Daniel A. Fernández
Los cinco púgiles que subieron al ring del Coliseo de la Ciudad Deportiva este viernes salieron airosos en sus respectivas peleas, como parte de la IV Serie Mundial que organiza la AIBA. El quinteto de boxeadores presentado por la franquicia Húsares de Polonia apenas ofreció resistencia ante la evidente superioridad de los Domadores cubanos. Este resultado ratificó a la escuadra de la isla en el primer lugar del grupo B, ahora con 21 puntos y balance de 31 victorias y solo 4 reveses.
En el primer combate del cartel Yosbany Veitía (49kg) se impuso con facilidad a Sebastian Jagodzinski. El espirituano se dedicó a boxear desde fuera, con repetidas entradas y salidas. Combinó de manera exquisita, a ratos aceleró el ritmo de golpeo y el resto del tiempo dejó que el reloj caminara. La decisión de los jueces por unanimidad 3-0 (50-42, 50-44, 50-44). Este fue el cuarto éxito consecutivo del bronce universal de Almaty, que se consolidó en la cima del ranking de la división en la WSB.
A continuación el granmense Marcos Forestal (56kg) derrotó a Sylwester Koslowsky. El veredicto 3-0 (50-45, 50-45, 50-44). El polaco logró llegar con su derecha en algunas oportunidades al rostro de Forestal, aunque atacando siempre de manera desordenada y poco vistosa. Más allá de esas contadas conexiones que permitió, el cubano supo solventar sin muchas dificultades el pleito, que significó su segundo triunfo de la lid, en ambos casos como sustituto de Robeisy Ramírez, otra vez suspendido por ausencias repetidas a los entrenamientos.
Las peleas de Yasnier Toledo (64kg) y Ramón Luis (75kg) resultaron clásicos paseos sobre el encerado. Sus víctimas en la noche fueron Damian Kiwior y Piotr Grendke respectivamente. Los ganchos y rectos de Toledo fueron un látigo constante para su rival, amonestado en par de ocasiones por bajar la cabeza. La votación en las tarjetas 3-0 (50-43, 50-42, 50-42). Mientras Luis dio una clase magistral: apenas se desgastó, su jab tuvo una efectividad envidiable y durante el asalto final se ganó los aplausos de los espectadores con repetidos movimientos de torso para esquivar los golpes lanzados por el europeo. Igual 3-0 con idénticos 50-45.
La escena quedó lista entonces para que en los 91 kg el guantanamero Erislandy Savón diera el perfecto a los Domadores. Tan solo necesitó minuto y medio para poner fuera de combate a Lukasz Zygmunt. El KO no se debió a un golpe limpio y contundente, sino a un “manotazo” con la derecha que hizo mella en la parte trasera de la cabeza de Zygmunt. De igual forma este se acuclilló sobre el encerado y pareció estar muy contento con la decisión del referee de finalizar allí mismo las acciones.
Los cinco triunfos alcanzados ayer por la armada cubana completaron la barrida (10-0) frente a la selección polaca. El próximo duelo de los Domadores está pactado para el próximo 8 de febrero, cuando visiten Rusia.
