Suiza y Cuba se enlazaron hoy en el Festival de cine en español de Málaga (sur) con “Insumisas”, un filme dirigido por la suiza Laura Cazador y el cubano Fernando Pérez, que rescata la figura histórica de Enriqueta Faber, cirujana suiza y la primera mujer que ejerció la medicina en Cuba.
Una mujer adelantada a su tiempo, puesto que tuvo que hacerse pasar por un hombre para poder ejercer la medicina en la isla y es esa “esencia transgresora” de Faber la que los cineastas han tratado de recuperar, explicó hoy en rueda de prensa la debutante Cazador sobre un filme protagonizado por la actriz francesa Sylvie Testud y que compite en la sección oficial del festival.
“Nos interesaba mostrar la esencia transgresora, cómo elaboró una estrategia para vivir fuera del aplaste del orden establecido de la época”, señaló Cazador, que conoció la historia en 2004 cuando estudiaba cine en Cuba.
Se quedó “maravillada” por la vida de Faber y pensó que podría convertirse en una película, pero el proyecto no se puso en marcha hasta 2010 y el rodaje se retrasó hasta 2017.
Aunque en Cuba existen libros e incluso un documental sobre la figura de Faber, la “fuente más directa” a la que accedieron fueron los archivos del juicio a la que se le sometió, que fueron “la base para trabajar la historia”, según Cazador.
A partir de esos documentos, construyeron el filme, que cuenta cómo en 1819 la protagonista llega a Cuba como Enrique Faber, cirujano suizo, para encontrar a su hijo, secuestrado por una tía. Y tras establecerse allí y casarse con Juana de León, se descubre que en realidad es una mujer, por lo que es enviada a la cárcel y se enfrenta a un juicio.
Cazador calificó como “muy enriquecedora” la dirección junto a alguien “con una carrera muy importante” como Pérez, y cree que el hecho de haber escrito juntos el guion ayudó porque ambos tenían “muchas imágenes claras”.
Fernando Pérez, ganador del Premio Goya a la mejor película iberoamericana en 2000 por “La vida es silbar”, destacó que, además de ser esta la primera coproducción suizo-cubana, es el primer trabajo de Sylvie Testud en Cuba.
“Es una historia muy cubana, pero su protagonista es de origen suizo, y, más allá de orígenes y nacionalidades, nos interesaba la dimensión humana y la significación social de este personaje femenino que se adelantó a su tiempo, porque desafió y rompió todas las convenciones de género”, resaltó Pérez.
Respecto a la caracterización de la protagonista, desveló que, cuando Testud leyó el guion y aceptó el papel, les advirtió de que, aunque se vistiera de hombre, nada más aparecer en pantalla sería reconocida en Francia y en Europa.
“No nos interesaba un juego de identidades para que el espectador descubra quién es el personaje, nos interesaba su dimensión más allá de su caracterización”, precisó el codirector, que agregó que afrontaron la caracterización “de un personaje andrógino, un hombre femenino o una mujer masculina”.
Una película de la sección oficial de Málaga, en la que esta tarde se presentará la cinta mexicana “Las niñas bien”, dirigida por Alejandra Márquez Abella, y que transcurre en 1982, cuando una gran crisis económica está golpeando a México y su protagonista se enfrenta a su propia caída social.