivas en todos los sectores, utilizar las estructuras que posee para llegar más a los problemas puntuales que existen en los barrios u comunidades. Pero los hechos suscitados en Cuba hieren y afecta a la familia y la sociedad cubana y son caldo de cultivo ideal para quienes desde el exterior desean convertir a Cuba en un Libia, un Iraq, una Yugoslavia del 99, y ello no debe pasar por alto para nuestros intelectuales.
Venir a decir a estas alturas que los intelectuales cubanos ignoran que Cuba sigue siendo una plaza sitiada, da risa. ¿No lo sabemos acaso desde la instauración del bloqueo a la Isla como parte de la política de la Guerra Fría de Estados Unidos? ¡Vamos, hombre, lo sé desde que tenía nueve años! Lo que dicen esos intelectuales (cada quien en su especialidad) es tan cierto que resulta un dislate rebatir sus argumentos. Yo, que formo parte del mismo sector, no me molestaría en hacerlo. Si algún dirigente tiene miedo de admitir que ha cometido errores y prefiere callar antes que reconocerlo, que le deje el cargo a otro, pues lo honorable es asumir valiente y críticamente el error o los errores cometidos de forma pública. Me quito el sombrero ante quien lo hace, pero no suelo ser muy compasivo con los que se parapetan tras la retórica de las justificaciones. Todavía estamos a tiempo de rectificar y hallar “el tao”, como diría Lao Tse. Quiero seguir teniendo una patria libre y sobrerana, incluso socialista, donde quepamos todos, los revolucionarios y los que abrazan otras ideas, una patria plural donde el respeto al hombre sea ley. También gobernantes que no llamen “confundidos” o “delincuentes” a los que protestan pacíficamente contra medidas erráticas, mal pensadas y peor instrumentadas por la administración del país. Este es el momento de dialogar y de tratar de entendernos para solucionar los problemas. La retórica política no es política, es retórica. Saludos.
Muchas veces he visto noticias similares de otros paises(me refiero a hechos vandalicos, agredir a policias y prender fuego en las calles), por solo poner un ejemplo las protestas en Chile que parecen no terminar y sin embargo he escuchado a mas de un periodista decir en el ntv:…los chilenos salen a las calles a reclamar sus derechos…No podemos seguir permitiendo la sensura en pleno siglo 21, el derecho a protesta es inherente al ser humano
En los comentarios de los intelectuales parece que desconocen o intentan ignorar que además de las dificultades por las que atraviesa el pueblo debido al bloqueo, a las consecuencias de la pandemia y a la burocracia e ineficiente economía está la política agresiva del gobierno de Estados Unidos, al trabajo solapado en las redes sociales de los contrarevolucionarios reclutando delincuentes para realizar hechos vandálicos, a los llamados a una intervención humanitaria y a una intervención militar extranjera. Estos intelectuales y otros artistas pretenden ignorar todo eso, acusando al gobierno cubano de dictatorial y de violencia. Considero que nuestro presidente habló claro el 17 de julio en La Piragua y se trabaje por revertir la situación económica y social , pero como dice Carlos Balán, Cuba es una plaza sitiada, si el gobierno de los Estados Unidos persiste en su actuación genocida contra el pueblo cubano la situación económica no logrará mejorar lo deseado. La condición que pone ese gobierno es desechar nuestro proyecto revolucionario
Los presuntos análisis de estos intelectuales me recuerdan a los actuales políticos seudo-progresistas de los dos partidoa coaligados en España: PSOE y Unidas Podemos.
Un ministro de filiación comunista como es Akberto Garzón o Yolanda Diaz, tambièn ministra y del mismo partido “rojo”, han salido recientemente a la palestra del ridículo por sendos comentarios que les descalifican y demuestran que el dineral que perciben como salario mensual (sin contar las prebendas unidas al cargo,) que ronda los CINCO MIL euros acalla la ideología y deja al desnudo su verdadera calaña. El primero afirmó que “las bases militares estadounidensesn en territorio español eran muy útiles porque generan puestos de trabajo”.
La segunda, se refirió al vandalismo, insultos y agresiones de los y las “manifestantes pacííficos”, hablando del derecho a la libertad de expresión. Disiento del comentario porque en mi larga experiencia en Cuba, desde 1979, con estancias que superan más de un mes, todos años, excepto 2020 y 2021 por motivos pandémicos, he ratificado la enorme serenidad del pueblo ante los problemas y escaseces que se viven desde el 7 de febrero de 1962, fecha en la que John Kennedy decretó el bloqueo contra la nación más solidaria, culta, pacífica y heroica del mundo.
Parece que estos tres intelectuales no calibran la “libertad de presión y represión, política y mediática, que se padece en Europa. La libertad de expresión comienza por la condena de la violencia gratuita y eso fue lo que vimos en la prensa libre y no en los medios occidentales convencionales donde se felicitaban por las agresiones de esa caterva pacifista que aplaude Miami y el fascismo vestido de “demócrata”.
Ya he comprobado que la censura está presente en esta web que pretende ser respetuoisa con la libertad de expresión.
Siempre la retórica del “ Boqueo “,,creo q lo he leído en todos los comentarios de los q escriben en este block más de 20 o 50 veces..No es bloqueo es embargo comercial con excepción de medicinas y comidas,,EEUU exportó a Cuba más de 100 millones de dollares..Además q Cuba tiene comercio con muchos países como China,Rusia ,Canadá,Mexico,,para mencionar algunos.Aparte de la gran comunidad de cubanos q viven en el exterior y ayudan a sus familiares y amigos, a pesar de Los Altos cargos q le pone la aduana para entrar esa ayuda.Ahora el primer ministro de Cuba dice q todo el q visite a Cuba puede entrar toda la comida,medicinas y artículos de aseo libre de impuestos ,,porque no puso esa medida hace años y no haber esperado a esta crisis q tienen ( dónde está el Bloqueo ))Cuba tiene la solidaridad de gran parte del mundo y se niega a recivir cualquier ayuda q le ofrecen ..Entonces hay q ser más honesto,,Los problemas q tiene Cuba ahora es por la ineficiencia del gobierno y sus políticos ,su falta de libertades económicas y trabas.No soy política ni se de economía,,pero el sol no se puede tapar con un dedo,,Tomen nota..PS ,por lo demás los escritos de los profesionales Carlos y Alberto muy acertados,
Creo que se están mezclando los echos ocurridos el 11 , la palabra
Libertad, adolece de ser parte de los comentarios usuales y de opinión de casi todos los círculos sociales que conozco..está asociada al lemita patria y vida y el discurso mismense de libertad y democracia..para nada autóctono..de los de esta isla ..ahora..es impuesto por los medios, el reclamo de libertad y democracia estuvo ausente en la época de aprobarse y discutir la Constitución..reciente, muy bien pagado los críticos montados y lis disturbios bandalicos..
Sobre los artistas saben bien la chusmeria que han formado y lis shows orquestados también por quienes sabemos..no comparto las opiniones expuestas y el presidente se comportó a la altura de lo acontecido..hay formas de trasmitir inquietudes no marchando breyeramente por las calles es poko serio y apolitiko