¿Quién lo diría? Hace ya veinte años que Gerardo Alfonso escribió el tema Sábanas Blancas. El tiempo parece no haber pasado desde que el cantautor inmortalizó en sus versos a La Habana del Capitolio, del Prado con sus leones y el largo muro del litoral. Y es que las sábanas blancas colgando en los balcones se han convertido en una imagen de ayer, hoy y siempre.
El tema ha sido muy significante en la carrera de Gerardo, quien declaró en conferencia de prensa lo mucho que le agradece: “además de ser una canción que comunica el sentimiento colectivo de los cubanos, es también un tema que me ha ayudado a sobrevivir todas las inclemencias”.
“No se trata de que ella me mantenga en el número uno de ninguna lista, sino que me ha ayudado a permanecer vivo en todas las épocas y ante los vendavales”, añadió Alfonso.
Sábanas blancas lleva a su autor, dos décadas después de haberla creado, a emprender una gira por diversos escenarios cubanos. Para el compositor el hecho de que el tema sobreviva y esté latente en el pueblo es un motivo de celebración.
Este sábado Gerardo comenzará las presentaciones que desde Ciego de Ávila hasta Pinar del Río festejarán el cumpleaños de una de las composiciones que con mayor propiedad define la trama urbana capitalina.
Además el creador del ritmo guayasón arriba a los treinta años de carrera artística. El aniversario es otro motivo para celebrar, aunque el músico ha preferido homenajear a Sábanas Blancas, banda sonora de una hermosa dama: La Habana.
En los conciertos hará una retrospectiva y recordará temas esenciales dentro de su trabajo como Yo te quería María y Son los sueños todavía, minutos sonoros en los que Gerardo habla de los sueños y las utopías de un hombre esencial: Ernesto Guevara. Esta composición, una de las canciones más emblemáticas sobre el Che, cumple cinco lustres.
Alfonso llega a las tres décadas de labor artística lleno de ideas y ganas de hacer. En el periplo por varias provincias del Centro y Occidente cubanos el cantautor presentará el proyecto Té de Jazmín, integrado por un grupo de muchachas que hace algún tiempo lo acompaña en sus actuaciones.
Gerardo Alfonso enriqueció el Movimiento de la Nueva Trova con sus composiciones míticas, sus conciertos guitarra en mano y su particular manera de llegar al público.
Lleva más de un cuarto de siglo creando música y maneras de decir, dejando a su paso un rastro de canciones que nos acompañan, pues resumen lo que muchos sentimos y no sabemos explicar.