Desde que aterrizó en Los Ángeles en 2014, la carrera de Ana de Armas avanza sin un paso en falso. Parece imposible encontrar más metas que pueda conquistar: su debut como “chica Bond” llega a los cines y Netflix ya promociona su película sobre Marilyn Monroe.
“¿En Hollywood? ¡Me queda todo por hacer!”, contesta, sin embargo, la actriz de origen cubano en una entrevista con EFE horas antes del estreno mundial de No Time to Die.
Ambición y determinación son las dos palabras que describen la actitud de la artista en la complicada meca del cine. Allí llegó hace siete años con un nivel de inglés básico. Ahora, es una de las protagonistas de la saga cinéfila con más flema británica.
“Yo creo que ha habido películas definitivas en mi carrera en las que he sentido un cambio o un paso hacia adelante”, analiza.
De Armas no tarda ni un segundo en repasar lo más destacado de su cronología: Blade Runner 2049 (2017), de Denis Villeneuve; Knives Out (2019), de Rian Johnson; y ya tiene claro el próximo: “Pienso que el siguiente va a ser Blonde, allí se verá hacia donde quiero llevar mi carrera”.
Primero James Bond, luego Marilyn Monroe
Netflix tiene previsto estrenar esa esperada cinta en 2022, en la que Ana encarnará a la mismísima Marilyn Monroe. Aunque la actriz no ha tenido descanso durante la espera y anda inmersa en la promoción de su papel en la nueva misión del Agente 007.
Después de incontables atrasos por la pandemia del coronavirus, la última película en la que Daniel Craig se pone en la piel de James Bond desembarca en los cines este fin de semana bajo una expectación que solo es capaz de despertar esta franquicia, que alcanza su entrega número 25.
Ana de Armas: cómo pasó de ser “la del Internado” a Marilyn Monroe en 10 años
“La gente tiene mucho amor por las películas de James Bond y las esperan con muchas ganas. Saben que no van a defraudar y que merecerá la pena”, describe la cubana.
Pero su carrera ha llegado a picos tan altos que las tornas se invirtieron y fue la marca “Bond” la que buscó a Ana de Armas.
El director de No Time To Die, Cary Joji Fukunaga, escribió el papel a medida de la actriz, una agente de la CIA cubana que se acaba de incorporar a la agencia y suple con confianza su falta de entrenamiento.
“Yo estaba un poco nerviosa, la verdad –recuerda sobre sus primeros días de rodaje–. Muchos actores y técnicos del equipo llevan 15 años haciendo estas películas con Daniel Craig, son como una familia”.
Por suerte, De Armas ya había coincidido con Craig en Knives Out, la película con la que consiguió su primera nominación a los Globos de Oro y que Netflix quiere convertir en una saga.
“Eso de romper el hielo ya nos quedaba atrás. Tenía otros problemas en los que pensar”, apunta.
Una de las preocupaciones de la intérprete era que su papel de “chica Bond” no fuera el de una mujer florero y para ello trabajó mano a mano con Phoebe Waller-Bridge, la artífice de la desternillante Fleabag.
“Me pareció refrescante y algo diferente a lo que hemos visto en otras películas de James Bond”, detalló De Armas.
Lo importante es la gente
¿Y después de James Bond y el ‘biopic’ de Marilyn Monroe?
La exprotagonista de la serie El Internado ha vuelto a reunirse con Ryan Gosling en el rodaje de The Gray Man, el film de suspense que preparan los hermanos Russo, responsables de la película más taquillera de la historia (“Avengers: Endgame”).
También tiene pendiente estrenar su película con Ben Affleck, Deep Water.
De La Habana a Madrid y de Madrid a Hollywood, De Armas ya tiene recorrido para poder elegir.
“No sé qué vendrá por el camino (…) El proyecto no sé cuál será, lo importante para mí es la gente” con la que trabajar, concluye.
Javier Romualdo / EFE