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Luego de cumplir tres décadas de fundadas el año pasado, las célebres Romerías de Mayo regresaron a la carga este viernes en Holguín, dedicadas a las industrias culturales.
El evento, que desplegará sus actividades hasta el próximo día 8, iniciará esta noche con su acostumbrado concierto pre-romerías, que correrá a cargo del cantautor cubano Gerardo Alfonso, en la sede de la Asociación Hermanos Saíz en la ciudad.
Esta vez, el evento cuenta con una mayor asistencia extranjera que en convocatorias más recientes, aseguró la directora de Cultura de esa provincia, Yakelín Tapia, citada por Prensa Latina.
En tanto, la Asociación Hermanos Saíz anunció la participación de más de 350 artistas cubanos, de ellos 100 invitados de todas las provincias del país.
Esta edición de las Romerías mantiene sus tradicionales Congreso de Pensamiento Memoria Nuestra; el espacio literario Palabras Compartidas; así como el evento mediático Bloguerías de Mayo y Babel, como epicentro de las artes visuales, agrega el medio.
Las Romerías, el origen
Presumiblemente, desde finales del siglo XVIII, la Romería de la Cruz de Mayo es uno de los eventos de carácter religioso y popular introducidos en el territorio holguinero con la colonización española.
La historiografía católica sitúa por estas fechas el hallazgo en Jerusalén por Elena, madre del emperador Constantino, del madero en que fue crucificado Jesús. Por eso, el Santoral recoge el 3 de mayo como Día de la Invención de la Cruz, nos cuentan unos apuntes del periódico local Ahora.
Según la investigadora holguinera Haydée Toirac, la Romería se conocía también con el nombre de Día de la Cruz y su surgimiento se remonta a la colocación de una cruz de madera en lo alto del cerro del Bayado por el prior de la ermita franciscana, Fray Antonio Alegría, en 1790.
Elevada en 270 metros en el norte de la ciudad de Holguín, la colina comenzó a ser llamada Loma de la Cruz y se hizo común la peregrinación del 3 de mayo.
De tal manera surgió la Romería, devoción mezclada con la fiesta popular en las proximidades de un santuario.
Ese día el pueblo se daba cita en la cima para hacer rogativas, encender velas e incienso luego de peregrinar desde la Iglesia de San Isidoro por la calle de igual nombre, hoy Libertad.
La parte laica de la festividad se realizaba en las cercanías de la loma, con bailes populares y otros caseros, refiere Toirac.
En 1955, se sustituyó la cruz original por una más duradera, con su base de piedra y concreto, en un conjunto diseñado por el arquitecto Hernández Columbié, que inauguró con una misa Monseñor Ángel Hernández. La tercera se colocó en 1999, pues la anterior fue dañada por el huracán George.
Caídas en desuso popular a fines de los años 50, no fue hasta mayo de 1994, en medio de otra profunda crisis socioeconómica, que las Romerías de Mayo fueron reinventadas como proyecto de la Asociación Hermanos Saíz, que agrupa a jóvenes creadores de toda la isla.