El cantautor y pintor Luis Eduardo Aute murió este sábado a los 76 años de edad, en una clínica madrileña, aquejado por un cuadro respiratorio.
Aute ha sido considerado como uno de los referentes de la canción de autor en España pero su obra poética, musical y pictórica será recordada en todo el mundo iberoamérico.
Hace algunos años estaba retirado de los escenarios tras sufrir un infarto que le tuvo en coma durante meses.
En 2018, sus amigos, compañeros de música y varios artistas de distintas generaciones le rindieron un hermoso homenaje a través de un concierto, en el que participaron, entre otros, Silvio Rodríguez, Joaquín Sabina, Joan Manuel Serrat, Ana Belén, Massiel, Víctor Manuel, Pedro Guerra, Rozalén, Vicente Feliú, Ismael Serrano, Jorge Drexler.
Luis Eduardo Aute nació el 13 de septiembre de 1943 en Manila, Filipinas y se trasladó a los ocho años con su familia a España. A los dieciséis presentó su primera exposición de pintura individual.
En 1967, Massiel grabó dos canciones suyas: «Rosas en el mar» y «Hasta mañana». Aute se resistía a ser él mismo quien interpretara sus textos hasta que se convirtió en uno de los cantautores más conocidos y celebrados en España, que hoy llora hoy su muerte en medio de la pandemia de coronavirus que ya ha cobrado la vida de más de 11.700 personas.
En su blog, el trovador Silvio Rodríguez ha publicado este sábado, sin más comentarios la canción de Aute, “De paso”:
El poeta y narrador cubano Alexis Díaz Pimienta también compartió estos versos hechos en vida como homenaje al artista:
Auténtico Aute
Aute, músico, pintor,
cineasta, escultor, poeta,
escritor de otro planeta,
Auté-ntico cant-aute-or.
Luis Eduardo Aute, actor.
Luis Eduardo Aute, artista.
Luis Eduardo Aute, arpista
del idioma (arpa verbal).
Polígrafo atemporal.
Creador renacentista.
Hay tanta Aute-nticidad
en tu puzzle creativo,
que en cualquier Aute estás vivo
y eres una “Auteridad”.
Tu vida es, en realidad,
muchas vidas, no una vida.
Nota musical prendida
a un teclado y a un pincel,
entre el lienzo y el papel
en diez Autes dividida.
Haz vivido “En solitario”
dentro de un “Rito” que suma
pequeños golpes de “Espuma”
al mar del vocabulario.
Escritorio y escenario
te han visto “De par en par”.
en un “Sarcófago” anclar
tus poemas de “Babel”,
“De par en par”, con la piel
como “Rosas en el mar”.
“Al alba” fuimos testigos
de tu “Fuga” (fuga en calma),
y te vimos dar el “Alma”
igual que un pan “Entre amigos”.
“Al alba” abriste postigos
a un palacio musical,
poética catedral
que puso, vaya fortuna,
como himno de “El Giraluna”
la voz del “El sexto animal”.
Y mucho aprendió el lector
tras tu poético encierro
sobre las formas de un perro
al que llamabas “Dolor”.
Entre el cantor y el pintor
se crió el “Animalhito”.
Y ahora ves, te revisito,
hurgo en la voz que eternizas
fingiendo que “me auterizas”
a participar del mito.
Y detrás de mí, felices,
“El niño y el basilisco”
te erigen un obelisco
en diferentes países.
Tú te sorprendes, y dices
que no hay “Aute-rización”.
Pero es lógico (perdón)
que hasta la voz de te aflaute,
ya que el auté-ntico Aute
dio la Autentificacion.
Auténtico literato.
Auténtico cantautor.
Auténtico (y buen) pintor
de tu propio Auterretrato.
Auténtico actor, sensato.
Auténtifico escultor, loco.
Auténtifico ser barroco.
Auténtico (y buen) cineasta,
tan Luis que Eduardo desgasta
a un Aute que sabe a poco.
Luis le dice a Eduardo: pinta.
Eduardo responde: canta.
Y Aute enjuaga su garganta
con tibios chorros de tinta.
La voz le sale distinta
al hombre, al bardo, al actor,
al cineasta, al escultor.
Todas sus voces a coro:
Aute-gestión de un sonoro
y Auténtico Aute de amor.
(Alexis Díaz-Pimienta)
https://www.youtube.com/watch?v=WcPwrT2WVEQ
EPD