Vestido de novia, ópera prima Marilyn Solaya, acaba de alzarse con el Premio Coral de la Popularidad en la recién concluida edición del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano.
El filme se une al multilaureado documental En el cuerpo equivocado, también realizado por Solaya, quien considera ambas obras como partes del mismo material fílmico.
Apoyada en las formidables actuaciones de Laura de la Uz, Luis Alberto García, Alina Rodríguez, Jorge Perugorría, Mario Guerra e Isabel Santos, el filme narra la historia de Rosa Elena y Ernesto, ubicados en la Habana de 1994. Ella, asistente de enfermería; él, jefe de una obra en construcción importante para el desarrollo turístico del país. Ambos se enamoran, se casan e intentan ser felices hasta que un secreto en la vida de ella amenaza esa armonía y los convierte en víctimas de la violencia, el prejuicio y los estereotipos de una sociedad que aún se encuentra regida por actitudes machistas y patriarcales.
Marilyn Solaya conversó con OnCuba sobre este filme, que podrá apreciarse muy pronto en los cines de la Isla.
¿Por qué tituló al filme como el poema de Norge Espinosa?
Por lo mismo que representa la frase, vestirse de mujer porque es un sinónimo de feminidad, En ese año 1994 se estrena Fresa y chocolate. Estábamos en el período especial, eran tiempos duros. El poema de Norge era todo un himno para esas personas y me pareció importante tenerlo de protagonista en ese contexto que ya comenzaba a tener voz propia. El título Vestido de novia es un gran símbolo.
¿Qué fue lo más interesante que descubrió sobre la vida de estas personas que reflejó en la película?
Lo que más me llamó la atención y es donde me conecto yo como cineasta y como mujer cubana, es cómo ellas cuando comienzan a vivir con este nuevo género reproducen todos los estereotipos y prejuicios de la mujer contemporánea. A mí me cautivan los temas de género porque siento que son problemas no resueltos aun en la sociedad cubana, asignaturas pendientes a pesar de la Revolución, de la política cultural y de todos los satisfactorios cambios que hemos tenido.
Creo que es mi misión abordarlo desde mi perspectiva de mujer plena, heterosexual, madre soltera de dos hijos, en un Instituto bastante masculino en donde solo tres mujeres, en las que me incluyo, han podido realizar sus largometrajes. Esa es la línea temática de mi obra.
¿Por qué eligió actrices para interpretar los personajes de los transexuales?
Porque ellas son mujeres, física y mentalmente y se asumen como tal. Justamente lo son aunque hayan nacido en el cuerpo de un hombre, equivocadamente. Cuando elegí ese título para mi documental, que no puedo aislar de esta cinta, me refería precisamente a esto. Ellas viven atrapadas en un cuerpo, que no es el que asumen como suyo, y así nacen con ganas de cambiarlo todo. Una vez que empiezan a vivir como mujeres, entonces lo son, por lo que tienen que ser interpretadas por féminas porque si no ¿de qué estamos hablando?, me pareció justo porque estoy contando historias de mujeres, porque en realidad lo son.
¿En el largometraje dónde comienza la ficción y acaba el documental?
La película está inspirada en hechos reales que no corresponden solo a la vida de Mavi, la primera operada en Cuba de reasignación de sexo, sino a la de todas. Me apropie y partí de una historia real, el drama humano que viven esas personas, todo por lo que pasan, no solo ellas, sino los esposos y familiares, todo su entorno, eso me llamó mucho la atención.
¿Cuál considera que fue el mayor reto asumido durante esta realización?
Demostrar primeramente a la institución de que yo podía asumir el proyecto, que confiaran en mí y lograran comprender la complejidad del tema y lo necesario de su abordaje, pues no vivimos en una burbuja, aislados, pues es un tema universal y que está en todas partes. Mi película también toma el tema de la violencia, el tema de la inequidad, de la ignorancia sobre lo que son las relaciones de género y los estereotipos. El género es una construcción social, es un invento todo lo que se la atribuye a cada género. Yo en el filme propongo un hombre diferente, más sensible. Trabajo con las masculinidades, Julio César González Pagés es mi asesor, nos encanta también enfocarlo desde la perspectiva de los hombres, género no es solo ser mujer, es también ser hombre y en la medida en que los hombres logren cambiar esa forma tan cerrada de ver la vida viviremos con más armonía y plenitud.
Felicidades a Marylin Solaya por regalarnos ese film y hacerle entender a Cuba, que se ha quedado con una mentalidad retrógrada y machista, que el mundo está cambiando y evolucionando. Un pais que lucha cada día por la cultura y el progreso continuará siendo subdesarrollado si no comparte la idea de la legalización del matrimonio homosexual, la adopción de niños por estas parejas así como también la integración total de los transexuales. Es necesario comprender que son personas que al igual que las demas estudiaron una carrera y tienen derecho a ejercerla dígase: derecho, medicina etc. No se puede discriminar solamente por su apariencia o por que alguien opine que no está correcto